AMELIA

CAPÍTULO 22

Conseguir un nuevo trabajo no era una tarea fácil, corrí con suerte al conseguir mi primer empleo en esta ciudad, ahora me tocaba volver a empezar.

Llevaba una semana en la odisea de encontrar un nuevo empleo, lo único rescatable de toda esta situación era que, pese a todo, las cosas con Tom no terminaron mal, comprendió que era lo mejor para ambos y quedamos como buenos amigos, no nos hemos vuelto a ver, pero si nos hemos escrito y sé que todo va bien.

-Hola. -Respondí al escuchar mi celular sonar, era un número desconocido.

-Buenas tardes ¿Con la Señorita White? Hablamos por la solicitud de empleo.

La llamada fue corta, pero lo suficientemente emociónate ¡Qué maravilla! Dije a mi misma, había conseguido empelo y desde mañana lunes empezaría.

- ¿Adivina quién consiguió trabajo en una empresa de diseño de interiores? -Dije emocionada a Emma quien estaba conmigo.

Amabas nos emocionamos ante la noticia, fue más rápido de lo esperado.

***

Indudablemente mi primer día de trabajo fue agotador, adaptarse a los cambios suele ser complicado, pero el tiempo me ayudará a llevarlo mejor, el sueldo no es tan bueno en este nuevo empelo, pero no podía rechazar el trabajo, la boda de Emma se aproximaba y los gastos para ella cada vez eran más fuertes, debía ayudarle en lo que pudiera.

***

Los días habían transcurrido tan de prisa que ya llevaba más de un mes en mi nuevo empleo y estábamos a un mes más de la boda de Emma, por el momento todo surgía muy bien, a ambas nos emocionaba el gran día, me estaba yendo bien en el trabajo, aunque no sea mucha la paga. Por otro lado, seguía manteniendo contacto con Tom, como amigos, claro, y ya no había vuelto a saber de Dylan.... Esa última parte aún me generaba conflicto, era lo mejor pero aun así sentía el dolor que generaba su recuerdo, sin embargo, poco a poco había aceptado la realidad y sentía que podría vivir con ello.

- ¡Este está perfecto! -Exclamó Emma, estábamos escogiendo los vestidos para la boda, el de la novia ya había sido seleccionado, ahora estábamos en el de las damas.

- ¡Me encanta! -Estuvo de acuerdo Abigail, quien también sería dama.

-No busquemos más, es fabuloso. -Dijo Amber, sí, ella también sería dama, desde que sale con Peter hemos mantenido contacto y durante este último mes vino a la ciudad y estuvimos frecuentando, al principio se sentía extraño por ser hermana de Dylan, pero ella es muy linda ¿Por qué no ser amigas? las idioteces de su hermano no deberían impedirlo.

- ¿Qué opinas Lía? -Me preguntó Emma refiriéndose a los vestidos de las damas.

-Opino que tal vez te opaquemos el día de toda con estos vestidos. -Bromeé entusiasmada, todas nos reímos. Al terminar salimos de la tienda y fuimos por un café, pasamos la tarde conversando y riendo.

- ¡Me siento exhausta! -Exclamó Emma echándose en el sofá a penas llegamos al departamento.

-Somos dos. -Dije imitando su movimiento.

-Se me antoja pizza y vino... -Dijo Emma.

-En seguida la pido. -La verdad también se me antojaba, y preparar algo era lo último que queríamos hacer después del cansado día.

Al fin nos encontrábamos en plena comodidad, comiendo pizza, tomando vino y disfrutando de una buena película de suspenso, ambas dimos un sobresalto cuando mi celular empezó a sonar, miré la pantalla y me fijé que era mi mamá quien me llamaba.