____ Thompson trabaja como asistente en comunicación desde hace unos meses en Jeon Corporation, una de las corporaciones más grandes e importantes de Corea del sur. Una noche la empresa está de celebración y ella termina enrollándose con un desconoc...
—Uh, estoy muy nerviosa —Lisa agita sus manos levemente buscando la forma de calmarse. Ella lleva un vestido sencillo pero elegante de color negro, el cual le queda perfectamente, también lleva tacones del mismo color, por mí parte llevo un vestido de color vino sin mangas y con un cuello en v, con una falda larga, pero con corte dejando ver una de mis piernas y unos tacones plateados. Coloco una de mis manos en su hombro regalándole una sonrisa tranquilizadora, aunque la verdad era que yo estaba igual o más nerviosa que ella. Aunque en el viaje que tuve ya hace un tiempo sí que tuve que asistir a varios eventos, ninguno fue tan importante como lo era el de esta noche o por lo menos lo sentía así por el hecho de que si algo salía mal a quienes señalarían seria a nosotros.
Jungkook y yo habíamos llegado al lugar del evento hace unos pocos minutos, no éramos los primeros en llegar, pero si los que más llamaron la atención por el simple hecho de haber llegado juntos. Aún tenía la mirada de algunos indiscretos o quizás simplemente curiosos que querían saber quién era la chica con la que había llegado el gran Jeon.
Aquel lugar era inmenso, estaba bien decorado y organizado. Sin poder evitarlo una chispa de orgullo me invade, yo había sido parte de todo aquello y había quedado espectacular. El piso era de un color café claro porcelanato y las paredes de un color blanco cubierto por un decorado de cuadros que lo hacían parecer casi como un museo. Habían varios sofás y pequeñas mesas de color blanco y rojo. Afuera había una terraza cubierta de mesas y un pequeño escenario. Aquel lugar estaba cubierto por varios tipos de plantas, flores y luces de color amarillo, era un buen ambiente y el lugar perfecto para cenar.
—Señorita Thompson, por favor sígame. —Jungkook me hace una señal con la cabeza para que vaya detrás de él. Le vuelvo a dar una vez más ánimos a Lisa para después seguirlo—. ¿Nerviosa? —Me observa con una pequeña sonrisa en los labios.
—Un poco, sí.
—También lo estoy —dice—. Tengo una sensación extraña, como si fuese a pasar algo...—Me confiesa de repente muy serio, suelta un suspiro acomodándose las mangas de su camisa negra. Todo su traje es de un color negro a excepción del blazer el cual es blanco—. En verdad espero que todo salga bien y sea una gran noche.
Coloco mi mano en la suya dándole un pequeño apretón, aquello parece sorprenderlo, mira nuestras manos durante unos segundos antes de voltear a verme a mí, le sonrió.
—Todo ira bien, ya verás.
Me devuelve la sonrisa cogiendo mi mano entre las suyas. Un carraspeo hace que nos sobresaltemos y alejemos casi al instante. Jin está al frente con un rostro neutro, tiene un traje de un color vino igual que yo, a excepción de su camisa la cual es blanca y sus zapatos son negros, lleva también unos lentes los cuales lo hacen ver serio.
—Si les parece bien, ya va siendo hora de que empecemos a recibir a los invitados.
—¡Sí! —Le contesto casi al instante a Jin dándole una rápida mirada a Jungkook quien esta sonrojado, seguramente yo estoy igual. Sin esperar a que ninguno de los dos me responda me pongo en marcha hasta la entrada.
Entre sonrisas y saludos formales, el tiempo me parecía que iba demasiado lento quizás por el hecho de que me sentía incomoda al no conocer a la mayoría de invitados o por la para nada indiscreta mirada que Jin nos estaba dando. Había pasado quizás más de una hora por lo que suponía que la mayoría de invitados habían llegado, esperaba que no nos mantuviéramos por más tiempo en aquel lugar y pudiéramos pasar a otra cosa.
—Jung, Park, que bueno es que hallan venido. —La sonrisa cortes que tenia se transformó en una expresión de sorpresa que rápidamente intente esconder. Aun no terminaba de acostumbrarme a la relación que tenían aquel par.
—Gracias por invitarnos. —Jihyo le responde con una sonrisa en los labios abrazada al brazo izquierdo de Hoseok—. Es bueno verte, no hemos hablado desde...ya sabes...la otra vez. —Asiento evitando su mirada, repentinamente incomoda por que me recordara ese día.
—Sí, he estado ocupada, pero me alegro porque estén juntos. —Dándole una sonrisa sincera tanto a ella como Hoseok, terminamos por saludarnos.
—¿Qué fue eso de la otra vez? —Pregunta Jungkook sin dejar de mirar al frente—. Te pusiste incomoda cuando la señorita Park lo menciono.
—No...no es nada, solo se refería a cuando le fui a entregar unos papeles.
Estaba segura de que Jungkook no se quedaría con esa respuesta y buscaría la forma de sacarme la verdad, pues su mirada de "si claro" que me acaba de mandar me lo decía, sin embargo, prefirió dejarlo por el momento ya que con Jin cerca preferíamos mostrar las formalidades.
—Ya han llegado la mayoría de invitados, así que podríamos retirarnos de este lugar y dar comienzo al evento. —Jin acomoda sus gafas volteando levemente hacia adentro, mirando al interior de aquel lugar.
—Sí, será mejor que...
—Que bien, no he llegado tarde ustedes siguen ahí parados. —Jungkook se tensa ante la voz que lo interrumpió, le da una intensa y a la vez amenazante mirada a Jin quien se encoge de hombros sorprendido. Por mi parte miro a la persona que ahora esta parada en el marco de la puerta de entrada con un vestido rojo que le queda espectacular, el mismo color que sus labios. Me sonríe con superioridad caminando hasta nosotros—. Que lindo es verlos chicos.
Le acaricia la barbilla a Jungkook aun con aquella sonrisa en los labios, pero esta vez sin quitarme la mirada de encima. El estomago se me contrae ante aquella acción, que ganas de decirle un par de cositas en la cara, pero no hago nada me quedo quieta, no haría una escena y menos en aquel lugar. Intento sonreírle con amabilidad forzada, pero apuesto que se me nota que para nada me ha gustado aquella acción.
Jungkook se aleja de una manera tosca mirándola con asco y rabia, a él tampoco le a gustado que le tocara.
—¿Qué haces aquí? —Pregunta con un tono de voz frio erizándome la piel, nunca lo había escuchado dirigirse a alguien así—. Usted no ha sido invitada.
—Bueno, sin embargo, tengo derecho a estar aquí. —Responde sin perder en ningún momento su expresión y sin verse para nada intimidada—. Después de todo, te recuerdo que yo también soy Jeon.
Con aquello Yeri se aleja de nosotros sonriendo ampliamente, ignorando por completo lo que tuviera que decirle Jungkook.
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Cuenta regresiva de capítulos para que se acabe Boss: 3
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