Capítulo 34

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Cassiel Grace

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Cassiel Grace

No sé si ese haya sido el mejor lugar para hablar, creo que el hecho de haber escogido un lugar tan especial para nosotros le da esperanzas de que algo pueda pasar.

Nunca creí que el ilusionado sería él y no yo.

Y no es que no lo ame, no es que no quiera estar con él, por supuesto que lo quiero, pero... no lo sé, no sé si estoy siendo demasiado orgulloso, como siempre. Simplemente no quiero volver a entregarme por completo para volver a salir perdiendo.

—Hasta entonces —me dice y aunque no demuestra emoción en su expresión, puedo escucharla en su voz.

Asiento una vez con la cabeza, finalmente me alejo de él, tratando de poner la distancia que más pueda, no quiero dejarme llevar.

Sé que tendré que ponerme fuerte para no ceder, porque sé el tipo de cosas que me dirá y la verdad es que no sé si seré capaz de no lanzarme a sus brazos, besarlo o decirle que lo amo.

Porque lo amo con cada espacio que hay en mí. Lo amo porque me hizo ser yo, me hizo ver que no todos quieren lastimarme, me hizo ver lo que merezco, me hizo sentirme el chico más amado en el mundo y me hizo feliz.

Jamás me cansaré de repetir lo feliz que me ha hecho porque es lo que más importa aquí. Su manera de amarme, lo bien que me siento a su lado.

Él dijo que algún día íbamos a casarnos y eso me hizo tocar el cielo.

—Al menos ya pasó lo peor de la noche —escucho la voz de Claire detrás de mí y me giro a verla. Se ve súper linda con ese vestido rojo escarlata, agregando la corona repleta de rubíes sobre su cabeza.

—Para ti, a mí aún me queda hablar con Julian —dije en voz baja y vi cómo comenzó a emocionarse—. No, no te ilusiones, no pasará nada.

—Cass, tú lo haces feliz —dice y sonríe dulcemente—, al igual que él te hace feliz a ti.

—Espero que sea feliz, pero no conmigo —claro que quiero que seamos felices juntos, pero me da miedo de que vuelva a lastimarme—, ahora si me disculpas, iré a buscar a las chicas.

Ella se interpone en mi camino cuando intento rodearla, entrelaza su brazo con él mío, sin soltarme, me hace caminar con ella.

—Yo también iba a buscarlas —dice tranquilamente—, y nuestra conversación no ha terminado.

Giro los ojos con cansancio, sólo camino junto a ella mientras la escucho intentar convencerme de que vuelva con Julian.

Divina Eternidad {Elementales 1.5}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora