Wonderless - Melancolic Rock SC AU

[FinaLe.]

Sonrió contra sus labios, esos toques torpes y a la vez tan calientes de alguien que aprende sobre la marcha.

—Wonderless. — Susurro contra sus labios. Este se ríe separándose.

Solo nuestra ropa interior nos separaba de estar completamente desnudos.

—¿sin dudas? — Me coloca sobre su regazo.

—Maravilloso. — Corrijo enrollando mis dedos en su cabello. Le vuelvo a besar.

—Creo que se necesitaría de un buen contexto para darlo a entender así. —

—Entre nosotros dos será nuestro contexto mi querido Chico Color Rosa. — Le vuelvo a besar. —Te quedas conmigo y mi ambiente. — Se deshace de mi sujetador para dejar besos por la zona.

—Me quedaría contigo pase lo que pase. — Me miró sonriendo.

—¿Aunque mate todo lo que queda de mi lado optimista? — Me miró confundido. —Los corazones se rompen Killian, las guerras en mi interior son furiosas. —

—Lena. —

—En una relación no todo es felicidad. —

—Eso es lo interesante de las relaciones cariño a pesar de que cada persona es un mundo existe el trabajo en equipo para que nada sea tan pesado. — Suspiro cuando una de sus manos toma mi pezón entre sus dedos.

No me hagas reír, me ahogaré

Déjame llorar un poco más
No voy a sonreír si no quiero

—¿Por qué insistes en que no soy una causa perdida? —

Realmente todo lo que tengo es estar enojada.

¿Si te parece bien?

—No lo eres. — Gruño volteándonos dejándome bajo de él.

Se mueve para ponerse el arnés, le miró unos segundos.

—¿Y si quiero quedarme dentro para que nadie me vea llorar? —

Agrega lubricante en el miembro de hule. —Lee si quieres tomarte el tiempo para llorar y comer helado puedo acompañarte. — Me besa suavemente. Yo me abrazo a él. —O sencillamente puedo esperarte hasta que te sientas mejor y quieras hablar. — Entra en mí de forma lenta y suave. —Te amo, siempre hay que mirar al lado bueno. — Gime cuando ambos tocamos ese punto del otro.

—Solo si quieres quedarte ciego. — Gruñó agarrándome a sus hombros. —También te amo. — Jadeo entre sus movimientos.

Cada toque bien cuidado. Cada movimiento. Cada cambio. Killian tocaba cada parte que había aprendido que era la que causaba más reacciones en mí como nadie. Le gustaba cuando dejaba besos en su cuello, cuando me aferraba a su espalda con mis manos. Juntos como uno dejando que todo no llene.

¿Cómo alguien tan sensitivo como Killian no se daba cuenta de lo jodida que estaba y que solo finjo?

Mi respiración se corta por unos instantes a causa del orgasmo, el primero de una buena seguidilla de la mejor manera de hacer el amor de la existencia.

Si tienes que amputar, no me hagas el torniquete.

Sus besos, sus abrazos.

Desearías que me escapara, cortara lo que no funciona.

Su perfecta sonrisa. Su mirada está llena de amor y comprensión como nunca he tenido. Sin lugar a dudas le amo como nunca antes he amado a nadie... Esa es la cuestión. Una vez leí que uno es incapaz de amar de forma verdadera cuando uno no se ama.