CORTO - ¿Un amor de tuercas?

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La torreta tenía un efecto sanador muy rápido, por lo que sólo fue en cuestión de horas que Stu abriese su único ojo, enciendiendo esa clásica luz que desprendía de él. Nani no se había movido de su sitio desde entonces, incluso recargándose ella misma mientras esperaba. O es decir, "dormía". Ella se reactivaría al sentir actividad proveniente del robot contrario.

- Disculpa joven dama – diría Stu, refiriéndose a Nani — ¿dónde estoy?

Nani, que parecía intentar brindarle algo de confianza al auxiliado con un rostro feliz de verlo despierto, le indicaría que estaban en una casa rodante de Pam, una señora mecánica profesional, ya que él tuvo un pequeño accidente y ella fue con quien casi se estrella entre el público.

Stu, apenado, intentaría disculparse con la pequeña dócil robot que estuvo acompañándolo. Pero Nani le hizo saber que no tenía nada de qué preocuparse, que aún sólo siendo una pequeña niñera, tenía muy buen ojo y reflejos.

Ambos robots salieron del lugar, Pam estaba dormida en una silla mecedora fuera de la casa rodante mientras que Jessie parecía estar dormida dentro en su habitación. Pues ya era tarde de noche.

Stu se sentía fantástico y renovado, tenía tantas ganas de dar giros y derrapar con sus nuevos ajustes, era ahora más que nunca que sentía la necesidad de hacer cosas increíbles. Y quería enseñárselo a la joven chica que le acompañaba esta noche.

Nani nunca estuvo dentro de cosas que otros llamarían geniales o intrépidas, ella desde que recuerda siempre fue una chica de casa rediseñada por la misma Jessie para cuidarla mientras estaba Jess pequeña, que bueno, ya no era tan pequeña ahora.

- He-heey chiquita, ¿te gustaría ver el mejor espectáculo de tu vida? ¿Con el gran y espectacular-asombroso-fantástico Stu? – decía con la mayor emoción que ha sentido, dando pequeños giros mientras liberaba pequeñas llamitas desde sus dedos índices.

Nani es muy sobreprotectora debido a su sistema, que recientemente ella haya visto a Stu herido no le generaba mucha confianza de que él regresara a sus locas acrobacias tan pronto. Pero tampoco era alguien para decirle que no podía hacerlo. Sólo le diría con un tono bastante dulce - Está bien, pero ten cuidado.

Eso ablandó un poco a Stu, ya que nadie le solía decir que tuviera algo de cuidado en lo que él se dedicaba. Sin perder la compostura, junto a Nani se fue a un sitio libre de arena con muchas rocas y cosas que podía pasar a través de ellas y/o saltarlas.

Nani sólo se quedaría viendo desde una muy buena distancia a Stu, quien empezaría dando una carrera bastante veloz en la espaciosa arena. La velocidad era tal que podía observar como los arranques de Stu prendían en llamas el camino que dejaba. Eso asustaba a Nani pues reconocía que el fuego no era seguro.

- ¿Estás bien? – exclamaba Nani desde su sitio, a pesar de que era normal en Stu, su sistema no le permitía confiar en los métodos peligrosos.

- ¡Sí qué lo estoy! – voceaba con felicidad, saltaba, chocaba, daba giros en el aire, iba a toda propulsión. Se sentía libre e increíble. Se sentía infinitamente agradecido con Nani y su familia por haberlo hecho regresar a la normalidad.

Le daría un paro a todo lo que estaba haciendo e iría con Nani quien con mucho interés estuvo viendo las locuras que él hacía.

- ¡Nani, eres la mejor! Estoy muy agradecido contigo.

- ¿Yo? ¿En verdad? – Nani se mostraría contenta al escuchar sus palabras. ¡Qué halago!

- ¡Sí que sí! Quisiera invitarte mañana a una pequeña presentación que pienso montar ya que no pude terminarla hoy. Asistirán pocos, pero el show tiene que terminarse con estilo. ¿Te gustaría ir?

- Cuenta conmigo – afirmaba Nani aún con su contenta expresión.

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Al día siguiente durante la tarde, Stu volvería a montar un acto mucho menos elaborado en la que sólo haría la presentación final del espectáculo anterior que fue la única que no pudo completar.

Nadie de los brawlers del parque asistió más que los robots que fueron construidos para las atracciones de Starr Park y esto no le molestó a Stu en lo absoluto.

Sin cohetes o pirotecnia añadida para solamente hacerse ver "más cool" Stu haría el salto de rampa más alto de su existencia, con una velocidad increíble. Con todo y una pirueta en el aire, lograba llegar al otro extremo, cayendo seguro en la rampa opuesta.

Su presentación final ahora había sido completada y su meta de superarse a sí mismo también lo había sido, todo gracias a Nani.

Mientras los demás robots celebraban por él, Stu continuó dando vueltas por la arena de presentación, posando con sus dedos apuntando hacia la chica más asombrosa que jamás había conocido y que estaba ahí viéndolo. Nani, la niñera robot, era genial a su manera sin que necesariamente hiciera acrobacias como él. Le hacía feliz lo contenta que reaccionaba por su atención hacia ella, ¿pero cómo no apreciarla?

Stu finalmente encontró a alguien que sabía que estaría ahí para él en sus fallas, preocupándose por él sin ningún interés o cosas a cambio, por lo que se aseguraría de mostrarle siempre lo mejor de sí mismo hacia ella

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Stu finalmente encontró a alguien que sabía que estaría ahí para él en sus fallas, preocupándose por él sin ningún interés o cosas a cambio, por lo que se aseguraría de mostrarle siempre lo mejor de sí mismo hacia ella. Su nuevo motivo de inspiración.

𝐌𝐢 𝐄𝐬𝐭𝐫𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐌á𝐬 𝐁𝐫𝐢𝐥𝐥𝐚𝐧𝐭𝐞 - 𝘉𝘪𝘣𝘪 𝘹 𝘚𝘢𝘯𝘥𝘺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora