𝐌𝐢 𝐄𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐌á𝐬 𝐁𝐫𝐢𝐥𝐥𝐚𝐧𝐭𝐞 - 𝘉𝘪𝘣𝘪 𝘹 𝘚𝘢𝘯𝘥𝘺

Todo sale mal

Sandy sería despertado por Stu, quien parecía muy apurado. Ahora era el momento en el que necesitaba la completa atención de Sandy para llevar a cabo su presentación final con rampas, y necesitaba el uso de fuegos artificiales para hacer del acto mucho más impactante y no sólo dejarlo como un robot que salta de un lado a otro.

- Sandy, no te duermas ahora, ya haré mi acto final y aquí es cuando te necesito. Presiona el botón cuando te haga una señal.

- Bueno... – decía para luego bostezar.

Sandy miraría el control mientras Stu salía de nuevo en escena, no escuchó bien a Stu por lo que creía que tenía que presionar un botón y luego el otro. Cosa que hará.

Sandy no podía creer que ya había pasado una hora desde que se había dormido, sólo recordaba del sueño la escena de Bibi sobre él y el impacto que eso le dio a este del miedo y nervios. Probablemente si Stu no lo despertaba, el mismo sueño lo haría en ese preciso momento gracias a eso.

El chico pelimorado se asomó al área de presentación para ver a Stu en escena y estar "pendiente" de su señal en el acto, también quería fijarse en cuántas personas habían en el público y... Sí que eran demasiadas. Sandy se preguntaba cada cuanto este robot hacía espectáculos como para que tuviera tantos ojos encima.

Trató de buscar con la mirada a una chica en específico entre todo el público para hacerle saber indirectamente que él estaba ahí, para así poder hacer que ella pueda acercarse sin él cometer otra tontería por querer saber de la chica.

Rebuscaba y rebuscaba entre tantos asientos, finalmente la encontró. Parecía venir acompañada con los de su pandilla, cosa que le daba curiosidad pues no veía a Bibi con otras amistades cercanas. Eso se le hacía raro a Sandy, pensaba que ella al jugar bien tendría un círculo social amplio.

No le prestó atención a eso y sólo se quedó observándola, ésta vez la notó con un atuendo distinto a como la vió en primer lugar. Ella tenía una chaqueta morada que a él le gustó mucho por su color, era su color preferido. Un top claro y jeans negros casuales. La sencillez de su atuendo actual le fascinaba, quizás por lo cómoda que era pero también tan apegada a su estilo propio.

Al ver a la chica, Sandy no podía evitar recordar los últimos segundos del sueño y la imagen tan intimidante pero culinaria de la Bibi demoníaca que su mismo subconsciente creó. Posiblemente reflejada en que muchos le tenían miedo al tenerla de cerca en batalla por su fuerza y forma de ser tan potente. Eso le hizo sentir un poco de pena, ya hasta incluso se sentía culpable por pensar tanto en un día sobre ella. Pero era inevitable encontrarla hasta en sueños.

Sandy, de hecho, continuaba soñando aunque estuviese despierto. Algo muy en el fondo suyo sabía que esa chica podría ser un peligro para él, pero que él no haría nada para detenerla porque su curiosidad era mucho mayor. Impredecible e intensa, todo un polo opuesto a él.

Con todo esto, el dormilón no había notado que Stu ya había empezado a hacer su acto final, no hasta que vio que Bibi hizo una expresión de asombro igual que los demás en el público que la acompañaban.

Eso causó que él "despertara" nuevamente de su fantasía y viera de inmediato a Stu, quien había saltado desde una rampa bastante enorme en el que si caía podría romperse una o dos piezas de su mecánico cuerpo.

Stu le hizo una señal con muchísima rapidez a su ayudante con el pulgar robótico hacia arriba, Sandy lo notó y en lugar de hacer lo que Stu le explicó con mucho enfoque, presionó el botón izquierdo que no debía de presionar (que hacía que los cohetes se moviesen de su posición actual y se dispararan hacía otra dirección) y luego el derecho (que lanzaba los cohetes).

