Una pequeña broma

Crecer

Sirius había entendido a la perfección las actitudes y medidas tomadas para caer en mejor gracia al pequeño infante y estaba rindiendo frutos con creces, es decir, su ego en inflaba a mil por hora cuando él tenía permitido exactamente las mismas acciones que las chicas sin una respuesta arisca o temerosa del más chico, en su lugar, era una respuesta tranquila y sumisa que no parecía estar molesta por dejarse hacer.

Mira que la cosa mejoraba por ser bien aceptado en su forma perruna y en la humana, pues Severus no tenía problemas con ninguno de los dos. Su cercanía no lo asustaba, su tacto no lo desagradaba y su presencia parecía agradarle, no fue difícil entender las actitudes que no despertaban en el miedo. Evitaba alzar la voz, hacer movimientos demasiado bruscos y trataba de que su magia estuviese pasiva para no alterarlo.

Al sentarse a desayunar, hizo caso a las indicaciones dadas por Narcissa. Tomó el plato del más pequeño para servirle, aunque no tenía ni la menor idea de que cosas podrían gustarle más o desagradarle por completo, lo lleno de lo que creía sería un buen desayuno para un niño se su tamaño. Severus cómo siempre, no alzo la cabeza hasta tener el plato de frente, el niño comenzó a comer sin decir nada, sin hacer ni la más mínima señal se gustó o desagrado. Pero viendose hasta eso más relajado, no parecía estar tan tenso como los primeros días, ahora todo era mucho más sencillo.

No dejaba el hecho de que los tres traían un cargo de conciencia pero era una forma de sobrellevarlo con más facilidad. Habían aprendido bastante del Slytherin en tan poco tiempo, mucho más de lo que habían hecho en todos los años que llevaban de conocerlo. Aún si a James seguía sin terminar de agradarle, podía estar más abierto a mantener una relación formal respetuosa con el otro.

Era una silenciosa redención y evolución de la relación entre los merodeadores y Snape, de alguna manera permitiéndose madurar al ver al otro en su fase más infantil, una gran ironía si se le pensaba con detenimiento, ayudaba bastante con todo lo que sería la pacífica y sana convivencia entre las casas que tenían fama de ser las mayores enemigas. Claro que una cosa era como se veía aquella disculpa desde la perspectiva de quienes lo cuidaban y otra de quien era cuidado.

No tenían idea sí Snape recordaría lo que había pasado durante todas esas semanas, ni tampoco su reacción cuando se enterase lo bien informados que estaban las personas que le habían hecho la vida imposible desde que entró a Hogwarts sobre su situación en casa. Podría tomarlo como un ataque o como un peso menos, pero conociendo a la arisca serpiente, lo más probable sea que no se lo tome demasiado bien.

Corrían el riesgo de ser envenenados.

Ese día en especifico Snape estaba algo extraño, parecía quejarse por lo bajó mientras frotaba uno de sjs brazos, incluso comió menos que de costumbre, haciendo sonar las alarmas en su mente de que algo estaba mal. Toco superficialmente su frente pero no estaba caliente, de manera que no tenía fiebre, eso no sabe si le ayudo a calmarse o agitarse más, es decir, era bueno que no estuviera enfermo pero si no era fiebre ¿entonces que le estaba ocurriendo?

Repentinamente entendía los ataque de paranoia de su madre.

-Comió un poco menos en el desayuno, es probable que le de hambre después- informó a Regulus, quien fue a recoger al niño.

Su hermano lo estudió con la mirada y asintió, solo para tomar al más pequeño y retirarse con las serpientes a hacer su rutina diaria impuesta para el cuidado de su amigo reducido a infante. Severus regresó la vista sobre el hombro para que sus ojos se encontraran con los de Sirius, sólo para irse con docilidad.

Suspiro y fue a sus clases con naturalidad, realmente no había nada extraño, nada fuera de su lugar, o eso se decía para manterse tranquilo, pensar que el niño había enfermado bajo su cuidado solo traía abajo toda el aura e intención de mejoría en la relación que habían construido, se tranquilizó recordando lo perceptivos que eran las serpientes que rodeaban a Snape, no por nada eran quienes siempre lo ayudaban cuando se necesitaba, de manera que si algo pasaba con el niño, ellos serían los primeros en enterarse y buscar una manera de arreglarlo. Las serpientes eran astutas, es cierto que en algún punto eso era un verdadero dolor de cabeza para él, ahora podía ser un factor de calma.

