Capítulo 5

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-Estoy aquí -avisé a Cristal cuando entré al estudio donde harían la entrevista. Ella de inmediato me observa y me sonríe.

-Genial, pásale algo de maquillaje a Eiden. No queremos que su rostro se vea brillante por la luz.

Asentí yendo hacia Eiden, que estaba sentado bebiendo un poco de agua y mirando su celular.

-Hey -él me ve llegar desde el espejo del tocador- ¿Estás bien?

-Sí, ¿por qué no lo estaría? -pregunté agarrando el polvo de base y una brocha.

-Pues no te veías muy alegre con Tristan, además... recuerda que puedo sentir perfectamente que no lo estas -comentó. Suspiré empezando a aplicarle el polvo levemente por su rostro.

-Estoy bien, no hay necesidad de preocuparse. Solo tienes que concentrarte en encantarle a la cámara, como siempre.

Mi comentario lo hizo sonreír y mirarme de reojo, aunque cerró los ojos cuando cuando pasé la brocha por debajo de estos. Estar tan cerca de él se me hacía complicado, porque mi respiración se entrecortaba, ¿le estaba respirando en el rostro? ¿le ha de estar incomodando? Quizás deba alejarme más o respirar menos. Dios... ¿sentirá lo nerviosa que estoy por él? Por supuesto que sí, seguramente hasta escucha mis latidos acelerados. Joder, que vergüenza.

-No te olvides de ponerle en el cuello también, o se notará la diferencia de color -Cristal pasa tras de mí y se va enseguida.

-Am... levanta un poco la cabeza -pedí y él lo hizo.

-¿Así?

Dudé un poco pero entonces sujeté su barbilla con mis dedos índice y pulgar para levantarla un poco más y aplicarle polvo en el cuello hasta el borde de su remera. Estaba nerviosa, jamás creí que podría llegar a tocar a Eiden Castle en todas vida. Debía controlarme.

-Listo -comenté dejando la brocha y el polvo.

-Hm... me estaba gustando, era muy suave -comentó con un leve quejido-. Incluso podía haberme quedado dormido.

-Pues no sería conveniente siendo que tienes que salir allí -respondí aguantando un poco la risa.

Él resopla mientras se levanta justo cuando lo llamaron para posicionarse en su lugar. Me sonríe antes de alejarse de mí y va hasta donde estaba Tristan, las cámaras los apuntaron al igual que los reflectores y la entrevista comienza. Dejé escapar un suspiro por lo bien que Eiden se veía al hablar con seguridad y naturalidad.

-Si piensas que tienes una oportunidad con él... será mejor que lo olvides -Cristal aparece a mi lado de brazos cruzados.

-¿Ah?

Eso me desconcertó. La miré confundida y sintiendo algo de molestia por su comentario tan repentino y personal, además de que no era ella alguien que pudiera decirme de qué olvidarme.

-Se nota que te gusta, como a todas... pero hay varios motivos por el que no puedes ser tú la que esté con él.

Aparté la mirada frunciendo los labios y cruzándome de brazos. Quería dejar ese tema, pues no me estaba agrandando, pero a la vez quería entender porqué me decía esto.

-¿Qué dices? ¿Por qué me hablas sobre esto así de la nada? -pregunté.

-Te lo digo porque me has caído bien... y no me gustaría que te decepcionaras -suspiró-. No puedes estar con él porque a Eiden ya le gusta alguien más, ¿por qué crees que escribió Fairytail?

Abrí los ojos de par en par mientras volteaba a verla sorprendida. Cristal suspira profundo.

-Lo siento -ella se aleja de mí, dejándome pensativa y ya decepcionada.

ENTRE GARRAS Y ALASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora