Capitulo 13

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Adrián al verme que lo decía en serio, tomo asiento a un lado mío.

-Muy bien, ahorita vuelvo, voy al baño por el botiquín-dije, me levanté de la cama y empecé a buscar el botiquín en el baño de la habitación.

Cuando lo encontré regrese a la habitación y me senté en la cama donde estaba hace poco.

Adrián seguía en la misma posición que cuando me fui.

-Listo, ahora deme su mano derecha-dije tomándola ya que él estaba metido en sus pensamientos.

Tome una gasa y el alcohol.

Vertí el alcohol en la gasa y empecé a masajearle los nudillos de la mano, Adrián empezó a quejarse un poco soltando unos hay pero sólo fue eso, al terminar de hacerlo con las dos manos, agarre la crema de golpes y se lo puse en los nudillos de las dos manos.

Adrián no había vuelto hablar en todo el rato que cure sus manos.

Las tenía hinchadas pero no fuí por el hielo, primero quería una explicación (si lograba conseguirla) acerca de lo que paso y luego iría por ellos.

-Listo, ya termine. Ahora me podrá explicar ¿qué es lo que le estaba sucediendo?-pregunte soltándole las manos.

-¿En verdad quieres saber?-me pregunto, viéndome por primera vez a los ojos, después de lo sucedido.

-Claro que quiero saber, si usted quiere decirmelo-dije.

-Está bien te lo diré pero primero me responderás una pregunta-acepto.

No sabía que decirle, porque podria ser que fuera una pregunta muy personal, aunque ya le habia mencionado mi mayor secreto, así que acepte.

-Está bien, dígame cual es la pregunta.

-¿Por qué te quedaste conmigo cuando yo te dije que te fueras?-me pregunto.

Esa pregunta me tomo de sorpresa porque ni yo misma sabía la verdadera razón.

-¿Quiere que le diga la verdad?-pregunte

-si-contesto rápidamente.

-Está bien-tome aire y dije- la verdad- no se

-¿Como que no sabes?- me pregunto intrigado.

-Es la verdad no sé por qué me preocupe por usted-le dije lo más sincera que pudr.

-No será porque tienes una casa donde vivir, vives en París, te pago....

-No, no es eso estoy cien por ciento segura-lo corte antes de que siguiera hablando.

-Vale, entonces yo te contare lo que me paso a mí-dijo

-Si.

-Tenía 18 años, estaba completamente enamorado.

<llevábamos un año siendo novios.
En mi familia se acostumbra que los jóvenes se casen a los 18 o 20 años y como yo llevaba un año de novio con Casandra y estaba perdidamente enamorado de ella, le pedí que se casara conmigo, acepto rápidamente y yo fui a avisarle a todos, un mes después empezamos a preparar todo, a ella la sentía más distanciada conmigo.>

<No le tome importancia al igual que te paso a ti. Faltaba una semana para la boda, decidí ir a su casa, sin avisarle para que fuera una sorpresa.
Cuando llegue empecé a tocar la puerta pero nadie habría, yo sabía que ella se encontraba ahí porque estaba su auto, seguí tocando por unos 5min.
Aún seguía sin abrir, me preocupe mucho. Casandra siempre tenía una llave en una maceta (que estaba al lado de la puerta) para emergencias.
La busque y cuando la encontré abri la puerta, el primer piso se encontraba totalmente vacío, subí al segundo piso y empecé a escuchar gemidos. Los seguí. Los gemidos me llevaron hasta su habitación, empecé a temblar por lo que estuviera pasando ahí, sentía un mal presentimiento.>

< Me arme de valor y abrí totalmente la puerta, lo que encontré, me rompió el corazón. Estaba Casandra teniendo sexo con mi mejor amigo André.
Al verme se separaron, Casandra trato de explicarme lo sucedido, pero yo no la escuche.
Termine con ella y también termine mi amistad con André. Salí de ahí corriendo, me sentía destrozado por dentro y por fuera, iba muy rápido en mi automóvil. Fui a mi casa que aún vivía con mis padres y cuando llegué vi que había una ambulancia, salí corriendo hacia adentro y vi a mi madre y mi hermana llorando desconsoladamente, me acerque a ellas y les pregunte que pasaba-se detuvo para tomar aire, las lágrimas caían por su cara. Tardo como un minuto para seguir hablando y yo pensé que ya no seguiria contando nada-me dijo que mi padre había muerto de un infarto, ahora si sentí que todo mi mundo se había derrumbado, Casandra me había engañado con mi mejor amigo y mi padre había muerto, quería morir en ese instante, sabía que tenía que apoyar a mi madre y a mi hermana pequeña, Paola, salimos adelante después de un tiempo, pero a partir de ese entonces todos los 20 de octubre me pongo así-dijo y empezó a llorar, me abrazó fuerte.

Cuando se calmó ya pude hablar.

-Lo siento, no sabía que eso le había pasado pero no puede seguir así necesita ir a un Psicólogo para que lo ayude-dije mirándolo a los ojos.

-Sí, lo haré. ¿Te puedo pedir unos favores?-me pregunto con los ojos hinchados por llorar.

-Si...Cla... Si....Claro-dije tartamudeando por verlo así y por los favores que iba a pedirme.

-Primero: ya no me llames de usted ni señor, dime Adrián. Segundo: No le digas a nadie de lo que sucedió por favor y Tercero: Gracias por venir eh impedir que siguiera haciéndolo-dijo tomándome las manos.

-No tiene.... No tienes que agradecerme.

-Claro que tengo que agradecerte-dijo Adrián sin soltarme las manos.

-Creo que ya me tengo que ir-dije levantándome de la cama-mañana vendré a limpiar.

-No, no vengas yo lo limpiare-dijo levantándose de la cama al igual que yo.

-Pe...

-Nada de peros, yo limpiare-dijo impidiendo que siguiera hablando.

-Está bien-le regale una sonrisa-ahorita vuelvo voy por el hielo para ponerlo en sus manos y se desinflamen.

Al salir fui rápido a la cocina, tome el hielo y volví a subir a la habitación.

Le entregue los hielos a Adrián y se los puso en las manos.

Tuvo que sentarse para que no se le cayeran.

Le prendí el televisor.

Antes de salir volvió a llamarme.

-Charlotte-voltee a verlo-Gracias.

-Ya le.... Ya te dije que no me agradecieras-le hable.

Iba saliendo por la puerta de la habitación, cuando me detuve.

-Sabes, ya sé por qué me quede a detenerte-dije y el volteo a verme.

-¿Por qué?-pregunto Adrián.

-Porque yo no quería quedarme a limpiar todo esto- mostré con la mano toda la habitación-aparte tenía que hacer entrarte en razón para que te sintieras culpable y tú lo limpiaras y luego, si te amputaban las manos yo tendría que hacer más trabajo y ya es suficiente con lo que tengo que hacer. Si esa era la razón por la que te detuve-dije riéndome un poco de mi gran mentira.

Adrián rápido se dio cuenta de que era una broma y se rio un poco al igual que yo.

-Buenas noches Adrián-dije con una sonrisa de oreja a oreja, más bien, era gigante

-Buenas noches Charlotte-respondió Adrián que al igual que yo tenía una sonrisa gigante en su cara.

Sueña despierta [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora