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014
• Prendas coloridas que no combinan •
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— ¿Es esta...?
— Sí, esta es la tumba de Wally.
No dije nada más, le permití a Ruby tener su propio momento para organizar sus pensamientos. Yo había estado el día del funeral; sin embargo, ese evento se había llevado a cabo en una pequeña capilla especial. No sabía que habían decidido que él se quedara acá en este cementerio cercano y no en su pueblo natal.
Wally era un gran chico, fue una noticia muy dolorosa para todos nosotros, y ni me puedo imaginar lo que siente Ruby.
— Nunca tuve la valentía de despedirme apropiadamente de él, no asistí ni al funeral y en realidad... Es la primera vez que estoy acá— Dijo Ruby, hablaba tan lento que parecía como si cada palabra se intentara sujetar lo más posible a su garganta como para no ser escuchada.
Él solo observaba con los ojos cristalinos a la tumba de su querido primer amor.
Y casi como si fuese instintivo, decidí tomar su mano en busca de darle algo de comfort. A los segundos, sus lágrimas empezaron a brotar sin control alguno. Nunca lo entendí... ¿Por qué lo hiciste, Wally? Si me hubieras hablado, si te hubieses sincerado conmigo. Y quise odiarlo, estar molesto y pretender que fue su culpa. Pero no pude, no pude— Dijo Ruby antes de quebrar en un llanto mucho más fuerte, yo lo observé descorazonado y sin saber qué hacer o qué decir.
Si es que no hay nada que yo pueda hacer por él.
— Pero si no fuera por tí Gold, ni siquiera hubiera podido venir acá— Volvió a hablar Ruby, casi como si hubiese leído mi mente. Lo sentí apretar mi mano con fuerza, y vi una pequeña sonrisa amarga.— Al menos podré finalmente despedirme apropiadamente de mi querido amigo.
Soltó mi mano y se puso de rodillas frente a la inscripción de la sepultura, yo seguí su acción al instante.
Hubo unos momentos de silencio, donde Ruby se mantuvo pensativo frente a la tumba. Poco a poco disminuyendo las lágrimas hasta que de ellas solo quedó el rastro que alguna vez recorrieron su rostro; mientras que, su respiración se tranquilizó y sonrió ligeramente con una cierta nostalgia en la mirada.
— No me olvidaré de tí jamás Wally, y haré mi mejor esfuerzo para poder siempre recordarte con la misma alegría que me diste durante esos años— Empezó a hablarle con ese tono de voz suave y ligero.— Honraré tu memoría y te prometo que no huiré más.
— ¡Señor Gold, señor Gold, mire!— Volteé hacia donde escuché esa voz y veo a un pequeño Sun acercándose emocionado.— Encontré un gatito.
Levantó sus pequeños brazos para acercar al gato lo más posible a mí, el cual maulló ante el movimiento repentino.
— Primero, ya te he dicho que no me digas señor, no estoy tan viejo para eso aún— Le dije, el pequeño solo se rió.— Y segundo, ¿de dónde lo sacaste?
Sun regresó al pequeño animal para así y con una mano señaló hacia unos arbusto donde habían otros niños jugando.
— Lo encontré por ahí mientras jugaba con Moon, ¿verdad qué es muy bonito? Tiene rayas naranjas y parece un tigre.
Oh, ya sé que quiere este niño.
— Y tú quieres quedártelo, ¿verdad?— Sun sonrió nervioso al verse descubierto, y puso esa carita de cachorrito que sabe que a ningún adulto no puede no enternecerle.
— Por favooooor— Me pidió, yo lo miré espectante.
Como si realmente lo estuviera dudando, pero la verdad es que este niño ya se ganó suficientes puntos por solo preguntarme. Yo solo metía a los animales a mi habitación sin que nadie se entere.
— Yo haré como que nunca ví nada, y si lo mantienes en tu cuarto tranquilo sin que el viejo Oak se de cuenta, no creo que haya problema.
— ¡Gracias, Gold!— Dijo Sun, me abrazó y entró a la casa emocionado.
Niños, el mejor invento de la naturaleza.
Mientras vigilaba que ninguno de esos chiquillos se sacara un ojo, escuché la notificación de mi celular.
3 Mensajes Nuevos
Hola, Gold! Soy Blanca, este es un nuevo número
¿Cómo estás? Los niños te extrañan bastante, y yo también....
¿Te encuentras libre hoy?
12:57 pm √√
Escuché mi suspiro preocupado, sabiendo qué es lo que ella quería.
Yo sabía de tiempo que ella simples colegas del trabajo no quería que fuésemos, tanto tiempo en este juego y no puedo no reconocer cuando alguien está interesado en mí.
Así como puedo ver esa misma atracción en Ruby. Sí, no soy ciego. Esos sonrojos, esos nervios, los juegos de palabras, su sola existencia me da una respuesta positiva.
¿Pero está él listo para aceptar la más mínima atracción? ¿Para querer sentir algo más? ¿O al menos para aunque sea darse cuenta de lo perdidamente enamorado que estoy de él?
"Oye, esa noche que estuvimos juntos lo cambió todo para mí... Solo para que sepas."
Como si pudiera decir algo así, o si debería siquiera.
Ruby tiene muchas otras cosas en qué enfocar su cabeza ahora, y por dios si acabamos de ir hace unos días a que se despida de Wally y empiece a cerrar ese capítulo en su vida. Lo menos que necesita es que venga alguien a complicarle aún más con líos de amores y romance, y peor aún alguien con tanto trabajo en sí mismo en camino.
Y desde la sinceridad, tampoco puedo decir que sea la persona más valiente como para arriesgarme a ser rechazado; no al menos por él, que me gusta mucho más que un buen alimento luego de una semana de ayuno.
Bueno... ¿Y no dicen por ahí las malas lenguas que un clavo saca a otro clavo?
¿Nos vemos esta noche, linda?
3:52 pm √√
Esto es lo mejor, simplemente dejar ir estos sentimientos atropellados y tan intensos. Tal vez así -con esta nueva compañía inminente- ya al menos pueda intentar llenar un poco de este vacío tormentoso.
Es casi como esa canción, ¿Cómo iba?
"Laura no está, eso lo sé, y no la encontraré en tu piel. Es enfermizo sabes que no quisiera, besarte a tí pensando en ella. Esta noche inventaré una tregua, ya no quiero pensar más, contigo olvidaré su ausencia..."
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Todo iba bien... Hasta que te vi con esas medias verdes |AU| Eyewearshipping
Hayran KurguLa noche tenía que ser perfecta, era una de las más importantes de mi vida. Pero en el momento que apareciste con esas medias verdes, el rumbo de mi perfección cambió. - ¿Realmente creíste que nadie lo notaría, Gold? Es increíble cómo algo tan simp...