Capítulo 21

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(All of the stars ~ Ed Sheeran)

Era viernes, no tenía clases. Estaba en mi habitación, terminando unos trabajos.

Liam había llamado hace un rato, diciendo que no podría verme hoy.
Matt y Lucy habían regresado esta mañana... juntos.

Algo me dice que estuvieron juntos esos días.

No quise preguntar y era obvio que ellos tampoco me lo dirían.

Revise la hora, eran las 2, debía de tomar un descanso.

Cerré la laptop y salí de la habitación.

Mire a Lucy quien se encontraba de pie en la sala. Observaba con el ceño fruncido la mesita del medio, en ella habían varias fotografías esparcidas.

-¿Estás bien?

-¿Por qué no lo estaría?-respondió, sin despegar la mirada.

-Porque miras las fotos como si intentaras encontrar algo-intente, bromear.

-Es justo lo que hago.

Me supuse que quería concentrarse, tome mi celular para pedir algo de comer, pero una fotografía llamó mi atención.

En ella había una niña de unos 8 años, en un hermoso jardín y una casa con paredes blancas, ventanas de aluminio y un porche con una cerca de madera, la cual se podía apreciar detrás. Pero lo que más llamó mi atención, era esa niña, con un vestido blanco y pequeñas flores rojas alrededor, sonreía a la cámara.

Al instante supe que se trataba de Lucy, pero ya no lucia como en ese entonces, el brillo de sus ojos y su sonrisa ya no eran la misma.

-Es la casa de mis abuelos-murmuró.

-¿Y aun los visitas?

No dijo nada, pero tomó asiento en el sofá. La imité, pero lo hice en el sofá que tenía a un lado. Su mirada estaba perdida en algún punto de la habitación.

-No debí preguntar, yo solo...

-Mi padre falleció cuando tenía 6 años, en un accidente de auto- suelta, aún sin mirarme-. Y al año siguiente mi madre me abandonó, dijo que iría a un viaje de negocios y nunca más regresó. Mis abuelos se han hecho cargo desde entonces.

Quería decirle que lo sentía, pero sabía que eso no la ayudaría.

-¿Cómo son ellos?

-Siempre me brindaron cariño y amor, nunca me falto-sonrió y me miro, esta vez-. Mi abuelo tuvo un accidente y ya no pudo trabajar como antes, así que yo lo hice durante unos años, antes de venir a la ciudad, ellos siempre me decían que no era necesario, pero en el fondo sabía que si lo era y mi abuela siempre me lo agradecía. Hace unos días, fui a visitarlos, extrañaba estar con ellos y mi ciudad. Pero no me esperaba que la señora que solía llamar mamá, estuviera con ellos.

-Y... ¿Qué paso?

-No iba a recibirla con los brazos abiertos, eso está claro, discutimos.

-¿Puedo decirte algo?

-Ya lo estas haciendo -sonrió de lado.

-Creo que yo hubiera reaccionado igual -le dedique una mirada comprensiva -. Pero aun así. No debemos de decir algo cuando estamos tristes o enojados, porque el sentimiento cambia, pero las palabras no.

-Lo sé-hizo una mueca-. Algo parecido dijo Matt.

-¿Matt?

-Me encontré con Matt en la ciudad, estaba en una cafetería y él llegó, conversamos le dije lo que había ocurrido y me contó lo de sus padres, al parecer habían discutido.

CARTAS, PROMESAS Y RECUERDOS (En edicion)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora