Through the years

If I had...

Disclairmer: Bueno, ustedes se darán cuenta cuando lo lean. Tomenselo con calma y recuerden: esta es una historia Jelsa.

Año 2024

Jack

Ha llegado a su destino...

Habló la voz del GPS tan pronto llegamos al asombroso hotel ubicado justo en el corazón de Nueva York.

–Bueno... supongo que es todo– dije abriendo la puerta trasera sabiendo que, habiendo hecho el pago electrónico, no quedaba transacciones por hacer entre yo y el conductor.

El maletero se abrió y me apresuré a tomar mi maletín.

–Permítame ayudarle– dijo el conductor que insistió en auxiliarme con mi equipaje a pesar de que era nada más que una maleta pequeña.

–Gracias... uh– hice una mueca dándome cuenta de que le había contado mis intimidades a alguien cuyo nombre permanecía desconocido para mí.

–Lucio, Lucio Best– extendió su mano.

Sin dudarlo la estreché –Soy Jack Frost–

–¿Jack Frost?– preguntó el hombre entrecerrando los ojos como si estuviera pensando algo –Hey, yo conozco ese nombre... ¿no eres el que escribió esos libros para niños?–

Solté una pequeña risa avergonzado –Sí, soy yo–

–Mi hija es una gran fanática, se volverá loca cuando sepa quien estuvo en mi auto hoy– suspiró.

Me decidí a apoyar mi maletín contra el metal de la cajuela y abrirlo para extraer dos de los varios boletos que tenía guardados en este y se los entregué.

–Mañana por la mañana habrá una lectura del nuevo lanzamiento con una celebridad invitada, por si les gustaría ir– me encogí de hombros.

–¡Oh hombre!– Lucio parecía bastante sorprendido –¡Gracias, no sé qué decir!–

–Gracias a ti, me hiciste ahorrarme unas cuantas sesiones con mi terapeuta– bromeé tomando mis cosas.

–¡Nos vemos mañana!– se despidió.

Me di media vuelta y le sonreí –Nos vemos– respondí antes de seguir mi camino hacia el lobby. Después de hacer check-in con la recepcionista y de recibir mi llave, arrastré mis pesados pies hasta el elevador dorado y después por los largos pasillos del duodécimo piso donde me recibió la típica habitación individual, la cual estaba diseñada y pensada para sus comúnmente ocupantes, los hombres de negocios. Coloqué mi maletín sobre la mesa y mi maleta dentro del armario, tomé uno de los ganchos para colgar el saco de mi traje y evitar que este se arrugara, aflojé el nudo de mi corbata para deshacerme de esta al igual que el resto de mi ropa.

Dejé fluir mis pensamientos mientras dejaba que el agua caliente de la bañera relajara los músculos adoloridos de mi cuerpo y fue así como aquella maldita mosca comenzó a zumbarme de nuevo en el oído, haciéndome la misma pregunta que me había repetido por años.

¿Qué hubiera pasado si...?

.

2013

Narrador

–Jack...– Elsa lo tomó del hombro con suavidad para alertarlo sobre el medico que se aproximaba hacia el grupo de personas en la sala de estar.

Hipo había sido operado la noche anterior y logró sobrevivir al procedimiento, pero seguía en riesgo por lo que solo sus padres habían sido capaces de verlo después de la cirugía.