Habían pasado varios días desde que Horacio había llevado a Gustabo a varios lugares de la ciudad. Poco a poco él iba recordando más cosas aunque todavía no sabía quienes eran la mayoría de personas que le rodeaban y solo recordaba a Volkov y un poco a Horacio.
Aunque ya habían visitado los sitios más importantes todavía quedaban varios lugares donde Horacio estaba seguro que su hermano iba a recordar algo. A si que decidieron salir de casa para visitar estos sitios.
Subieron al coche y Horacio comenzó a conducir sin saber a donde ir hasta que de repente paso por un lugar que le trajo muchos recuerdos a si que aparco el coche y bajo de este haciéndole una señal a Gustabo para que también se bajase.
Gustabo bajo del coche y sin ni siquiera dar un paso comenzó a marearse hasta que le volvió a pasar lo mismo que las anteriores veces.
Gustabo comenzó a reírse y poco a poco empezó a abrir los ojos.
-Gustabo, ¿Estas bien?
El chico seguía riéndose mientras recordaba ese día en el que paso ese atraco tan extraño pero divertido que siempre estaría en la mente de todos los que estuvieron allí presentes.
-Bueno supongo que si te estas riendo es porque has recordado lo que yo quería.-dijo Horacio orgulloso mientras esperaba a que Gustabo parase de reírse.
El rubio siguió riéndose por unos minutos hasta que consiguió relajarse. Se puso de nuevo de pie y comenzó a contarle a su hermano las nuevas cosas que habían recordado haciendo que este estuviese feliz viendo como poco a poco Gustabo recordaba cosas y ninguna de ellas eran malas.
Volvieron a subir al coche y el de cresta comenzó a conducir por las calles de los Santos mientras pensaba a que lugar ir. Segundos después pensó en uno maravilloso en el que no habían pasado muchas cosas pero las que habían pasado eran de los mejores recuerdos que tenían juntos.
Siguió conduciendo hacia el nuevo destino hasta que pasaron por un sitio que hizo que todo cambiase de un momento al otro.
-Espera Horacio, ¿Puedes volver para atrás?
-Claro no hay problema.-dijo Horacio mientras volvía poco a poco para atrás.
-Para aquí.-le ordeno Gustabo.
-Vale...-dijo Horacio un poco confuso.
El rubio bajo rápidamente del coche y fijo su mirada a una dirección.
Horacio bajo del coche y se puso al lado de su hermano dándose cuenta entonces de el lugar en el que se encontraban.
-¿Por qué querías parar aquí?-preguntó Horacio intentando disimular ya que en ese sitio lo único que habían eran malos recuerdos.-¿Gustabo estas bien?-volvió a preguntar el de cresta pero el otro chico ya no contestaba.
Horacio se puso detrás de él por si este volvía a desmayarse, aunque ya pasase lo que pasase sabia que todos los recuerdos malos iban a volver a la mente de el rubio. Después de unos segundos Gustabo seguía quieto mirando aquel edificio. Ni cerro los ojos ni se desmayo como las anteriores veces, solo estaba él quieto mirando aquel sitio hasta que por fin reacciono.
Se sentó en el suelo rápidamente y se tapo la cara. Horacio asustado se agacho y se puso junto a él.
-¿Gustabo te pasa algo?-dijo Horacio que no sabia que hacer en esa situación.
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Las Promesas Se Rompen (hija de Gustabo)
FanfictionDespués de estar mucho tiempo en el psiquiatra y tomando pastillas Gustabo consigue controlar a pogo y formar una familia, tiene una hija llamada Andrea pero poco a poco empiezan los problemas otra vez .....