★Veinte★

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—Tú, sí tú—

Se acabó el horario de visitas por hoy

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Se acabó el horario de visitas por hoy. Mañana volvería, su tía a sido la que se ha quedado con ella.

Volvimos a casa, mi hermano conducía. No le había visto en todo el tiempo que habíamos estado allí. Seguramente llevaría a los padres a casa.

Me están hablando porque escucho algo y siento que me miran pero yo no me entero de nada de lo que dicen.

Estoy en otro mundo. No existo mentalmente.

Cuando el coche frena me quito el cinturón y bajo rápido. Me quiero ahogar ahora.

— ¡Janne! —alguien grita mi nombre.

Lo único que puedo pensar es en llenar la bañera, ponerme los auriculares y meterme debajo del agua con la ropa.

No sé si los auriculares aguantarán pero me da igual.

Abro la puerta con las llaves y subo las escaleras. Después de un rato la bañera está llena de agua fría.

Agua fría en pleno invierno, estás loca Janneth.

Pero si no lo hago vendrán otra vez esos pensamientos y no aguantaré. Esta es mi manera de alejarlos porque cuando esté dentro solo pensaré en que hace mucho frío.

Me quito los zapatos y meto solo los pies. Esta congelada.

— Janneth ¿Donde estas? —grita mi hermano.

Miro mis pies y me voy sentando lentamente. Una vez sentada cojo aire y me sumerjo en el agua fría.

Frío, frío, frío solo pienso eso.

Por fin se fueron esos pensamientos malos. Por fin encontré paz en esa guerra dañina. Por fin mi mente descansa de esas cosas hirientes.

— ¡Janneth, joder!

Alguien me coge de los hombros y me sube corriendo.

— ¿Qué haces? —le pregunto a Joey.

— ¡¿Qué haces tú?!

— Joey —le llama una tercera voz—. Sal de aquí, déjame a mí.

Mi hermano se sienta en el suelo y ahí mismo me derrumbo. Lloro todo lo que no he llorado en toda esta tarde.

Me saca como puede, me da una toalla seca y calentita, envuelve mi cuerpo con ella y se va al armario a sacar ropa seca.

Salgo del baño y me siento en la cama.

Todos me miran preocupados, yo solo puedo llorar silenciosamente.

— Para Janne —me dice Mack—. Deja de clavarte las uñas.

Tú, yo y las estrellas ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora