¹⁸-engaño-

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Era cansado

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Era cansado. Realmente comprendí la gran diferencia entre la energía que se consumía en un día casual, y en uno en el cual no dejabas un respiro a tu mente. Saturandola con miedos y preocupaciones.

Así que no fue de esperar que los lentos pasos hacia el lugar indicado, fuesen inconstantes por los repetidos gestos de volver a la cabaña que hacía al segundo de estresarme.

Ya que ni siquiera a ese punto mi martirio mental cesaba.

No había alternativa cual deshechase mi culpa ni temor.

Al rato de caminar con el silbido de la noche y el sonido de mis zapatos chocando sobre el frío suelo,divisé el casi amanecer que nuevamente se asomaba con sus pequeños rayos.

Y aún siendo solo unos pocos destellos de claridad lo que sobresalía de el horizonte, comenzé a correr por el nuevo miedo de cometer mi hazaña a plena luz del día y ser descubierto.

Repito, único concepto a resguardar para que el resultado fuese el correcto.

...¿O no?

Mis pies frenaron fuertemente al sentir la textura de el heno cubriendo la planta baja del establecimiento.

Estaba ahí.

Y desde mi posición se escuchaban los alegres cantos que estaba obligado a acallar.

Eso fue lo que pensé al girar mi vista hacia el metálico objeto que sostenía sobre el tacto de las llemas de mis dedos.

Pero la imágen de Nagito muriendo lentamente en este infernal paraiso me pesaba más que una mancha color rubí en mis manos.

Un suspiro hondo, para no dar marcha atrás. Para hacer las cosas cómo debían de ser.

Respondí, y comenzé a correr en su dirección mientras el deseaba de corazón, lo mejor a la pequeña Hiyoko.

Aunque... realmente... Mis bendiciones fueron en vano.

Pues sus cantos y infantiles gritos dejaron de resonar.

Observe mi hazaña con melancolía. Viendo como desde un principio me engañé al decir que Teru Teru, o Mikan eran unos malditos egoístas por querer salvarse.

Pensando que sería diferente si lo hacía por amor. Sin ver qué era aún más cruel que ellos.

Supongo que así estaba bien. Que así tendría que ser.

Que hiyoko habría muerto tarde o temprano.

Solté el cuchillo y fui a lavar mi ropa para acostarme junto a mi inhumano amor.

Rato después, todos nos despertamos por las sirenas. Siendo conscientes de lo que ocurrió antes de llegar al lugar de la hechos.

Pero antes de movernos siquiera, Fuyuhiko nos pidió expresamente que nos juntasemos en la piscina. Metros más allá de el hotel.

mastermind ; komahina <3 [TERMINADA] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora