Mi Apuesta.

Capítulo 9 - ¿suerte?

personajes utilizados en esta historia no me pertenecen, créditos a sus respectivos creadores.

-no, por qué tenía que ser poker, estoy perdido!.- sin saber cómo reaccionar cayó de espaldas sobre la madera del gimnasio.

-son-kun qué sucede?.-con algo de preocupación le interrogó y le trató de ayudar a reincorporarse.

-no podré jugar, no entiendo el poker!.- se quejó y rascó su cabeza como nunca, algunos estudiantes giraron a verle con una gota de sudor por aquél extraño comportamiento.

-de qué hablas son-kun, el poker indio es muy sencillo de jugar.- explicó la azabache y eso trajo algo de calma a su corazón. 

-lo dices en serio?!.- interrogó y ella asintió felizmente con sus ojos cerrados.

la secretaria que daba la explicación tosió un par de veces ante aquella interrupción repentina.

-así es, el poker indio a dos cartas es mucho más sencillo que el poker común.- ella explicó a toda la multitud, que aunque en efecto podía ser menos complicado, el riesgo de una apuesta solo aumentaba más.

la secretaria tomó algunos pares de cartas para dar la explicación a los presentes.

-bien, hay tres tipos de jugadas, la primera es un par y es la más fuerte, dónde los números de sus cartas son iguales.- tomando el par de cartas con números similares acompañó su explicación, gokú asintió comprendiendo esa parte del juego.

-la segunda se llama marca, dónde sus dos cartas son del mismo palo o tienen el dibujo igual en ambas.- tomó un par de cartas, un 5 y 8 de corazones, aquello fue bastante fácil de comprender.

-la última es la más débil, se llama "cerdo" y es cuando ambas cartas no tienen relación alguna con las anteriores, son diferentes en todo sentido.- al decir eso mostró un 4 de diamantes y 6 de corazones, aquello si pereció dificultarle un poco en entender.

-si dos o más jugadores tienen una misma jugada, la más fuerte será la que venza al resto, ahora la parte de las apuestas, se les entregará 10 fichas para apostar, dónde solo habrán 10 turnos para decidir sus apuestas, cada ficha corresponderá al 10% de su deuda, eso significa que si su deuda es de 100 millones, una ficha equivaldrá a 10 millones.- con fuerte y voz serena siguió explicando, palabras que parecían apenas ser comprendidas por la mente del pelinegro, yumeko podía ver aquella dificultad plasmada en su rostro.

-como dije, su posición final se dará en base a sus resultados, así que posiblemente ahora piensen que el de la deuda más alta tiene la ventaja, pero no es así, pues por cada turno se deberá dar una ficha como cuota de participación, así que el como usar sus fichas depende de ustedes, además solo se puede apostar un máximo de 5 fichas por jugada para extender el juego lo suficiente.- 

después de todas aquellas explicaciones por fin parecía que todo había terminado, posiblemente para gokú no todo haya quedado claro, podía notarse con sus gestos de confusión, yumeko solo reía débilmente al verle de esa forma.

-una cosa más.- exclamó la secretaria llamando la atención de todos. -no ofreceremos ayuda a ningún jugador.- informó burlonamente. -y eso aplica a las trampas.- concluyó dejando un mal sabor de boca a aquellos que esperanzados buscaban saldar sus deudas.

-vaya esto será difícil yumeko-chan.- habló tímidamente mientras caminaban a su respectivo lugar de apuestas. -no te preocupes son-kun, estarás bien, lo presiento, solo no olvides las formas de jugar y lo lograrás.- con esa cálida sonrisa ella trató de calmarle y él asintió.

se detuvo antes de entrar al salón de clases, ella también lo hizo, la idea de que esto terminaría mal aún no desaparecía de su cabeza, ella no tendría por qué ceder tiempo, pero al menos el chico le caía bien.