Y ASI COMIENZA #1 (POSIBLE SPOILER)

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-Buenas noches señor. Porfavor permitame su permiso.- Pronuncia el guardia bajo su paraguas al conductor del vehiculo.
-S-Si... Por supuesto... Esta por aqui...- Le responde el chofer, visiblemente nervioso mientras busca el permiso.
-Ay dejate de tonterias, primero me levantan a las malditas tres de la mañana para que venga a ver al presidente y resulta que necesito un puto permiso no me jodas.- Reclama la persona en el asiento trasero mientras baja el vidrio del auto.
-¡Señor Wildes!- Exclama el guardia -No sabia que era usted ¡Dejalo pasar!- Le grita el guardia al portero.

En eso el portero sale de la casilla a abrir el paso al vehiculo negro, auto del año muy exclusivo. Las gotas de lluvia golpean el parabrisas y resbalan sobre el cristal como las gotas de sudor en la frente del chofer.

-Ya era hora ¡Gracias!- Dice el señor Wildes molesto

Y el auto ingresa al interior del complejo, a traves de un estacionamiento titanico, acercandose poco a poco a la entrada del Pentagono.

-¡Idiota!- Grita Wildes sumamente molesto -Casi arruinas todo imbecil! ¿¡Que demonios!?- Exclama a su chofer
-Lo siento lo siento lo siento!- Le responde el chofer muy asustado - No lo hare de nuevo lo juro! Porfavor lo...-
-¡Callate ya!- Interrumpe el señor Wildes con un grito -Maldito inutil debi saber que no serias util. Cuando baje quiero que desaparezcas no quiero verte mas.
-S-si por supuesto... Gracias...- Le responde el chofer aliviado.

El señor Wildes solo se queda en silencio mientras observa por la ventana el frente del Pentagono, todas sus ventanas y plantas al frente, las luces mercuriales pasando una tras otra iluminando el pavimento ocasionalmente.

Al llegar a la entrada, Wildes no espera a su chofer y abre la puerta por si mismo, con prisa y una mueca de disgusto mientras se cubre de la lluvia con una tableta delgada. Al entrar por fin al edificio lo detienen los guardias para un chequeo de rutina.

-Caballeros no quisiera ser descortes pero ¡Carajo dejenme ir ya!- Exclama el señor Wildes
-Lo sentimos Señor Wildes tenemos que...-
-"Tienen que" nada puta madre ya saben quien soy vengo cada jodida vez que alguno de sus jefes la caga. Si me levantaron a las putas tres de la mañana es que es importante. Asi que dejenme. Ir. ¡Ya!- Le grita a los guardias culminando asi su ultima gota de paciencia en aquella agetreada noche.
-... Por supuesto.- Le responden los guardias a Wildes.
-Carajo...- Pronuncia Wildes mientras se aleja de los guardias caminando por el recibidor.

Caminando a traves del pasillo con oficinas a los lados, pasando oficina tras oficina, computador tras computador, esquivando a la escasa gente que hay a esa hora, el señor Wildes se dirige al fondo del area, camino al ascensor, con destino a la sala de juntas directivas en alguno de los sotanos del Pentagono.

Al llegar ignora el centro de mando y a los incontables trabajadores y agentes de inteligencia caminando de un lado a otro a traves de las filas de consolas y computadoras.

-Nada fuera de lo normal parece ser.- Se dice Wildes a si mismo bajando las escaleras.

Finalmente despues de cruzar varios pasillos llega a la sala de juntas, el presidente de los Estados Unidos esta dentro, sentado en una de las sillas.
Wildes lo mira atento y cierra la puerta de la sala. Lo que ocurra dentro no podra salir de ninguna forma.

-¡Oscar!- Exclama el presidente contento al ver al señor Wildes.
-Maldicion ¿No podias esperar a mañana?- Le pregunta Wildes al presidente- Sea lo que sea te aseguro que no vale mis 6 horas diaras de sueño reparador chingado.- Le reclama
-No no podia esperar mas, esto es muy importante...- Hace una pausa mientras vuelve a su asiento- Esta apunto de ocurrir algo grande y necesito tu opinion.
-¿Que ocurre?- Le pregunta Wildes
-Siento como me acecha.
-¿Acechar? ¿Acechar quien?- Pregunta Wildes extrañado- ¿Hablas de S?
-Exactamente... Puedo verlo todos los dias por la ventana de mi oficina, mirandome desde el techo de los edificios. Y... ¡No se que hacer!- Exclama a la vez que golpea la mesa.
-Tranquilo bro, hemos progresado mucho ¿No?

MI LIBRO DE IDEAS (DE CIENCIA FICCION)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora