Cap 20- Partido amistoso

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Pov: Mave

Casi no pude dormir en toda la noche, algo que era extrañamente inusual cuando dormía con Malfoy, fue por eso que me desperté antes dispuesta a huir antes de que pudiera dirigirme una sola palabra, iba a ser un día muy largo y cuanto menos tiempo pasará interactuando con él menos probabilidades tenía de tener que aguantar sus bromas sobre los acontecimientos de anoche.

Hoy era el tradicional partido de quidditch de brujas contra magos, era costumbre que aprovechando la oportunidad de tener a todas las familias de pura sangre reunidas con motivo de la boda al día siguiente de la misma se hiciera una comida en el campo y se jugara el partido como si fuéramos un gran familia estructurada.

Pero una vez más, es todo un espectáculo de cartón piedra, apariencias que vienen de ilusiones pretendiendo ser lo que nunca seremos... Como mi relación con Malfoy.

Corrí hacia la ducha, me vestí cómoda, no teníamos equipación para el partido por lo que opté por un top de manga larga negro con unos botones en la parte del escote, unos joggings grises, mis deportivas altas blancas negras y moradas, me puse mi chaqueta del equipo de quidditch Pride of Portree, que llevaba los colores del equipo, lila negro y dorado.

Peiné mi pelo con ondas despeinadas para dejarlo suelto, me coloqué todos mis anillos de plata, varias cadenas de plata también y el medallón de Malfoy.

Cuando me estaba poniendo perfume para salir todo mi plan se vio frustrado.

-Ohh, con que eres de esas que después del sexo se van sin avisar- me miraba con una sonrisa y los ojos todavía entrecerrados por acabar de despertar, el muy cabrón lo estaba disfrutando.

-No tengo tiempo para tus gilipolleces Malfoy, me están esperando- dije cogiendo mi varita y metiéndola en un bolsillo interno de la chaqueta.

-¿Vuelvo a ser Malfoy?- dijo saliendo de la cama con sus pantalones del pijama mientras que se aproximaba a mí colocándose una camiseta de manga corta negra.

-Nunca has dejado de serlo- contesté simple apoyándome en el tocador que estaba a mi espaldas.

-Auch, entonces supongo que tendré que recordarte como anoche dejé de serlo- amenazó pasando una mano por mi nuca.

Retiré su mano secamente con la poca fuerza de voluntad que me quedaba, solo quería volver a la cama con él y no salir de la habitación en todo el día. Pero eso no era posible, porque es Malfoy, un idiota egocéntrico, manipulador y mujeriego que en cuento pudiera me daría la puñalada para hacerse con el control de Slytherin, nos odiábamos y así seguiría.

-Ahorra saliva, no va a volver a pasar tenemos un plan y lo vamos a cumplir, métetelo en la cabeza. Nos vemos en el partido.- Salí de la habitación dejando atrás a un Malfoy cabreado y bufando.

Cuando llegué las chicas ya estaban en el salón y Pansy se encontraba con ellas, el desayuno transcurrió sin altercados, entre risas llamando la atención de algunos de los presentes en la sala, hablando de temas triviales y del partido. Pansy y yo jugaríamos mientras que Alexa y Eiris, al no jugar al quidditch, nos observarían desde el público.

-Bueno capitana, creo que es hora de reunirse con el resto del equipo para planear la estrategia- me dijo Pansy sonriendo.

-Primero tenemos que saber quién será el capitán del otro equipo- dije sin poder aguantar una sonrisa bebiendo de mi taza de té. Tenía demasiada rabia acumulada y pensaba darlo todo en el campo.

-¿Por qué es importante quién es el capitán del otro equipo?- preguntó Eiris curiosa.

-Eiris estás a punto de presenciar el partido de quidditch, más sucio, tramposo, violento y agresivo de tu vida... y puede que sangriento porque jugamos sin protecciones- dijo Pansy con una mezcla de emoción y simpleza.

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