A segunda vista [L #1] - Último Otoño

Capítulo 15; Película VII

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Gracias por los 3k en lecturas tan pronto.

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Jolie Hasson

—Tercer piso.

Anuncio cuando abren las puertas del elevador frente a nosotros dos, nos encontramos en una plaza comercial en el centro de la ciudad. Mi jefe no va nada convencido, pero pareciera que desea mucho ser parte de mis planes y lo será tanto como me sea posible.

—¿Y cuál es el plan, Jolie? —Pregunta con su mano en mi hombro, por ahora caminar así es lo más seguro—. Puedo invitarte lo que gustes o cumplir tus antojos.

—No tengo antojos fuera de lo normal, descuida. ¡Allá están mis amigos!

Les hago una seña desde lejos y más que alegrarse por verme borraron el entusiasmo. Me apagaron la sonrisa por un momento, sobre todo Daen. Y es que extrañamente siento que donde Isaí no es bienvenido yo tampoco.

Aunque debía esperarlo, sé que las personas suelen evitar lo que les parece complejo, lo que no entienden y mucho más lo que no será fácil al primer intento, no pensé que él fuera a reaccionar así, no Daen.

—El perímetro es seguro, te lo prometo Is.

Le confirmo pidiendo que camine con más ligereza, pero no deja de reír preguntando; ¿por qué hablo como ladrón encubierto a punto de atracar un banco?

—¿Hola? —Es todo lo que dice Abi con desconcierto, a decir verdad ninguno pone mala cara, pero falta poco.

—¿Qué pasa? —pregunto tomando una posición más cómoda entre ellos.

—La intención es ver una película... Es un poco incómodo —Daen hace ademanes señalando lo obvio antes de empezar a susurrar—. ¿Por qué has traído a tu jefe?

—Lo tengo contemplado. Ustedes entren al cine, nosotros iremos a una cafetería, podemos cenar juntos cuando la función termine.

—¿Y no pensaste que alguno querría dar una noticia privada? Ni siquiera nos avisaste de su presencia —insiste mi amigo entre dientes.

—¿Qué te duele Weller? ¿Acaso nos lo contarías a la mitad de la película? —enarco una ceja inconforme de su actuar.

—¿Podemos hablar allá?

Señala a un par de metros hacia los barandales de cristal cercanos a las escaleras eléctricas. No respondo, solo avanzo. No es necesario que entienda mi mal humor, creo que sale a flote por sí solo.

—¿Por qué lo has traído? Se supone que la salida era nuestra Jolie. Además que incomodo explicarle que veremos una película, ¿en que pensabas? ¿Qué le haría feliz entrar al cine? ¿Va a menudo?

—Si es todo, pueden ir a ver su película.

Giro indiferente hacia mis dos amigas que al igual que Isaí están riendo. Sonrió de verlos con aquella actitud infantil, sé que están hablando de mí pues escucho mi nombre sin parar a pesar de la lejanía e imagino a Abi intentando compensar la actitud majadera de nuestro amigo, al menos para que no me despida, ella piensa en nuestro futuro. En el mío y el de ella.

—Si, es todo.

Confirma antes de ir hacia las taquillas molesto cómo jamás había estado conmigo, por lo que decido caminar en sentido contrario y alcanzarlos.

—Es un poco imprudente, jamás se calla, tiene cada ocurrencia, es demasiado torpe, de-ma-si-a-do —Recalca Abi—, pero es la mejor chica que pudo llegar a tu vida Isaí.