•| Vino Tinto |•

Capítulo 30 🍷

-Es obvio hermano, así como tu novia y la de Jonathan sólo están a su lado por que quieren su dinero- insinuó Gabriela con tanta indiferencia.

-Gabriela, por favor controla tus modales- regaño con total seriedad el señor Eulogio -no es posible que siempre que vamos a comer saquen este tipo de temas y los tres empiecen a discutir.

-Papá y si te das cuenta de que todo lo empieza Gabriela- acusó Daniel.

-Y tu te tomas el tiempo para terminarlo Daniel- respondió haciendo una pausa -disculpa Marian, lo que menos queremos es ponerte incómoda y no te sientas bien, la verdad esto siempre sucede, en la comida y cena así que ya es normal. Molesta está vez por que te tenemos de visita- pidió disculpas y más relajado el señor Eulogio.

-No se preocupe, está bien pero si me gustaría responder la pregunta de Gabriela y era de por que me enamoré de Jonathan. La verdad yo desde que lo conocí me empecé a sentir más segura, de hecho en la escuela no tengo amigos por que la mayoría juzgan mis gustos y tampoco es algo que me haga sentir mal, Jonathan en cambio me hace sentir que hay alguien que si me quiere y acepta por lo que soy, a decir verdad si juzgue a Jonathan antes de conocer todo lo que tiene y de nuevo te pido disculpas frente a tu familia, lo siento- volteó a ver a Jonathan con una mirada de culpa -fue un error mío, de igual forma a como pensaba de él lo seguía queriendo, él me seguía gustando por eso desde que lo conocí le llegue a dar una oportunidad, me gusta su apariencia así como en sus sentimientos son muy sinceros y más bien dicho, debería estar yo agradecida de que Jonathan me haya dejado entrar en su vida- finalizo firme Marian.

-Con ese discurso puedes convencer a mis padres pero yo no me quito la idea de que ahora que "conoces" a Jonathan no te importe ni un poco su dinero- palabras de Gabriela, hacia todo por fastidiar a la chica.

-Es lo de menos, no estoy interesada en su dinero, afortunadamente no me hace falta nada, tampoco soy una chica que le guste ir de compras y que le guste salir a cines, antros y esas cosas, me gustan los antros pero no soy de gastar en exceso, mis papás aún me regañan por eso, sólo ahorro lo que ellos me dan y futuramente buscaré un trabajo de medio tiempo para poder pagar mi matrícula en una universidad. Hay un distanciamiento con mis padres y tengo orgullo así que lo que menos quiero es pedirles. En pocas palabras, sólo estoy interesada en Jonathan y ya en confianza en sus manzanas, me gustan mucho las manzanas- está vez sonó aún más firme y con toda la actitud por que sinceramente esa era la verdad claro que si! Y tratando de dejar sin palabras a Gabriela, la verdad que ya la estaba fastidiando, pareciera un taladro en la cabeza.

- Eres increíble Marian- halago Daniel y comenzó a aplaudir.

-Veamos si duras, lo siento pero de pronto se me quito el apetito- hablo Gabriela, se levantó y salió de aquel cuarto algo fastidiada.

-Como te dijo antes, no te preocupes así es en cada comida y cena, siempre actúa así y para nosotros ya es costumbre jaja- hablo la señora Cande con simpleza.

-Perdón si dije algo que pudo molestar- pidió disculpas, pero sabía que no era necesario por que en ningún momento ofendió a nadie, tan sólo fue una respuesta a la pregunta que le hicieron.

-No te preocupes, no era necesario dar explicación a la pregunta de Gabriela, al final ahora son cosas de Jonathan y tuyas, él ya está grande y sabe lo que hace, nosotros sólo lo apoyamos y queremos verlo feliz, a lo que dijiste podemos ver que eres una persona con alta sinceridad, dices las cosas como son y que haces feliz a Jonathan, como te dije, eres bienvenida en esta casa Marian- aclaró con amabilidad el señor Eulogio.