Dos días pasan volando y cuando menos me doy cuenta, hoy es el día donde se dará a conocer el retiro oficial del Zar Dimitri Novikov el jefe de toda la mafia rusa, dándole la bienvenida al nuevo Zar que es su hijo.
Miro mi reflejo en el espejo, sería como una especie de gala por lo que la vestimenta es formal, había escogido un vestido de seda sencillo pero a la vez sexy que acentúa cada una de mis curvas, color rosa pálido con tirantes, un escote en V pero no tan profundo, espalda descubierta y con un poco de cola. Termino de colocarme el labial para irme a la fiesta antes de que se me haga tarde.
-Buenas noches, señorita Marchetti- dice uno de los mayordomos abriéndome la puerta- los invitados están en el salón-
-Gracias-
Camino por el pasillo la alfombra amortigua mis el sonido de mis tacones, cuando entro al salón veo que la mayoría ha llegado, tomo una copa de champagne del mesero que pasa cerca, tengo que admitir que se lucieron con la decoración e incluso hay una pista de baile.
Tal vez saque a bailar al viejo un rato
No paso desapercibido las miradas y los susurros hacia a mí, cuando paso a un lado de las personas, la mayoría sabe quién soy y de donde provengo. Obviamente, no les agrado en lo más mínimo.
-Voy a pensar que te pusiste ese vestido solo para mí- escucho como dice una voz detrás de mí, ruedo los ojos al saber quién es- estás magnífica-
-Yo siempre estoy magnífica, Mijaíl- respondo con una sonrisa de suficiencia.
Mijaíl Gusev, uno de los principales socios en la mafia y un completo idiota, no he olvidado las tantas veces que se me insinuó estando casada con Xander, arrogante y prepotente que piensa que todas las mujeres se mueren por él. No voy a negarlo el tipo es guapo, alto, atlético, cabello rubio cobrizo y sus ojos azules enamoraría a cualquier a mujer.
-¿Qué la trae a esta velada señorita Marchetti?-
-Nada que te incumba, Gusev- respondo en tono hostil- simplemente soy una invitada-
-Aquí todos saben, que el jefe te tiene cariño- le da un trago a su bebida- no es un secreto para nadie-
Me abstengo a no romper la copa en mi mano y rebanarle el cuello con un pedazo de vidrio. Tomo una respiración profunda, antes de responder todavía con tono hostil.
-Sí, ya sabes lo obvio, ¿para qué preguntas?-
-Como siempre molestando a las damas, Mijaíl-
La voz de mi ex marido se hace presente, veo trae puesto un esmoquin que acentúa los músculos de sus brazos, su cabello bien peinado; la barba de tres días que traía ya no está. Siento como mi boca se seca y trago saliva pero eso no ayuda, me tomo de un solo trago la copa de champagne.
¿Por qué tiene que ser tan guapo?
Menuda suerte la mía, de tener un ex marido malditamente perfecto.
-Solo estábamos conversando, Novikov- menciona Gusev- aquí sabemos que ella es intocable-
Veo como la mandíbula de Xander se tensa ante las palabras de Mijaíl, su mirada se oscurece antes de responder.
-Ella no es un objeto, imbécil- sisea Xander- Valentina es una persona capaz de pensar y razonar por sí misma, es dueña de su vida, puede hacer lo que quiera con ella-gruñe- pero sé que siempre, has querido llevártela a la cama incluso cuando era mi esposa-
El rostro del imbécil se descompone ante esa declaración. Xander, sabe todo lo que sucede en las sombras, no solamente a luz de día, puedes estar tranquilamente, cuando de la nada te suelta tu secreto más profundo de tu alma.
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El amor del Zar
General FictionSecretos. Traiciones. Odio. Venganza. Poder. Una guerra. Rencores y viejos amores del pasado. Una Reina. Un Zar. Un Capo. Un error prematuro cambió la vida de todos. Ahora, es tiempo de tratar de remediarlo para conseguir el mismo objetivo. Dos mafi...