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Al finalizar la larga jordana escolar, la limusina de los Sakamaki se encontraba estacionada frente a la altísima y oscura academia. La medianoche estaba por hacerse presente cuando comenzaron el camino de regreso hacia la mansión. Yui se encontraba sentada entremedio de Ayato y Shu, mirando indiscretamente el perfil del rubio, mientras que Subaru codeaba a la Vander con tan poca discreción que Laito comenzó a reír. Reiji observó el movimiento de Subaru y la postura de Yui, sonriendo para si mismo, después de todo, su pequeña artimaña estaba teniendo éxito.
Al llegar a la oscura construcción, Victoria corrió a darse un baño caliente y luego en dirección a la biblioteca, necesitando investigar sobre algunas cosas que rondaban por su mente. Cuando consiguió el libro que quería y se disponía a agarrarlo, Ayato empujó su anatomía contra la estantería, tomándola por sorpresa.
- Cómo demonios abriste la puerta? - Preguntó, mientras posicionaba una de sus manos sobre la cabeza de la menor.
- Creí que sabias la ciencia básica de abrir una puerta, tomas el picaporte entre tus manos y empujas. Estos vampiros de ahora, cada día más ignorantes. - Desde su posición, Victoria podía observar con totalidad el rostro de Ayato, pensando por unos leves instantes que el chico era bastante atractivo, más cuando se encontraba totalmente serio. Su cabello lacio pelirrojo que caía hacia delante con delicadeza, por lo que su portador debía acomodarlo con su mano cada cierto tiempo, sus fieros ojos verdes y su bien definido rostro.
- Vander, no tengo todo el día, lo repetiré nuevamente, cómo demonios abriste la puerta? La vi perfectamente cerrada, trabada inclusive con más fuerza de la que podría existir en todo tu frágil cuerpo. - Ayato acortó más la distancia mirándola a los ojos.
- Simple, descarga de adrenalina. - La castaña observaba a su contrario inmóvil, sin demostrar absolutamente ningún signo de incomodidad.
- Miénteme de nuevo y juro que te fracturaré algún hueso. Piensa lo que dirás Vander, porque la vida de alguien como tú puede terminar tan rápido, en menos de 30 segundos. - La chica impulsó el peso de su cuerpo hacia un lado, realizando una maniobra que le permitió esquivar al trillizo e intercambiar posiciones. Estaban extremadamente cerca, en el mismo estado que antes, solo con el pelirrojo bajo su disposición.
-Intenta solamente tocarme, simplemente lastimarme, y el que amanecerá con el cuerpo fracturado serás tu, no yo. Para mi es increíblemente fácil deshacerme de ti, solo basta con una palabra de mi parte. - Mientras hablaba, Vic mantenía entre sus manos el cuello de la camisa del chico, soltándolo al terminar de hablar, para girar sobre sus talones y retirarse con seguridad.
Ayato soltó el aire retenido en sus pulmones, quedándose exactamente en la misma posición en la que Vic lo había dejado. Llevó una de sus manos a su cabello y la otra al cuello de su camisa, levemente conmovido. Yui jamás hubiera reaccionado así y es por eso que Victoria era muchísimo más interesante para él, era una presa mucho más complicada de cazar.
Mientras tanto, Laito caminaba por los corredores de su hogar mientras tarareaba el ritmo de alguna canción pegadiza. Cuando quiso darse cuenta, se encontraba en la entrada de la habitación de la heredera de los Vander, esperando hablar con ella en algún momento. Como si la hubiera invocado, Victoria apareció detrás de él, provocando una sonrisa en el rostro del castaño.
- Lai, que se te ofrece?- Preguntó la chica con cierto tono de amabilidad, no porque su día haya sido un completo desastre debía tratar mal a todos los demás. Después de todo, Laito no era responsable de la idiotez de sus hermanos.
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CAPITAL SINK - DIABOLIK LOVERS
FanfictionCAPITAL SINK/PECADOS CAPITALES Con la llegada de la hija mayor del clan Vander a la mansión Sakamaki, la vida de los 6 hermanos se verá sacudida. Ella era la avaricia personificada. Tragedias, romances, alianzas y traiciones, todo se puede esperar...