¿Amistad o amor?

Uno solo

El tiempo puede ser tu mejor amigo, pero también tu mayor enemigo; el tiempo pasa como lo hacen las aves que migran sin detenerse, sin pensar en lo que dejan atrás, con el único objetivo en mente de llegar a su destino. Y así como el tiempo no se detiene tampoco lo hacen las cosas a su alrededor: el amor, los sueños, las ilusiones, el dolor, el sufrimiento y la felicidad. Todo avanza y todo pasa.

Por fin la semana de pruebas llegaba a su fin, había pasado más rápido de lo esperado y toda la Universidad se sumía nuevamente en la calma y tranquilidad aunque fuese por un lapso determinado.

-Al fin la última prueba- exclamó Taehyung sentándose junto a Jimin y Hobi que ya esperaban en la habitual mesa de la cafetería.

-Gracias al cielo y a los astros- dijo Hobi elevando sus manos en son de alabanza.

Una risa se escapó de los labios de aquellos tres amigos, mientras seguían comentando que tan difíciles o facíles fueron las pruebas durante la semana.

-Ese profesor cree que uno es Mozart o Beethoven- se quejaba Yoongi mientras llegaba a la mesa junto a Jungkook.

-Creo que Bach y todos los demás- dijo el pelinegro.

-Por lo que escucho no les fue muy bien- comentó Tae mientras hacía espacio para que su novio se sentara junto a él.

-Ese profesor está loco- contestó Min -por algo le dicen "El filtro"- continuó.

-Tuvimos que hacer una composición siguiendo un montón de requisitos en menos de dos horas- añadió Jungkook apegándose a Tae en busca de ese confort que el mayor siempre le daba después de un día difícil.

-Pero ustedes son los mejores- dijo Jimin -Estoy seguro que les va a ir muy bien- dijo brindándole una sonrisa tranquilizadora a ambos.

-Bueno, bueno- palmeó Hobi llamando la atención de todos -Ya lo hecho, hecho está no hay que perder el tiempo lamentándose o renegando, mejor pensemos en una forma de salir a distraernos y disfrutar de que al fin terminaron las pruebas- dijo entusiasmado.

-Y si vamos al parque de diversiones- preguntó Jimin -Tengo mucho tiempo de no ir y la semana pasada inauguraron una nueva atracción- comentó.

Todos se volvieron a ver y con miradas estuvieron de acuerdo en ir, aunque a Yoongi no le gustara mucho pues las aglomeraciones no era lo suyo, pero por Jimin hasta al infinito y más allá. Hoseok no estaba tan convencido, ya que los juegos de altura no eran de su agrado, pero con tal de distraerse y pasar un día junto a sus amigos aceptó. Después de ponerse de acuerdo con la hora y de quedar en que Hobi pasaba por Jimin y Suga, y los novios llegaban solos cada uno decidió marcharse a su casa.

En esas últimas semanas a pesar de los horarios Jimin trataba de pasar tiempo junto a su mejor amigo y de esta manera se fue dando cuenta que ya no le incomodaba verlo junto a Kook, que ya aquel sentimiento dentro de sí  no acudía a él cada vez que veía al menor de todos y eso le alegraba porque en realidad él quería la felicidad para sus amigos y también quería ser feliz.

-¿Estás bien?- fue interrumpido por una voz que le sacó de sus reflexiones.

-Sí, lo estoy- contestó volviendo su mirada, que no se había dado cuenta pero la tenía fija en aquella pareja que caminaba tomada de la mano rumbo al estacionamiento; encontrándose con aquellos ojos de aspecto felino que últimamente estaban muy pendientes de él.

-Seguro- volvió a preguntar Yoongi.

-Sí- contestó Jimin -Estoy bien, ya no duele- concluyó.

-Escuchar eso me alegra- comentó Suga asomando una pequeña sonrisa en sus labios -Mereces ser feliz Jimin- agregó.

-Todos merecemos ser felices- dijo Jimin, colocando adecuadamente su bolso y haciendo un gesto de despedida con su mano mientras se marchaba hacia la salida.

-Algunos no nacimos para serlo- susurró Yoongi caminando también hacia la salida.

