Trabajando para Matt Bomer (Selena Gomez & Matt Bomer)// TERMINADO// 1er LIBRO

Capítulo 13.-¡Eres frustante!

-----Selena-----

     Desperté con un gran dolor de cabeza, por lo que tuve que bajar a tomar un calmante.

Después me di una larga ducha y me vestí con una camiseta holgada de media manga, pantalones cortos y unos botines marrones con tacón. •••foto multimedia•••

Camino al trabajo, paré en el Starbucks y compré un café.

Ahora me encontraba delante de la puerta que daba al despacho de Matt. No sabía si realmente entrar, ni sabía cómo me trataría después de nuestra discusión de ayer.
Supongo que por mucho que lo pensara, no tenía otra opción, por lo que finalmente acabé llamando a la madera y tras el "adelante", me adentré en la sala.

Matthew me miraba atento.-Has venido.

"No. Me he quedado en casa y por eso me estás viendo."

-Tenía que hacerlo.

Él me seguía mirando, cosa que me incomodó.-Voy a por tu café.

No esperé ni a que me contestara.
Fui a la sala de cafeteras y le preparé el café de siempre.
Volví y se lo dejé el escritorio.

-Gracias.

Me quedé impresionada cuando me agradeció, pues él nunca lo hacía.

Matthew continuó mirándome de vez en cuando. Me estaba poniendo nerviosa.

De repente noté como mi teléfono vibraba. Lo saqué de mi bolsillo y vi que era un mensaje de Jake.

"¿Te apetece quedar hoy para comer?"

Lo pensé durante un par de segundos. Acabé aceptando, pues pasar un tiempo con mi amigo, me haría olvidar por unas horas mis problemas, además de que me apetecía.

"Me parece bien. ¿A qué hora?"

"Quedamos en el restaurante de pasta al que íbamos siempre los viernes, a las 14:30."

"Allí estaré."

Guardé de nuevo mi teléfono en el bolsillo.

Observé que había unas cajas apiladas en el suelo.-¿Las cajas son para subir arriba?

-Sí.

Fui hacia allí y cogí éstas.

-Ey, ¿qué haces?-Se levantó y vino rápidamente hacia mí.

-Llevar las cajas arriba.

-Pero ya llamaré a algún encargado para que haga eso, te puedes hacer daño.

-No me voy a morir por subir un par de cajas...

Él suspiró.-De acuerdo. Pero ten cuidado.

Asentí sonriente y salí de la habitación.

Costó un poco llegar hasta el ascensor, pues las cajas pesaban bastante.

"¿Se puede saber qué guarda aquí? Apuesto a que es una colección de piedras..." Bromeó mi subconsciente.

Por fin llegué al ático. Dejé caer todo al suelo.

-Ay mierda.-Me quejé cuando me hice un corte en el dedo índice, causado por parte de una grapa que sobresalía del cartón.

-Creo que realmente voy a morir.-Me reí.

Bajé y entré en el despacho de nuevo.

-Después de todo sigues viva...

-Eso parece. Aunque hubo un momento en el que dudé si realmente iba a sobrevivir.

-¿Te has hecho daño?