Me senté sobre la silla, cerrando los ojos y largando un suspiro, estaba a nada de darme un pico de estrés. Estábamos en el hotel donde grabaríamos "ademas de mi remix".
Todavía no empezamos, estábamos esperando a que lleguen los que faltan que son Khea y Duki. Admito que estaba nervioso por hablar con Mauro, me cae bien y quisiera poder arreglar las cosas con el.
En cuanto a Ivo, me daba exactamente igual. No me importaba si nos arreglábamos o no. Supongo que todavia tengo un poco de bronca por todo.
Unos golpes en la puerta del cambiador/camerino me interrumpieron. Con mi mejor voz di la orden de que entre, hablando del rey de roma.
Por el reflejo del espejo pude ver como el de trenzas entraba y cerraba la puerta detrás de el. Mi cara no reacciono, estaba seria.
— Hola. - Murmuro.
No respondi, tan solo hice un movimiento de cabeza.
— Escucha, vamos a estar varios dias teniendo que vernos las caras, ¿no pensas que es mejor arreglar esto y ya fue? - cuestiono, alzando su ceja.
Me gire en mi asiento, para poder asi mirarlo.
— Yo con vos no tengo que arreglar nada, en todo caso con quien tendria que hablar seria Joaquin, ¿no te parece? - ataque.
— Dale, boludo. No seas pendejo, para mi ya fue todo. - Le resto importancia con las manos. - Por favor, no quiero incomodar a los demas con estas peleas pelotudas. - Se acerco hacia mi y estiro su mano.
Mire esta, dudoso. Queria pero no podia soportar ese piqueteo que sentia en mi panza. Suspire, estrechando mi mano con la suya.
— Esta bien. - Asenti.
Ivo sonrió, causando que sonriera levemente.
— ¡Buenisimo! - festejo. - Hay algo que tengo que decirte. - Se quedo serio derrepente.
— ¿Que?
— Con Joaquin estamos intentando algo. - Eso fue como una cachetada.
Senti como un nudo se formo en mi garganta, pero decidí ignorarlo. Puse mi mejor sonrisa falsa y hable.
— Me alegro. - Solo eso pude decir.
El de trenzas sonrio.
— Queria decirtelo para que no haya problemas si te enterabas por otra persona.
— Todo bien. - Asenti.
El de trenzas se alejo en dirección a la puerta y, dedicandome una ultima sonrisa, salio por esta. Al momento en que la puerta fue cerrada nuevamente, mi sonrisa cayo, al igual que las lagrimas que resbalaban por mis cachetes.
En 2 segundos mi puño ya estaba rompiendo el espejo frente a mi. Sangre empezó a salir de mis nudillos, pero poco me importo. La bronca y dolor que sentía mentalmente, me nublaban los sentidos.
Tire de mi pelo, histerico. Los recuerdos de los momentos que pase junto a Joaco llegaron a mi mente, ahora son solo eso... recuerdos. Momentos que sucedieron en el pasado y que ahora se esfumaron en un 2 por 3.
Me mire en el espejo roto, era un desastre. ¿Por que nadie me quiere? ▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂
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