El sábado llegó y con ello la tan esperada salida de los cinco amigos, la primera después del regreso del rubio. A las diez en punto ya se encontraban todos en la entrada del Parque de diversiones a la espera de que la gente fuese ingresando. Una vez dentro del lugar decidieron empezar su recorrido por las atracciones en los carros chocones, algo suave para gusto de todos. Y así de atracción en atracción, entre risas y bromas el tiempo fue pasando y la tarde llegó y junto con ella la noche no demoró.

-Una vez más por favor- decía Jimin -La última en la Rueda de la fortuna- pedía mientras miraba a todos con un puchero.

-Yo paso- dijo Hobi -Ya mis nervios tuvieron suficiente con una vez y eso que me obligaron- comentó.

-Nosotros sí vamos- dijo Jungkook y Tae asintió.

-Yoongi, por favor- dijo Jimin dirigiéndose al mayor, pues no quería subir solo.

Este viendo como Jimin hacía aquellos ojitos que parecía un cachorro no tuvo más remedio que aceptar y de esta manera ser testigo de tan deslumbrante sonrisa por parte del rubio.

-Vamos- le dijo Tae sacándolo del embobamiento en el que estaba.

Los cuatro amigos subieron a la Rueda de la fortuna, Tae y Kook juntos como era de esperarse, y Jimin y Yoongi, la vuelta inició y una vez arriba ambas parejas pudieron observar lo esplendida que se veía la ciudad desde lo alto, las luces se veían magníficas. Jungkook atrajo a Tae hacia sí mismo envolviéndole en un abrazo y depositando un beso en su pelo, así se quedaron hasta que empezaron a descender. Por otra parte, la otra pareja simplemente se quedó observando la belleza del paisaje aunque Jimin no se percató de que para Yoongi el paisaje más hermoso era él, pues nunca apartó sus ojos de aquella sonrisa que mantuvo el rubio durante toda la vuelta en la atracción.

Una vez finalizado el recorrido decidieron ir a un restaurante a cenar pues ya era tarde y sus estómagos clamaban por algo de comer. En el restaurante comieron y rieron juntos, aprovechando cada minuto que el implacable tiempo les daba para estar juntos, para disfrutar de su amistad.

-Estoy tan feliz de tener a Jimin de nuevo- comentó Tae una vez habían llegado al departamento del pelinegro.

-Sí, es verdad- dijo Jungkook mientras buscaba su pijama para darse un baño.

-Creo que después de que ustedes hablaran las cosas mejoraron mucho- prosiguió el castaño.

-Es cierto, creo que eso fue muy bueno- estuvo de acuerdo Kook -No solo para él, sino para nosotros- agregó.

-¿Para nosotros?- pregunto Tae acercándose a su novio quien se encontraba sentado al borde de la cama.

-Sí, para nosotros- asintió el menor -Pues siento que después de que Jimin dejó de evitarnos nuestra relación ha mejorado- confirmó.

-Tienes razón- dijo Kim después de analizarlo un poco -Es verdad que después de que Jimin aceptara por completo lo nuestro me siento más libre, estoy más feliz y no tengo miedo de amarte y dañar a alguien- agregó mientras se acomodaba a horcajadas sobre el pelinegro.

-Estoy seguro que nuestro amor lo único que puede brindar es felicidad- dijo Kookie acariciando la espalda de su novio bajo la camisa de este -Sé que a veces amar duele o hace daño, pero también sé que trae felicidad y ahora yo soy feliz- mencionó esto muy cerca de los labios del contrario.

-Yo también soy feliz- dijo Tae rozando sus labios con los de su novio.

Una sonrisa se dibujó en los labios del pelinegro y colocando su mano en el cuello del contrario lo atrajo para así fundirse en un beso, uno que no solo demostraba cuánto se amaban, cuánto se deseaban, sino un beso que expresaba lo felices que eran, porque sí ahora eran completamente felices, libres para amarse y eso fue lo que hicieron esa noche, se amaron no solo en cuerpo, sino en alma; entregando todo de sí porque ahora se sentían libres para amarse el uno al otro en cuerpo y alma, para fundirse y ser uno solo por el resto de sus días.

                           FIN

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Sorpresa!!!!

Falta el epílogo.
Nos leemos después.

Gracias a tod@s por el apoyo y espero que les haya gustado.

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