Resulta que los cohetes ya estaban listos en posición para ser disparados hacia el cielo, al Sandy moverlos de nuevo con el control los cohetes estaban a punto de ser lanzados a dirección de la rampa en la que Stu iba a caer. Pero ni modo, ya lo presionó. Stu se dio cuenta de esto tarde, ya cayendo al otro extremo de la rampa, ahí fue cuando empezó lo peor.

Prácticamente Stu volvió a salir volando ya que los cohetes y fuegos artificiales impactaron contra la rampa, haciendo que Stu acabase estrellándose en una parte de los asientos del público fuera de la zona de presentación.

Eso asustó a muchos del público, pues pensaron que el actor de riesgo ésta vez se había hecho un daño enorme. Pero para la suerte de Stu, él había caído cerca de los asientos de la familia mecánica, más específicamente, en donde Nani estaba. Nani no chocó con él gracias a que utilizó un método de teletransportación instantánea con Peep, el pequeño aparato flotante que la acompañaba y le ayudaba a tener más funciones como robot niñera y defensiva.

Nani, siendo otra robot, se percataría de todos los daños que tuvo la mecánica de Stu por lo que Pam y Jessie intentaron auxiliarlo sacándolo entre el público. Cuyo público había quedado completamente en silencio, solo habían susurros entre todos con respecto al accidente, el cómo ocurrió y si Stu iba a estar bien.

Se llevarían a Stu fuera del lugar, algunos del público empezarían a irse también. Sandy no podía creer lo que hizo, fue ahí cuando se dio cuenta que Stu le había repetido muchas veces sobre ambos botones gracias a que había uno que no debía de presionar, confundiendo sus palabras. Esto le hizo sentir muy culpable siendo su exceso de sueño lo que llevó a Stu a arreglos maquinales.

Sandy que continuaba asomado, miró como Bibi se mostró bastante intranquila por el accidente y estrello de Stu, eso no ayudó a Sandy con su sentimiento de culpa.

Realmente sintió que este no fue en lo absoluto su día, por lo que de ahí Sandy simplemente decidió irse al palacio de su zona y poder al menos comer algo e irse lo único que le salía a la perfección, dormir. Por esto y más no le interesaban las interacciones sociales o ayudar a otros siendo su defecto de ser dormilón la causa de porqué no le gusta.

Bibi, quien fue una de las últimas en irse, se dio cuenta de la presencia de alguien más en el territorio de presentación. Notó que sería Sandy, pero lo veía muy decaído. ¿Qué hacia alguien como él ahí? Pues ella no lo sabía. Quizás estaba ahí para asegurarse de que todo estuviera bien, ¿o no es así?

Ya era la segunda vez que Bibi encontraba a Sandy en actividad extraña, ya no estaba tan segura si querer acercarse a él y ser su amiga.

Ambos dejarían el lugar como todos los demás, una por su lado y el otro por el suyo.

Mientras tanto, con Stu, Nani, Pam y Jessie en una casa rodante amplia.

- Y creo que ya eso sería todo – decía Pam con herramientas en mano, pasaba su tonificado brazo sobre su frente para sacarse algo de sudor. — Hija, pásame mi torreta de sanación.

- En seguida mamá – Jessie, quien ayudó en muchas cosas a su mamá durante el arreglo de Stu, iría de inmediato en busca de la torreta de su mamá que, tenía de función ser una fuente de energía sanadora eficiente. Especialmente para maquinarias.

Jessie le dejaría su torreta a un lado de Stu, siendo Pam quien la activaría para que Stu pudiese recobrar algo de energía, sanar dolores y estar como nuevo. Stu no estaría despierto -o bien, en este caso, encendido- en el proceso del arreglo. Entre Jessie y Pam irían a tomar un descanso y algo de fresco, Nani, quien visualizaba todo y les alcanzaba las herramientas a ambas chicas cuando hacían su operación, se quedó a esperar de que Stu despertara sin alguna falla y de que estuviera bien.