El amor del Zar

Escena extra: "Un muerto entre las sombras."

Esta escena pertenece a la línea del tiempo del capítulo 68, mostrando que incluso en las sombras y estando muerto, Xander, siempre volvió a casa con Valentina y sus hijos, jamás dejó de buscar lo mejor para ellos. 

¡Espero que la disfruten!

Atte. Angie.

🖤🖤🖤🖤🖤

Xander.

Ankara, Turquía.

Empujo la espalda de mi esposa justo en el momento en que la estructura del techo colapsa, creando una barrera entre nosotros y veo como los ojos de Valentina, se abren en horror puro, pero le doy un asentimiento a Remy.

—¡Sácala de aquí, Remy!— ordeno.

—¡NO!— su grito logra escucharse incluso encima de toda la conmoción—. ¡No voy a dejarte aquí! ¡Me niego a hacerlo!

Quiero sonreír con orgullo al ver que no está dispuesta a dejarme, incluso con todas las heridas de su cuerpo, trata de escalar la pared de escombros que se ha formado entre nosotros, antes de que Remy, la tome por la espalda.

—¡Buscaré otra salida, nena!— grito lo bastante fuerte para que me escuche—. ¡Estaré pronto contigo!

Otro temblor sacude todo el lugar, y más escombros caen cerca de nosotros y no tenemos más opción que separarnos aún más para evitar ser golpeados por ellos.

—¡Necesitamos salir!— escucho el grito de Bruno, pero mi mirada se niega a despegarse de mi esposa, quién lucha para soltarse del agarre de su padre—. ¡El edificio va a colapsar!

No necesito pensarlo dos veces para dar mi siguiente orden.

—¡SÁCALA REMY, AHORA!— ordeno.

—¡NO!— grita Valentina más fuerte, esta vez, con el miedo pintado en su tono de voz que me rompe el alma, pero siempre estará su seguridad antes que la mía—. ¡Suéltame, Remy!

A la mala la sacan del lugar mientras lucha y patalea para que la suelten, pero es más que inútil con lo débil que se encuentra su cuerpo, antes de que desaparezcan de mi campo de visión, y aún puedo escuchar sus gritos.

Pronto estaré contigo, solnischko, lo juro.

Comienzo a buscar mi propia salida, mientras que el edificio sigue temblando debajo mis pies y algunas veces, me tropiezo por la cantidad de sangre perdida a raíz de las heridas, pero no me permitía rendirme.

Estoy cansado, pero necesito volver a casa con mi esposa.

Le prometí frente al altar que nunca más rompería una promesa de mi parte, y volver a casa con ella, es una de esas promesas que ni muerto, pienso romper.

Valentina era mi vida entera, y era una motivación de sobra para no rendirme.

Una explosión sacude todo el lugar antes de que pueda llegar a la salida, y ni siquiera tengo tiempo de procesar o moverme, cuando siento como algo pesado y caliente cae encima de mi espalda, no puedo evitar quejarme del dolor ante el ardor que siento toda la piel, mientras que lucho por salir, pero mis piernas se encuentran atrapadas debajo de todo el peso.

¡No!

Carajo, esto no me puede estar sucediendo ahora.

¡Necesito salir!