Siempre serás tú •jughead Jones•

•Capítulo 1•

Hanna Pov:

Me encontraba sentada en mi cama, pensando lo que estarían haciendo mis compañeros en ese momento, mientras corrían unas cuantas lágrimas por mis mejillas, camine hacia la ventana para tratar de recordar algo, aunque sea una palabra del porque estaba en este horrible lugar, pero mientras más me esforzaba, menos habían resultados.

Comencé a resignarme, sabía que no podría salir de ahí en bastante tiempo, pero aún tenía algo de fe en mi interior, solo quería de ahí corriendo en busca de el dueño de mis sonrisas, jughead Jones.

Estaba ideando un plan para escapar de este podrido lugar hasta que comencé a ir gritos, no es por ser chismosa pero las voces que se escuchaban por el otro lado de la puerta me eran muy familiares.

Me acerque a la puerta para escuchar al menos un nombre para confirmar mi teoría y terminar con mi plan de escape, hasta que al fin dijeron uno de ellos, y si.. teoría confirmada eran las Cooper, aún que realmente no entendía que hacían en ese lugar tan desagradable. Aunque ahora estaba dudando en tratar de pedirles ayuda, nunca me cayeron bien, en especial Betty, siempre creí que me trataba de quitar lo que era mío, aunque quizás estaba equivocada.

—¿Todo bien señorita Blossom?— hablo una de las monjas mientras abría la puerta tomándome de sorpresa.

—Si, todo está en orden— conteste su pregunta mientras me daba una pastilla.

—No deberías estar escuchando conversaciones ajenas.

—No era mi intención, solo quería saber si era alguno de mis hermanos o mi madre.

—suspiro tratando de convencerse por mi respuesta—De Acuerdo pero no te metas en más problemas, ¿Entendido?.

—asentí con mi cabeza— ¿Cree que algún día pueda salir al jardín? Aunque sea 5 minutos.

— Por mi te dejaría pero tus padres no me lo permiten— contesto la monja con sinceridad mi pregunta, aunque esperaba a que accediera por lo menos una vez— Quizás en la noche mandé a una enfermera para que te saque a dar un paseo.

—Muchísimas gracias, hermana.

Y con esa respuesta podría comenzar con mi escape solo hacía falta que llegará la hora para salir de aquí después de 4 meses.

De un momento a otro comenzaron a sonar alarmas mientras se oían gritos desesperados y todos decían una cosa Polly Cooper había escapado. Nada podía salir mejor este día, no lo tenía planeado pero esto será muy útil para poder escapar, seguía preparando mis cosas cuando entró la enfermera de la que había hablado la monja hace un par de horas.

—Señorita Blossom, lo lamen...— no la deje terminar la frase tomé un franco que tenía en el cuarto y golpe su cabeza con el.

Cuando la enfermera quedó noqueada salí de la habitación y empeze a correr hacia la salida, aprovechando que todos estaban buscando a la novia de mi hermano, logré salir y me dirigí hacía thornhill, tarde un tiempo pero al fin llegue.

Al estar frente a la puerta sentí un gran alivio en mi interior, por fin estába en casa, y aunque aún no recordaba nada desde la última vez que estube en pop's, estába demaciado feliz, realmente extrañaba sentirme así, tomé valor y toque la puerta.

—¿Hanna?.