Mi novio de mentira (VICTUURI)

CAPITULO 9

Víctor estaba recostado en su cama mirando el techo mientras pensaba en la actitud que tuvo Yuuri en la cafetería. Ponerlo nervioso siendo que al principio era él quien disfrutaba de molestarlo. Ahora parece que los papeles se invertían y eso le divertía.

Notó que Yuuri era un chico bastante atrevido e impulsivo y que haría cualquier cosa para conseguir lo que quería sin importan los medios. Se le dibujó una media sonrisa al pensar en eso.

—¡Planeta tierra a Víctor! —sumergido en su burbuja pudo oír que lo traían a la realidad—. Oye amigo, ¿Qué es lo que te tiene así de perdido? ¿Estás pensando en tu adorable novio? —soltó una carcajada. Por un momento se olvidó que estaba con Chris en su habitación.

—No es mi novio —dijo serio y molesto.

—Bueno, bueno. Pero debo decirte... que eres un maldito suertudo. Ese chico es una monada y deberías poner tus ojos en él —sonrío pícaramente. Víctor volteó en su dirección.

—Es solo un juego, Chris. Nunca me llamó la atención y además sabes que no me gustan las personas que mienten o fingen lo que no son —el rubio sabía que tenía razón, pero no se iba a quedar callado y continuó fastidiándolo.

—Ese chico debe tener una razón para fingir. No vi nada malo en él y me agradó mucho. Si no lo cuidas te lo van a robar —lo miró con perspicacia y después se rio.

—¿De qué hablas? Esto es una mentira, yo no tengo absolutamente nada con Yuuri y estamos fingiendo ser novios. Solo quiero cumplir con el trato y luego volver a mis asuntos. Además no creo que se fije en otra persona, soy el novio perfecto para su plan, ¿Quién podría ser mejor que yo? —Chris levantó una ceja y lo observó. Sabía que algo diferente había en él. Víctor luchaba para no mostrar la molestia que tenía por las palabras de Chris.

—Ok, como tú digas ruso tonto. Aunque, ¿qué hay de Mila? —lo miró con confusión por su pregunta—. Se veía muy entusiasmada al verte. Podría decir que esa chica te devora con la mirada. Es una descarada.

El rubio escuchó comentarios sobre Mila en la escuela. Comentarios de personas que estuvieron con ella o chicas que quisieron acercarse a ella por amistad. No podía entender cómo un chico como Yuuri podía ser amigo de alguien como ella.

—¿Me dirás que no te has dado cuenta de sus actitudes? Ten cuidado, no he escuchado buenos comentarios respecto a Mila —Víctor miró nuevamente al techo pensando que esa chica le daba lo mismo. Se había dado cuenta que trataba de llamar su atención.

—Chris, sé qué clase de persona es ella y no entiendo porque ese idiota quiere ser su amigo. Debería darse cuenta que no vale la pena. Es bellísima y popular, pero nada más que eso. De todas formas no es asunto mío.

Chris se sentía tranquilo de saber que Víctor estaba consciente de lo que esa niña era pero...

—No soy tan estúpido, no caeré en sus provocaciones —se le adelantó, a sabiendas sobre lo que debería estar maquinando en su cabeza el rubio.

Aun así lo miró con dudas. Sabía que Víctor no era fácil de conquistar, pero parecía que Mila era de no darse por vencida así nada más. Largó un suspiro y decidió cambiar de tema. Puso su mejor cara de cachorrito.

—Necesito de tu hermosa caligrafía Víctor, debo escribir la tarjeta que pondré junto a su regalo —juntó las manos en señal de súplica.

Rodó los ojos por la actitud de Chris, pero por dentro le daba gusto que su amigo estuviera feliz con Masumi, aunque él no creyera en esas cosas.

—Amigo ¿no puedes pensar en otra cosa que no sea Masumi? Te quedarás pobre de tanto que gastas en detalles para él —se levantó de la cama de todos modos, acercándose a su escritorio para hacer la dichosa tarjeta.