-Buenos días Brent - le dije mientras bostezaba. Se le veía una cara como de preocupado por mi- Brent, Ferran ni yo no hemos hecho nada ahí arriba...
-Vale, vale. Si yo no quiero saber qué estábais haciendo...- respondió.
-Jajaja tranquii - le di un beso en la mejilla.
-Hoy no estaré en casa por la noche, me voy a casa de Ian que organiza una fiesta en su casa.
-Vale, yo tampoco estaré por la noche, me voy a la cena con Ferran - le recordé.
-Ah es verdad. Por cierto, ya me contarás como fue. Y envíame un mensaje cuando llegues a casa. Mo muy tarde, ¡ eh!
-Que sí... No te preocupes.
Subí a mi habitación a vestirme, me puse unos vaqueros, botas y una camiseta. Hacía buen día, de primavera. Salí a pasear a Laica. Ferran se había ido a su casa y después a las 19:30 me pasaría a buscar para ir a la cena de Andrés. Durante toda la tarde estuve haciendo deberes. Ya eran las 18:30 así que me iba a empezar a preparar.
Me fuí a la ducha, y cuando salí me sequé el cabello. Decidí planchármelo y dejarlo suelto, no sabía si la cena tenía que ser formal o informal... Al final me puse un vestido negro, el negro va bien para todas las ocasiones. El vestido era ajustado y tenía el escote forma corazón. Me puse unos tacones de color negro y un collar de oro. Me maquille un poco. Cuando acabé, Ferran ya estaba abajo esperándome. Iba con tejanos, camisay americana.
-Waw - dijo con sus ojos brillantes.
-Tu también estás muy bien - y le di un suave beso.
-Ferran cuídamela eh - dijo mi hermano - Yo dentro de un rato también me voy a la fiesta. Que vaya bien.
-Sí, que vaya bien Brent.
-Adiós hermanito - lo abracé y nos fuimos directos al coche.
El trayecto no fue muy largo. Cuando a lo lejos, veo una casa, con una entrada immensa con un patio solo al entrar, tenía una fuente en el centro. Y la puerta era grande, combinaba lo moderno con lo rústico. Paramos delante de la casa, entonces se nos abrieron las puertas y nos adentramos. Aparcamos el coche en una de las muchas plazas de aparcamiento que había. Nos dirigimos a la puerta, y sin tener que llamar a la puerta, apareció Andrés. Cuando lo vi ya me sorprendí.
-Ho-hola - intenté decir. Se me acercó y me dió dos besos, y saludó a Ferran con un apretón de manos.
-Hola, pasad - contestó tranquilo. -Esta es mi pareja - dijo acercándose a él a una chica con el cabello teñido de rubio, ojos oscuros y sonrisa maliciosa. - Jenny. - Puse los ojos como platos. Joder. La tía que me odiaba con el chico que estaba enamorado de mi.
-Ari, pasa de ella. - Ferran notó que estaba flipando.
-Sí. Vamos. - lo agarré de la mano y lo lleve al sitio de las bebidas. Empezamos a hablar con gente, nos esperaba una larga noche. A lo lejos veía a Andrés con Jenny. Andrés me vió que los miraba y entonces la besó, mientras la besaba me miraba. Le dió un beso sin sentimiento, frío. Yo, sin darle importancia seguí hablando con Ferran y las personas que había con nosotros. Pero Andrés y Jenny seguían besándose. No lo aguantaba. Dejé el vaso encima del mueble y me acerqué a la pareja.
-Andrés puedes venir un momento, ¿porfavor? - dije mientras ya le cogía de la muñeca.
-Sí, claro. Ahora vuelvo cariño - le dijo dirigiéndose a Jenny.
Entonces él me llevó a un pasillo de los muchos que tenía esa casa.
-¿Estás celosa Ari? - me preguntó, haciendo una media sonrisa.
-No, solo que esa tía no es una buena persona. Y tu te mereces alguien mejor. - contesté firme, aunque en el fondo sabía que era mentira, que aunque fuera por una pequeña parte, sí que estaba celosa.
Entonces él me besó. Sus labios contra los míos. Lo tenía que apartar de mi y detener ese beso. Pero de repente sale Jenny.
-¡¿Qué coño?! Guarra - se dirigía a mi - ¡ deja a Andrés ! - exclamó mientras se acercaba corriendo a mi. Parecía un toro, dios. - ¡Primero me quitas a Ferran y ahora a Andrés. Pues va a ser que no! - ya me estaba tirando al suelo, Andrés intentó detenerla, pero la tía parecía un luchador de sumo; porqué esos golpes que daba no eran normales para una pijilla como ella. Yo le di una patada en el estómago para quitármela de encima. Entonces vino Ferran y entre él y Andrés intentaron coger a Jenny, pero la muy loca se tiró a la piscina en un intento de escabullirse. Yo, tan tranquila y sin ni un rasguño. Ella, llorando en la piscina con todo el maquillaje corrido por la cara. La gente en vez de irse de la fiesta o alarmarse, se tiró a la piscina también, así haciendo una fiesta en la piscina. Jenny, salió de la piscina y se fue de la casa, y entre medio de cada sollozo dijo:
-Ferran no te ha dicho la verdad, ¿cierto?
-¿Qué? Ai, tía déjame, que solo quieres arruïnar nuestra relación. Déjanos.
Di la vuelta y fuí a la fiesta con todos, ¿Ferran no me había dicho la verdad sobre qué?. Luego hablaría con él.
