RECOMPENSA

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Habían pasado seis meses desde que comenzaron con la idea de adoptar.

Nayeon: ¿Qué llevas en esa bolsa?

Jeongyeon: Oh, es algo para See Ahn.

Estaban a punto de ir a su visita con el pequeño.

Nayeon: ¿Qué es?

Jeongyeon: Un videojuego.

Nayeon: ¿Qué? ¿Para qué se lo vas a llevar?

Jeongyeon: Bueno, es una consola de videojuegos que supuestamente se hace portátil y no sé que tanto. Le pedí ayuda a Jackson y me recomendó ésta, la fui a comprar ayer.

Nayeon: ¿Cómo le vas a dar algo así?

Jeongyeon: ¿Why not? Él cumplió su meta en este medio año y yo le prometí una recompensa.

Nayeon: Oye, está genial que él haya aprendido a leer medianamente fluido y a escribir, pero ¿no crees que darle una consola de videojuegos ahora es un poco... excesivo?

Jeongyeon: Sabemos que See Ahn es un niño muy educado y responsable a pesar de su corta edad. Unos videojuegos no lo van a corromper. Además, miré juegos educativos para niños pequeños, esto va a ser un estímulo más para él.

Nayeon: No lo sé Jeongyeon...

Jeongyeon: Se lo merece, sabes que se lo ha ganado.

Nayeon: ¿Y qué va a decir la encargada sobre esto? Puede que no esté permitido.

Jeongyeon: Leí todas las normas de convivencia y no menciona ninguna prohibición sobre algo así.

Nayeon: Tal vez podríamos esperar más tiempo y dársela cuando esté más grande...

Jeongyeon: Ya te dije que no le pasará nada malo. No sé volverá adicto sabes, obviamente le vamos a decir cómo tiene que usarla.

Nayeon: No me convences...

Jeongyeon: See Ahn siempre se pone triste cuando todos sus compañeros juegan videojuegos una vez al mes y no lo dejan jugar a él. Nosotras no podemos hacer nada y las maestras y cuidadoras tampoco hacen nada. Nuestro pequeño tendrá la oportunidad de hacer lo que tanto le causa curiosidad.

Nayeon: Puede que estés siendo muy complaciente.

Jeongyeon: Él nunca nos ha pedido nada. Si nosotras tenemos la oportunidad de hacerle conocer cosas nuevas, ¿por qué no hacerlo?

Nayeon: Bien, pero yo le daré indicaciones de cuándo y cómo puede usar esa cosa.

Jeongyeon: Está bien mamá estricta *dijo sarcásticamente*

Cuando llegaron al orfanato, el pequeño las saludó con efusividad como siempre.

See Ahn: Este es el abrazo número noventa y cuatro.

Nayeon: Oh, te acordaste.

See Ahn: Por supuesto. Ya casi llegamos a los cien.

Inocente ~ 2yeon ~ TwiceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora