Irina
Salgo corriendo a toda prisa, sin importarme si choco con alguien o no.
—¡Nath! —Exclamo por enésima vez mientras persigo al rubio que ha huido horrorizado.
Llego hiperventilando al aula de matemáticas en la que Nath imparte sus clases. Clases de las que por cierto, soy alumna.
Qué mal todo. No quiero ni saber cómo es la sensación de encontrarte a una alumna morreándose en la biblioteca.
—Nath, te lo puedo explicar —intento sonar como una niña inocente, pero creo que no cuela.
El rubio me mira algo sorprendido mientras intenta organizar unos papeles en un fichero.
—No has de explicar nada —me asegura sin mirarme y me preocupo.
Lo observo algo descontenta, si Nath es el hermano de Crystal, conocerá a Mark. Me pregunto por qué habrá salido con prisa de la biblioteca.
¿Tendrán alguna cuenta pendiente ellos dos?
Parece que termina con lo que estaba haciendo y ahora es él el que me mira con confusión.
—¿Él y tú... —Pregunta con su dedo índice en alza y una leve sonrisa se forma en mis labios.
—Se podría decir que sí —me encojo de hombros.
—¿Desde cuándo? —Creo que en lugar de resolver su duda, le he generado un montón más.
Me tomo unos segundos para contestar, esa pregunta es algo difícil, ni siquiera lo sabemos nosotros. No hemos definido nada.
Aunque sé que lo que voy a contestar es la pura verdad.
—Es algo que nos ha mantenido por siempre unidos... —Me rasco el brazo para disimular mi incomodidad.
No responde, cuando me quiero dar cuenta, está frente a mí con sus manos posadas en mis hombros, como si fuera una muestra de cariño.
—Irina, tengo muchas preguntas —su tono de voz es severo—. Pero quiero que me respondas a la única que me importa.
Trago saliva mientras él guarda un silencio que me está preocupando.
—¿Te hace feliz? —Pregunta de pronto y me quedo helada.
Su mirada es sincera, como si mi felicidad fuera de su máxima importancia. Para ser sincera, no me esperaba un ataque de celos por su parte. Pero tampoco me esperaba esto.
Ni siquiera me planteo lo que mis labios sueltan:
—Como nadie lo ha hecho en la vida —intento respirar hondo para no llorar. Hablar con Nath está siendo como desahogarte de todo.
Suelta una pequeña risa que me hace sonreír inconscientemente.
—Joder, me alegro tanto —se aparta con cautela y se muerde el labio—. Me sentía tan impotente porque sabía que yo te hacía feliz, y luego me enteré de todo lo que te hacía Axel. Ahora lo entiendo todo.
ESTÁS LEYENDO
POR UNA PROMESA ETERNA ©[TERMINADA]✔️
عاطفية[Saga Por Siempre #2]💞 Dicen que el tiempo lo cura todo, ¿será eso cierto, o las cicatrices del corazón serán eternas? Mark e Irina tuvieron que superar muchos baches en su amor para conseguir que su relación funcionara. Y lo consiguieron, hasta qu...