Pov Mave
Acababa de amanecer hacia una mañana fría supongo que se debería a la hora, sin embargo el sol iluminaba mucho incluso se podía ver desde el cuarto de Malfoy cuando unos rayos de sol tocaban las sábanas.
Me estiré en la cama notando que no había nadie a mi lado, lleve mis manos a mi cara sollozando por tener que levantarme tan temprano, es decir me encantan las bodas y más si son de una de las familias más importantes, había muchas expectativas con esta celebración pero ser terriblemente la "pareja" del padrino es una mierda.
Mientras me seguía hundiendo en mis pensamientos luchando conmigo misma por levantarme de la cama, Malfoy salió del baño cepillándose los dientes.
-¡Por fin te levantas! ya había desistido en intentar despertarte.- dijo con demasiado buen humor para ser tan temprano.
-Cómeme el coño- contesté dándole la espalda.
-No, que después me pides por más- vaciló con una sonrisa apoyado en el marco de la puerta del baño.
Me giré a mirarlo dispuesta a responder, pero en ese mismo instante escuchamos unos gritos ensordecedores al otro lado de la puerta.
Me levanté corriendo de la cama en dirección a la puerta seguida por Malfoy, abrí con un gesto rápido y brusco, para encontrarme a las chicas en mi habitación visiblemente preocupadas.
-¿Qué demonios pasa?- pregunté totalmente confusa.
-El vestido de Eiris, es un desastre, no se puede presentar a la boda con eso- contestó Alexa sentándose en el suelo sujetando su cabeza entre sus manos.
-Por favor no puede ser para tanto, Eiris sal que te vea- salió del baño de mi habitación y mi mandíbula casi rozó el suelo- ¿¡PERO QUE SE TE PASÓ POR LA CABEZA PARA COMPRAR ESE VESTIDO?!
Llevaba un vestido negro con escote de corazón y era corto, es decir era bonito, no era mucho mi etilo pero no era un vestido feo, simplemente no cumplía con ninguna de las reglas no escritas de etiqueta de las bodas de familias importantes.
-Tu hermano me dijo que podía llevar cualquier cosa, que todo iba a estar bien- dijo casi aguantando las lágrimas.
-Nott déjame decirte que tu hermano es un imbécil- intervino Malfoy detrás de mí.
-No llames a mi hermano imbécil, imbécil- dije mirándolo de brazos cruzados, gesto que pareció hacerle mucha gracia mirándome de arriba abajo con una media sonrisa.
-Podemos llamar a mi tía a ver si tiene algo en su tienda que pueda salvarnos- dijo Maddie que había estado pensativa todo este tiempo.
-No creo que te conteste, está preparando a la novia- resolvió Malfoy, quedándose pensativo- ya sé, llamaré a una amiga de la familia que podría ayudarnos- continuó.
-¿Enserio?- le dije con ápice de esperanza por resolver esta situación, Eiris iba a ir a la boda como parte de mi familia no podíamos dar esa imagen de descuido.
-Me debes una- dijo señalándome con su cepillo de dientes- y no te creas que no me la voy a cobrar- me empujó contra la pared metiéndose en su habitación.
-Claro que te las vas a cobrar, ¿Cómo ibas a no hacerlo?, impensable- dije aun sabiendo que no me iba a escuchar.
Me giré a mirar a las niñas que me miraban con una sonrisa picara.
-Ay no, esa cara...- les señalé con el dedo índice- ¿Qué pasa, qué vais a hacerme?
-¿Esa es la camiseta de Malfoy?- inquirió Alexa con diversión.
-No- respondí tajante.
-¿Entonces por qué está su apellido y su número del equipo de quidditch en tu espalda?- preguntó Maddie con una carcajada.
-Además han dormido juntos, eso no parece un teatro- continuó Eiris como si yo no estuviera delante.
-Bueno ya basta- dije cansada- vamos a la habitación.
Nos estábamos arreglando tranquilamente, hablando de diferentes temas poniéndonos al día de los últimos dramas de la escuela cuando tocaron a la puerta.
-Nott soy yo- dijo Malfoy al otro lado de la puerta. Mire a las chicas extrañada y creo que por nuestras caras todas nos preguntamos qué querría.
-Pasa- dije. Llevaba ropa de deporte, unos joggings negros con una sudadera de capucha gris y un gorro negro.
Estaba sentada en mi cama de espaldas a la puerta y me di la vuelta para verlo, él se acercó a mí y sacó una caja alargada de terciopelo negra del bolsillo de su sudadera. Se posicionó detrás de mi sacando algo de la caja y tirando esta abierta a la cama, movió mi pelo hacia un lado y me colocó un collar de plata con el pequeño medallón cuadrado de su familia, y una pequeña esmeralda en forma de diamante.
-¿Este es tu medallón familiar?- dije confundida mirando el colgante para luego mirarlo a él.
-La esmeralda la he añadido yo- contestó evadiendo totalmente mi pregunta.
-¿Por qué me lo das?- dije girándome totalmente hacia él bajo la atenta mirada de las chicas que estaban en un sepulcral silencio.
-Bueno, eres mi novia- contestó simple encogiéndose de hombros.
-No me lo das por eso, me estás marcando como tu territorio- dije mirándolo a los ojos totalmente asqueada.
Me agarró los mofletes con una mano acercándose a mí.
-Como te lo quites vamos a tener problemas- amenazó antes de que lo apartara de un empujón- me voy a correr, espero que cuando vuelva tengas tus cosas preparadas para irnos a arreglarnos al hotel donde se celebra la boda. Nos vemos luego chicas- dijo dirigiéndose a las niñas con un gesto con la mano mientras se dirigía a la puerta.
Todas se despidieron de él y cuando estuvo fuera de nuestro campo de visión me miraron en busca de respuestas.
-Se ha enterado de que tuve algo con su primo, ya sabéis la rivalidad que tienen- contesté sin darle mucha importancia.
Al tiempo llegó la modista de Malfoy, era una mujer mayo muy agradable. Para cuando terminó con el vestido de Eiris, Malfoy ya había llegado, terminé de recoger mis cosas mientras él se duchaba y se vestía.
Se asomó a mi puerta que esta vez se encontraba abierta vestido totalmente de negro con una chaqueta de traje, junto con sus pantalones de traje igualmente y una camiseta negra pegada.
-¿Estás lista?- preguntó mientras colocaba la funda con su traje detrás de su hombro.
-Sí, dije intentando coger la maleta donde llevaba todo lo necesario para arreglarme sin tirar la funda con mi vestido y la caja con mis tacones.
-Trae- dijo cogiendo la maleta en un gesto rápido.
-Que caballero Malfoy- me reí de él.
-Solo quiero dejar de perder tiempo- bufó sin poder evitar una risa por mi parte.
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Slytherin
Romance-A mi ni siquiera tu me haces sombra, Nott, yo soy el príncipe de Slytherin -amenazó Draco Reí cínicamente ante su comentario -Malfoy, querido, tú serás el príncipe, pero la reina, soy yo- su cara de cabreo no tenia precio- ah y no empieces una gue...