||Bruto||

1K 72 22
                                    

La señora Yagami envió a su histérico hijo a casa junto con Misa para vigilar su estado con la condición de que si habían noticias sobre Sayu serian los primeros en saber. Su regreso a casa fue silencioso, Misa trataba de entablar una conversación pero Light no tenia ninguna intención de cooperar por lo que apenas se limitaba a decir pequeñas palabras, las cuales no decía con mucha expresión. En su departamento todo estaba perfectamente ordenado, limpio y silencioso, acompañado de una atmósfera pesada que Misa no sabia como deshacer. La rubia se preguntaba si tal vez lo mejor seria ir a dormir o charlar sobre lo ocurrido pero su novio no mostraba interés en siquiera mirarla, sin importarle ese detalle tomo iniciativa y dio lentos pasos hacia el inexpresivo castaño.

- Light -Jalo cuidadosamente la manga del traje gris que su novio llevaba- ¿Quieres hablar? 

Pregunto en un tono suave, mientras esperaba una respuesta pero lo único que obtuvo fue un movimiento brusco de Light para apartarla, soltándose de su agarre casi de golpe. 

- ¿Light? 

- Guarda silencio un momento... -Suspiro el castaño. Su cabeza estaba comenzando a dolerle, efecto del estrés que paso la última noche. 

- Lo siento, solo déjame ayudarte -Insistió ofreciéndole sentarse pero nuevamente fue apartada de manera brusca. 

- Por favor, Misa -Gruño un poco, el dolor aumentaba- Solo cállate y déjame en paz

Era evidente que no tenia paciencia para pedírselo de una manera mas amable, estaba estresado y la jaqueca no le facilitaba las cosas.

- Light...

Misa siguió hablando sobre lo que debería hacer para sentirse mejor pero Light no la escuchaba, estaba perdido en sus pensamientos mirando un punto fijo, sobre pensando las cosas una y otra vez sin detenerse, cuestionándose sus acciones pasadas y futuras, todo en solo segundos. "Si no hubiera hecho esto" , "Pude a ver hecho esto mejor" , "Debí hacerlo cuando tuve la oportunidad". Nuevos arrepentimientos e ideas desesperadas lo agobiaron, y llenaban su cabeza de dolor.

La voz de L resonó en su cabeza, diciéndole lo miserable que era el dios del nuevo mundo. 

"Los Humanos no podemos ser así de perfectos" 

Esa frase le llego mas de lo que creía y le fastidiaba aun después de algunos años. Desde pequeño resalto en diversas cosas que ni siquiera le interesaban, pero creía que tal vez el enorgullecer a sus padres le provocaría felicidad...estaba equivocado. Obtenía las mejores calificaciones, era atractivo físicamente, la gente lo idolatraba y creció siendo un modelo a seguir "El chico perfecto" ¿Perfecto?, ¿entonces ser perfecto era no tener emociones? , ¿No sentirse satisfecho con nada?. Prefirió aferrarse a la idea de seguir siendo "perfecto", complacer a las personas podía ser su motivo de vida pero si la perfección para un ser humano no existía, significaba que nunca tuvo un verdadero motivo de vida, era un ser humano patético.

Ahora estaba entre la espada y la pared, debía actuar rápido si quería ganar este juego que el mismo inicio, debía conseguir su nuevo mundo, debía obtener su único motivo de vida que realmente valía la pena.

Misa se acerco a el con un vaso de agua, Light lo rechazo en un principio pero la chica insistió en que lo bebiera, haciéndolo perder la poca paciencia que le quedaba en medio de su colapso.

- ¡Misa solo cállate y déjame en paz! 

- ¡Ah! -Dejo salir un pequeño grito de sorpresa debido al repentino forcejeo que empezaron. 

Sin detenerse a pensar en la mas débil, Light le arrebato el vaso y lo estrello contra el suelo con toda su rabia acumulada, rompiéndolo completamente al instante. El cristal se desparramó por todos lados  y el canario que tenían se asusto ante el escándalo que la pareja acababa de hacer en medio de la noche.

Light y Misa - Death Note - | You're Just My Love | - Light x MisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora