Encuéntrame en las estrellas

Capítulo 20

- Eres una pesada - agregue quejandome del agarre de Priscila

- ¡Pero son las doce del medio día! - grita

- Y me sorprende que tu también estes de pie - me queje tapandome con mis cobijas

- Mañana es la fiesta ¿Has visto como esta nuestros cabellos? ¡Estan hecho un desastre!

- Eso es lo que hace la sal marina - agregue

- ¡Ya ponte de pie! - dijo gritando- Si ha sido idea de tu madre no mia

No dije nada y agradecí que Prisci también se quedara callada. Tal vez muy callada.

- ¿Prisci? - pregunte aun con las cobijas tapando todo el cuerpo - ¿Ya te enojaste? - vi de reojo por encima de mi cubrecama

- ¡He dicho que te despertaras de una vez! - grito saltando hacia mi cama y cayendo encima de mi

- Me pudiste haber roto un hueso - frote mi pierna en donde su rodilla había impactado

- ¿Lo he hecho? ¿No verdad? - pone cara de victoria cuando logra que me ponga de pie - toma una ducha y vístete rápido. Luego vamos a perder nuestra cita.

Aunque no quería admitirlo, Prisci tenía razón. Lo pude apreciar cuando sali de mi ducha y me di el tiempo de cepillar mi cabello, estaba con las puntas abiertas y sin brillo.

Me puse un jean, una blusa de tirantes blanca y mis tenis del mismo color. Algo normal.

- ¿Acaso eres el Rayo Mcqueen? - pregunta Prisci

- ¿El que? - dije con cara de confusión

- Cierto, me olvide que eres rara y que las unicas peliculas de pixar que has visto han sido buscando a Dory y Moana

- ¡Hey! Pero si son grandes obras de arte

- Pero si ni siquiera has visto buscando a Nemo - pone los ojos en blanco - niña rara. Aun no puedo creer que ni siquiera hayas visto Ratatouille - suspira exageradamente - Esa película ¡Es suprema! ¡superior!

- Si vieses una rata cocinando algo ...

- No lo comería pero igual - me mira de cerca - es fan tas ti ca

- Como digas - pongo los ojos en blanco

Rubi había prestado su auto a mi mejor amiga, así que no hacía falta pedir un taxi o ir caminando hasta el salon de belleza de la amiga de mi tía. En los trece minutos que nos tardamos en llegar Prisci prácticamente me dijo que no tengo cultura por no haber visto Toy Story, que era perdonable no haber visto las demás películas pero lo de Toy Story jamas  llegaría a perdonarmelo.

Admito que cuando era mas pequeña, me llamaba la atención ... pero luego me imaginaba a mis juguetes mirándome en la noche y hablando . QUE MIEDO.

Llegamos al salon de belleza que como de costumbre ya tenia algunas personas ahi dentro. No sabia precisamente que era lo que quería mi madre que hiciera. Tal vez solo cortarme el cabello un poco.

- ¿Ya tienes pensado que hacerte? - le pregunté a mi amiga

- Solo quiero hacerme unos rayos, para comenzar bien el año - mueve la cabeza despeinandose - ¿Tu?

- Mmm ... creo que - empiezo a buscar algo en ñas revistas - solo me cortaré un poco el cabello

- ¡Debes arriesgarte mujer!

- Yo lo sé pero ... me gusta mi cabello asi

¡2 horas! Pasamos dos horas en el salón de belleza, sin contar el tiempo que tuvimos que esperar. Yo moria de hambre y conocía tan bien a mi mejor amiga como para saber que ella pensaba lo mismo.