Revisé las últimas fotos de la sesión y le agradecí al staff por haber hecho un buen trabajo. Entré al vestuario y me cambié para poder irme a ensayar. Me saqué el exagerado maquillaje y apliqué uno mas natural. Tomé mis cosas y salí. Vi a Tiffany esperándome en la puerta y dos guardias a su lado. Tomé una bocanada de aire antes de salir. Sonreí a las cámaras mientras mis guardias abrían paso y caminábamos hacia la camioneta. Entré y los fotógrafos se pegaron a la camioneta como si su vida dependiera de ello. Los miré un poco irritada pero fingí no estarlo. Tomé mi celular y publiqué dos fotos del detrás de escena de la sesión de hoy. Rápidamente muchos me gusta y comentarios colapsaron mi celular. Lo puse en silencio y lo apagué. Carraspeé ligeramente y me acomodé en el asiento intentando relajar un poco mis tensos músculos. Miré por la ventana. Las calles de Seúl comenzaban a cubrirse con la blanca nieve que caía y eso me encantaba. Saqué una foto y la subí a mi historia.
Llegamos a la empresa y nos bajamos. Afortunadamente no había tantos fotógrafos así que fue mas sencillo entrar. Saludé a las personas que se encontraban ahí y subí al piso 5, donde se encontraba mi entrenadora. La saludé con una sonrisa y comenzamos a calentar. Había grabado el title track así que tenía que preparar la coreografía. Me explicó los movimientos y comencé a repasarlos repetidamente. Ensayé la canción con las bailarinas varias veces y dimos por finalizada la sesión de hoy. Me fui a mi casa para almorzar y bañarme. Tenía dos horas libres hasta mi primer entrevista. Llegué al edificio donde vivía. Salude al portero y subí a mi casa. Abrí la puerta y acaricié a Kai y a Kuma quienes me recibieron alegremente. Me tomé una ducha y calenté un tazón de ramen que tenía. Cuando terminé, dejé las cosas ahí y me acosté en el sillón. Puse una alarma y me dormí.
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El sonido irritante de la alarma me despertó. Gruñí molesta y me levanté del sillón. Me estiré y fui al baño a asearme. Salí del baño y tomé mis cosas antes de salir. Salude a mis perros y me fui. Cuando llegué abajo el portero me esperaba con la puerta abierta. Hice una reverencia mientras le sonreía levemente y corrí a la camioneta.
—¡Dios!—Chillé al ver a Jisoo sentada en la parte trasera de la camioneta.
Ella soltó una carcajada y la miré mal.
—Hola Kim—Saludó.
—Si si hola Jisoo—Contesté de mala gana—¿Y Tiffany?
—Está en la empresa, creo que está hablando con los entrevistadores.
Asentí murmurando un sonido de afirmación. Había empezado a llover y hacía un poco más de frío. Pasé todo el camino con la cabeza en otro lado que no me di cuenta de que ya habíamos llegado. Bajé de la camioneta cabizbaja, esquivando a los fotógrafos. Entré y casi corrí para escapar de ellos. Caminé hacia mi vestidor y me cambié. Me maquillaron mientras yo ensayaba lo que diría en la entrevista.
—¡Dos minutos!—Gritó un personal del staff.
Tomé aire y me dirigí a la sala donde se haría la entrevista. Saludé a la entrevistadora y me senté. Jugué con mis dedos ansiosamente y sentí un escalofrío recorrer mi columna. Me enderecé intentando calmar mis nervios y la entrevista dio inicio. Comenzamos conmigo presentándome y aquellas preguntas que casi todos hacen. Me preguntó sobre el nuevo álbum, así que, siguiendo las órdenes que mi CEO me había dado, di la noticia sobre un nuevo álbum y una nueva etapa. Comenzó a querer indagar sobre mi vida privada, haciendo preguntas sobre mis relaciones amorosas y demás. Le dirigí una mirada de súplica a Tiffany, quién le susurró algo al camarógrafo y la entrevista finalizó. Me despedí apresuradamente y salí de ahí. Sentí la mano de Tiffany tirar de mi brazo y tomarme el rostro.
—Nada de eso saldrá en la entrevista—Se apresuró a decir.
Sentí una leve sensación de alivio al saberlo, pero rápidamente esa sensación se esfumó al pensar en que se podía filtrar o lo podían subir de todas formas. Sentí mis ojos llenarse de lágrimas y, casi en un instinto, me abracé a Tiffany. Acarició mi pelo y me alejó un poco de ella. Entramos en el camarín y me pasó una botella de agua. Miré el reloj, media hora para mi próxima entrevista. Me aclaré la garganta y me miré en el espejo. Agarré una toallita desmaquillante y me la pasé por debajo de los ojos. Me arreglé un poco y comencé a cambiarme. Sentía la mirada de Tiffany en mi espalda, sabía que queria decirme que no hiciera esto. Terminé de cambiarme y me dirigí a la puerta.
—Jennie—Dijo pero yo ya había salido.
Apreté la mandíbula y me reprendí a mi misma por ser tan idiota. Siempre hacía lo mismo, siempre terminaba mintiendo.