Cuando llegó la hora de la comida se relajo al ver al niño bien con las serpientes, comiendo tranquilo.

Poco le duró aquella paz.

Repentinamente Snape dejó de comer, dejando caer el tenedor en un descuido, cosa que alertó a Malfoy, quien estaba a su lado. Fue la rápida reacción del oxigenado lo que evitó que Severus cayera en peso muerto contra el suelo, atrapandolo en brazos, el prácticamente salto de su asiento solo una fracción de segundo después que las serpientes, quienes se apresuraron a correr fuera del gran comedor con dirección a la enfermería, siendo seguidos de los merodeadores.

En la cabeza de uno estaba que estarían fritos con el director si a Snape le pasaba algo estando en ese estado y bajo su cuidado mientras en la mente de otros estaba que no serviría de nada todo el cuidado dado si al final se ponía mal.

Promfey se llevó a Severus a unas camas cubiertas para revisarle, todos los presentes estaban mordiéndose las uñas, tal vez las serpientes parecían tener el temple de un témpano de hielo pero las miradas preocupadas que se dedicaban los unos a los otros y luego a las cortinas tras las que se encontraba su amigo era suficiente para saber que por dentro también estaban que se desmayaban.

Finalmente Promfey salió a donde ellos.

-El joven Snape se encuentra bien, solo inconsiente- informó, provocando un suspiro aliviado colectivo.

-¿Pero que ah pasado entonces? -quizo saber Sirius.

-No es nada más que el efecto de la poción llegando a su fin, el organismo está bastante agitado con el cambio repentino y eso provocó el desmayo, estará el cambio completo hasta dentro de una hora- explicó- ahora, retirense a sus clases mientras yo notifico al director.

Nadie se vio muy de acuerdo, Malfoy se acercó a Promfey y de su bolso de lado sacó un cambio de ropa perfectamente doblado con la varita del mestizo sobre esta, entregándoselo todo a la enfermera.

-Esperaba que algo así pasara, cuando despierte por favor dele esto- pidió.

Promfey asintió tomando la ropa y varita, sólo para que Malfoy girara sobre sus talones e hiciera un ademán con la cabeza antes de retirarse, siendo seguido por Barty, quien prácticamente arrastró a Regulus pese a las quejas de este.

James sonreía y comentaba lo aliviado que estaba mientras salía casi dando brincos de la enfermería, siendo seguido por Peter. Pero el tenía la vista puesta en las cortinas, una parte de él se negaba a irse así como así, a desaparecer de la nada, aunque era lo mejor que se podía hacer, la leve inquietud de que algo fuera a pasar cuando se fuera lo tenía agitado.

-Vamos Canuto - la voz de Remus lo sacó de su lapsus, tomandolo del brazo- ya podrás hablar con él.

Asintió y dedico una última mirada a aquella muralla de cortinas blancas para mayor privacidad tras la que reposaba el ser que le había dado vuelta a su perspectiva en tan sólo unos días.

-Tienes razón, vamos- cedió abandonando la enfermería.

Buenas tardes!! Estoy con vida...físicamente.

Por fin la continuación/final de esta serie tan querida y popular, espero de verdad que este capítulo sea de su agrado y sacie su sed de mini-sev.

Ahora, moviéndonos a otro tema. Esto lo mencioné en mi tablero pero lo mencionaré otra vez.

Yo estoy feliz de leer sus comentarios, ver sus interacciones y crear un ambiente de paz en esta fanfic, pero con lo que no estoy conforme es que se estén atacado entre sí por las actitudes puestas en el fanfic o en el cannon. NADIE es juez como para deliberar si un personaje es bueno o malo. Es por ese tipo de debates que de verdad considere cerrar, cancelar o hasta borrar esta fanfic. Y no me malentiendan, no tengo problemas si es un intercambio respetuoso de ideas, pero si ya deliberadamente es un debate donde sólo se busca "tener la razón" abstenganse de hacerlo aquí y háganlo por privado con quien quieran debatir.
Así que lo diré una vez más:

Sientanse libres de comentar tanta bombera quieran, rianse, disfruten, bromen, hablen e intractuen con total libertad, pero no se ataquen entre sí ni se insulten.

Espero no ofender a nadie porque no era para nada la intención de esto y si creen que lo que pienso está mal o es grosero, ofrezco una disculpa enorme.

Si les gustó y creen que vale la pena voten, yo agradezco las lecturas, muchas gracias por el apoyo y por llegar hasta aquí, recuerden tomar agua y hasta la próxima!!

Atte: Zaik651