Siempre fue ella (Harry potter y tú) [segundo año]

Capitulo 16: La voz

Hagrid: Sólo bromeaba —explicó, dándole a Harry unas palmadas amistosas en la espalda, que lo arrojaron contra la mesa— Sé que no es verdad. Le dije a Lockhart que no te hacía falta, que sin proponértelo eras más famoso que él.

___: así se habla Hagrid...—dije emocionada y ayudándole a Harry a levantarse.

Harry: Apuesto a que no le hizo ninguna gracia —dijo tomando mi mano, y frotándose la barbilla.

Hagrid: Supongo que no —admitió parpadeando— Luego le dije que no había leído nunca ninguno de sus libros, y se marchó. ¿Un caramelo de café con leche, Ron? —añadió, cuando Ron volvió a incorporarse.

Ron: No, gracias —dijo con debilidad— Es mejor no correr riesgos.

Hagrid: Vengan a ver lo que he estado cultivando —dijo cuando Harry, Hermione y yo terminamos nuestro té.

En la pequeña huerta situada detrás de la casa de Hagrid había una docena de las calabazas más grandes que hubiera visto nunca. Más bien parecían grandes rocas.

Hagrid: Van bien, ¿verdad? —dijo contento— Son para la fiesta de Halloween. Deberán haber crecido lo bastante para ese día.

___: son geniialeees...—dije sorprendida

Harry: ¿Qué les has echado? —preguntó

Hagrid miró hacia atrás para comprobar que estábamos solos.

Hagrid: Bueno, les he echado... ya sabes, un poco de ayuda. Harry vio el paraguas rosa estampado de Hagrid apoyado contra la pared trasera de la cabaña.

Hermione: ¿Un hechizo fertilizante, tal vez? —preguntó entre la desaprobación y el regocijo

___: Has hecho un buen trabajo—dije feliz, y mis ojos se tornaron amarillos.

Hagrid: Eso es lo que dijo tu hermana pequeña —dijo dirigiéndose a Ron—Ayer la encontré. —Hagrid miró a Harry de reojo— Dijo que estaba contemplando el campo, pero me da la impresión de que esperaba encontrarse a alguien más en mi casa—Guiñó un ojo a Harry, me enoje pero no lo demostré, "que me pasa" pensé— Si quieres mi opinión, creo que ella no rechazaría una foto fir...

Harry: ¡Cállate! —dijo mirándome, pero yo tenía una sonrisa tan falsa. A Ron le dio la risa y llenó la tierra de babosas

Hagrid: ¡Cuidado! —gritó apartando a Ron de sus queridas calabazas

Ya casi era la hora de comer, y como sólo había tomado un caramelo de café con leche y una tostada en todo el día, tenía prisa por regresar al colegio para la comida. Nos despedimos de Hagrid y regresamos al castillo, con Ron hipando de vez en cuando, pero vomitando sólo un par de babosas pequeñas.

Apenas habíamos puesto un pie en el fresco vestíbulo cuando oímos una voz.

McGonagall: Conque están aquí, Potter y Weasley. —La tia McGonagall caminaba hacia nosotros con gesto severo— Cumplirán su castigo esta noche; a y __ tú papá te espera en el despacho de Dumbledore.—la miré con los ojos como platos

__: los veo en la otra vida...—dije y me fui directo a el despacho—Pastel de chocolate—dije y la gárgola se movió y subí hasta llegar

Papá: diablilla, ¿cómo has estado?... escuche que le diste su merecido a los Malfoys—dijo con una sonrisa maliciosa

__: emmmm... bien y ¿tú?—dije extrañada—y ¿me vas a castigar por lo de Malfoy?

Papá: yo no, tú abuelo si... pero por mi hazlo todas las veces que quieras...—dijo feliz y me reí—y ¿por qué les pegaste?

__: le pegue porque llamo a Hermione "sangre sucia" y me enoje; ademas insulto a la familia Weasley y por eso lo golpeé dos veces. Y a Malfoy Mayor porque me quiso tocar mi pelo... y insultaba a mis amigos.