MINI HISTORIAS [Minjeong | Terminada]

INFERNO

Lee Minho jamás ha escapado del infierno y menos a la tierra.

Pero cuando tuvo la oportunidad, no dudó ni un segundo en bajar para hacer de las suyas, para jugar con los seres humanos que caigan en sus garras.

Como un buen demonio, Minho tenía la tarea de recolectar la mayor parte de almas humanas, cegando sus pensamientos, haciéndolos caer en la peor locura posible hasta que lleguen a rendirse en la idea de seguir viviendo.

Y qué mejor para empezar con su lindo trabajo que yendo él mismo al núcleo de todo, para saborear con sus mismos labios el dulce sabor de los pecados humanos.

Ante ese pensamiento, una sonrisa se aloja entre sus labios, antes de que pudiera bajar de su auto infernal, ganando gran atención de los simples y asquerosos hijos de Dios. Pero después de todo, no le importa ninguna de las miradas que tenía en ese instante sobre él.

Porque al final, todo era más divertido, si los ojos de todos caían sobre su trasero, porque eran más fáciles de caer.

Hombre o mujer.

Transexual, bisexual u homosexual.

No importa que es con lo que te identifiques. Si lo ves directamente, tus más oscuros deseos serán saciados antes de tu muerte.

«Actualmente está saliendo con tres personas. Wow, quien fuera él, miren ese Lamborghini»

«Rayos, es tan guapo. Tiene buen trasero. Debería hablarle y tal vez sacarle dinero.»

«La señora de la esquina está vendiendo las mejores drogas ¿Debería conseguir algunas?»

«Mañana es el concierto, ¿Querrá ir conmigo? No me rechaces por favor»

«Ojalá pueda hacer que se quede y deshacerme de su novio para que sea mía por fin y para siempre.»

«Debería deshacerme del cuerpo que hay en mi camioneta. Todos acá son unos tontos, debería matar a alguien.»

"Pensamientos y deseos humanos".

Es uno de los olores más dulces e embriagadores para un demonio, y lo será por toda una eternidad gracias a su ser inmortal e insaciable de maldad.

- Ja ja ja -ríen algunos- ¿listan chicas para la ronda de mojitos? Ja ja ja

Sin embargo, al ingresar y encontrarse con cada uno de aquellos humanos en medio de la multitud desesperada y perdida, escuchando de un lado a otro, las voces en su cabeza y sobre sus bocas, el mayor no hace más que sonreír debajo de esos lentes negros, para así seguir caminando entre ellos hacia la barra.

Es como magia sobre sus huesos, cuánto más se comportan de esa forma, más fuerte se siente y es tan divertido.

Tan caliente.

- ¡Una más! So hot men, take off the fire that this is me~

*Así que hombres calientes, quítense el fuego que este soy yo~*

Son tan divertidos, que ni siquiera pueden ver el fuego debajo de los zapatos de aquel hombre con saco negro.

Nadie lo reconoce, son tan ciegos.

Entonces aprovechando que no reconocen nada de él, va en busca de un lugar vacío, sentándose totalmente cómodo y con los brazos apoyados a ambos lados hacia atrás en aquel asiento. Es ahí que logra visualizar con deleite a todas sus carnadas pasar de un lado a otro en medio de la pista del club con luces LED, todas plagadas de almas pecadoras.