Capítulo 8: El oficial del consejo estudiantil

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Fue varios días después de que me uní al consejo estudiantil. Me pidieron que consiga algunos documentos para nuestro asesor, Flud-sensei, y lo llevé a la sala del consejo estudiantil.

Cuando abrí la puerta y entré, Sensei estaba durmiendo con la cabeza en la pequeña mesa utilizada para el trabajo de oficina cerca de la ventana. Parece que tuvo una pesadilla, así que lo desperté. Al principio, solo necesitaba darle los documentos, pero para matar dos pájaros de un tiro, me arremangué las mangas y comencé a organizar la estantería.

(Sensei era me veía un poco raro hace un momento, ¿Cierto?)

Después de que traté de despertarlo, cuando abrió los ojos, me observo asustado como si viera un fantasma. Bueno, fingí que no me di cuenta. Tal vez tuvo un muy mal sueño.

Me sentí aliviada cuando su expresión volvió a la normalidad después de un rato.

Mientras me preguntaba sobre eso, seguí organizando la estantería y miré en secreto a Sensei que estaba a mi lado. También se estaba arremangando para ayudarme con el trabajo. Sí, el color de su rostro estaba mejorando.

En ese momento, escuchamos el sonido de golpeteos desde la puerta.

- "Sí, pasa".

Sensei respondió sin moverse. Ninguno de los dos podía abrir la puerta ya que teníamos algunos libros en nuestras manos.

- "Discúlpeme. Ah, lettie. ¿Qué estás haciendo?"

- "Un poco de limpieza. Sensei también está ayudando".

El que entró fue Al. Si Al estaba aquí, significaba que las clases de segundo año habían terminado.

El primer año y el segundo año tenían un plan de estudios diferente, y el segundo año recibió más conferencias que nosotros. Por eso solía venir aquí antes que los demás.

- "Suena difícil. Déjame ayudarte también".

- "No, no, el príncipe debería sentarse allí y beber té. Pronto, Anna traerá el té aquí".

- "Entonces, hasta que llegue Anna, ¿de acuerdo?"

En esta academia, había sirvientas y mayordomos que eran contratados exclusivamente por la academia. También había un salón sólo para aristócratas con algunos camareros allí. Por lo tanto, a los criados y compañeros traídos por los estudiantes no se les permitió servir dentro de la academia.

Sin embargo, debido a que ahora era miembro del consejo estudiantil, por mi circunstancia especial se me dio el privilegio especial de llevar a Anna a la sala del consejo estudiantil para que me ayudara con mis actividades extracurriculares.

Y claro, mi circunstancia especial de la que hablo era ser miembro del consejo estudiantil.

Normalmente, el consejo estudiantil utilizaba a los criados contratados por la academia. Sin embargo, esta vez estaba la preciosa familia real como uno de los miembros.

Para excluir diversos peligros, desde el año pasado, el criado contratado por la academia se limitaba solo a los empleados que trabajaban en la familia real. Debido a que yo también me estaba uniendo, Al dijo: "Si es la criada de Lettie, está bien". Por lo tanto, permitieron que Anna entrara en la academia.

Esos diversos peligros en los que estaba pensando era el envenenamiento y otras contramedidas. Sin embargo, se permitió a Anna también para evitar que la otra criada llegara a poner drogas. Qué mundo tan aterrador.

Si este privilegio fuera atrapado por los oídos de la señorita Macdowell, probablemente trataría de joderme de nuevo. Personalmente, yo también quería investigar algo. Se trataba de la caída.

- "¿Por qué sacas ese libro?"

- "Um... eso debería estar aquí. Ah, el libro que sensei tiene debe ser puesto aquí."

- "... Hee, sólo estamos reordenando los libros, pero fue fácilmente puesto falsamente."

Al se unió a nosotros ordenando suavemente, se cruzo de brazos y miró fijamente a la estantería. No podía creer que dejara que el príncipe hiciera tal trabajo. Si esto fuera escuchado por las fracción de Al , no solo por ellas, las damas de la fracción de Theo también estarían enojadas.

Theo y Al me dijeron que les hablara normalmente como antes en la sala del consejo estudiantil. Debido a la falsa explicación, me sentí incómoda con la forma en que los demás nos miraban y decidí tomar cierta distancia de ellos. Pero dijeron que no habría ningún problema aquí. Aquello fue toda una falacia.

Además... estaba el hecho de que yo era la única chica miembro del consejo estudiantil.

(Theo, ¿Dónde fue que conociste a esa hermosa mujer.)

Más correctamente, una hermosa madre.

- "Violeta-sama, he traído el té".

Después de unos golpecitos, escuché la voz familiar de Anna. Así que decidimos pausar el trabajo y nos tomamos un descanso.

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