Boss|J.Jk

Capítulo 17: Algo que no esperaba

Termino de cerrar por completo la puerta de la oficina de Jungkook, dejando a este adentro con aquella chica de cuerpo y piernas perfectas, labios rojos y mirada profunda. Me es inevitable no sentir un toque de celos y quizás enojo. Aquella chica era linda, no lo negaría. Así que el tan solo pensar que estaba a solas con él, me hacía sentir extraña, quizás fuese desconfianza o quizás también celos, celos que me costaba admitir pues él y yo no éramos nada en especial.

Lisa desaparece rápidamente de mi visión, perdiéndose por el pasillo que da hacia el ascensor. Por mi parte me quedo parada en frente de la puerta de mi oficina, debatiéndome en sí entrar o quizás en ir por algo de beber. Algo frío, pues seguramente mis mejillas estaban más que rojas y no solo de vergüenza —por el hecho de que casi nos pillan en la oficina— si no porque una gran parte de mí le hubiera gustado terminar con aquello. Al final había terminado por entrar en aquel lugar solo para poder recoger mi teléfono y poder enviarle un rápido mensaje a Hoseok, diciéndole que si quería ir por algo de beber conmigo en la cafetería de la primera planta.

Espero más o menos unos dos minutos, en los cuales no recibo ninguna respuesta por parte de mi amigo, quizás es porque está ocupado llenando papeleo o haciendo algo referente a su trabajo. La verdad es que yo no tenía nada que hacer y quería desviar los pensamientos de que Jungkook se encontraba con alguien en su oficina, así que salgo de la mía con teléfono en mano. Camino hasta el vestíbulo, donde Lisa se encuentra sumergida en un montón de papeles. La pobre suspira sin despegar la mano y la mirada de una de las tantas hojas que tiene. Me acerco a ella decidida a ofrecerle mi ayuda, mi té helado podría esperar.

— ¿Todo bien, necesitas ayuda? —Me acerco hasta el mostrador apoyándome en este, mientras le doy una pequeña sonrisa amigable la cual me devuelve antes de negar.

—Estoy bien. —Murmura—. No es necesario que me ayudes. —Su sonrisa se borra mientras devuelve la vista a su escritorio. — No creo que a Jeon le guste y menos ahora que ella está aquí... —vuelve a murmura, esta vez perdiéndose por un momento en sus pensamientos. Me daba pena verla así, pero la curiosidad por preguntar me fue inevitable—.

—¿Ella? ¿Te refieres a la chica que está con Jungkook? —Ella asiente, volviendo a posar su mirada en mí, parece de repente sorprendida.

—¿No sabes quién es ella? —Niego, y aquello parece sorprenderle aún más—. Pero eres la asistente de Jungkook... Acaso él... —Vuelve a susurrar, esta vez demasiado bajo, como si quisiera que no la escuchara. Se muerde el labio inferior dejando en el aire sus palabras—. Ella es Kim Ye Rim.

Yeri, el nombre que no había dejado de sonar en toda la empresa y que, por alguna extraña razón, yo no tenía ni idea de quien era o del porque Jungkook me quitaba las cosas que tenían que ver con aquel nombre.

—¿Yeri, ella es...?

—Me sorprende que no sepas, ella es la es...

Sus palabras son cortadas rápidamente, cuando escuchamos fuertes pisadas de tacón acercándose a nosotras. Las mismas que interrumpieron hace unos minutos en la oficina de Jungkook.

La misma chica que había visto entrar en la oficina de Jungkook minutos antes, ahora se encontraba caminando hasta el ascensor, meneando sus caderas con cierta sensualidad. Cuando este llega y ella entra, puedo notar que ya no tiene labial y su cabello esta algo desordenado. Mirándola mejor, tiene la falda más levantada. Me sonríe de forma maliciosa justo en el momento que el ascensor cierra sus puertas.

¿Acaso ella y Jungkook?... No, _______. No empieces a montarte películas.

—Lisa, dile a JiHyo que suba, necesito hablar con ella en este momento.

Jungkook logra sobresaltarnos a ambas, tiene el cabello alborotado y sus labios están rojos. Le miro a los ojos, lo cual él ya estaba haciendo. Una presión en mi pecho se hace presente, tan solo pensar que él la ha tocado me revuelve el estómago. Desvió la mirada sintiendo una presión en mi pecho. Lisa asiente rápidamente, este tan solo suspira girándose para volver a su oficina.

—Iré yo. —Le aviso a lisa.

—No, no, Jeon no está de buen humor y no quiero hacerlo enojar más. —Contesta, levantándose de su asiento—.

—Por favor, Lisa. Tienes mil cosas que hacer, no me cuesta nada ir a buscar a JiHyo. Jun..... Jeon no te dirá nada, confía en mí.

Esta suspira rendida accediendo a que sea yo quien vaya. Una sonrisa se forma en mis labios, me dirijo hacia el ascensor esperando a por este para poder ir a lo que era mi antiguo piso de trabajo. Una vez las puertas se abren salgo de este, varias miradas se posan en mí, más que todo de chicas. Miro hacia el puesto de trabajo de Hoseok, este no se encuentra ahí, pero si sus cosas, su compañero de trabajo tampoco esta, mmm que raro.

Camino mostrándome segura hasta la puerta del despacho de JiHyo, el cual queda en un pequeño pasillo un poco alejado de los puestos de trabajo. Acerco mi mano dispuesta a tocar, pero me detengo al escuchar un gemido provenir de adentro. Parpadeos varias veces, creyendo que aquello solo fue una confusión o parte de mi imaginación, pero un segundo gemido me confirma que no lo fue. La sangre me sube a las mejillas en el momento que la escucho jadear, pidiendo a aquel misterioso desconocido por más. Con toda la fuerza del mundo para no salir corriendo, toco la puerta.

Los gemidos cesan, convirtiéndose ahora en silencio. Vuelvo a tocar la puerta, recibiendo un "ya voy" apresurado por parte de ella. La puerta es abierta unos minutos después. Al ver quien me abre, mi sorpresa se hace presente y no me molesto para nada en disimularla.

—Hoseok.... —Murmuro convirtiendomi sorpresa ahora en una expresión de dolor y confusión.

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[E D I T A D O 08/02/2021]

[MENSAJE ANTIGUO; pero sorprendente que sea casi para la misma fecha]
Si hay errores ortográficos, los corrijo más tarde. Feliz san Valentín ♥.