Capítulo Treinta y Seis

15 1 0
                                    

Dania

La vida me ha enseñado que las personas entran y salen, a veces por nuestro propio bien otras veces ni siquiera se sabe porque y a pesar de todos mis esfuerzos por alejar a Sebastián espero que al terminar toda esta situación el sea la excepción que sea Sebastián quien rompa las reglas, los pronósticos, las estadísticas y se quede habitando en mi corazón y en mis brazos para siempre —¿que haces aquí?— pregunto al ver a Sebastián fuera de las oficinas de Patricio Walker claro que ya sabía que hacía aquí pero hay que fingir que no —estoy tan sorprendido como tú Lindura— yo solo pongo los ojos en blanco —no me digas que al fin me darás el divorcio— mencionó el se acerca un poco a mi —es eso lo que quieres Dania— pregunta con un poco de miedo yo solo procedo a entrar al elevador —lo harías, es decir me dejarías ir seguir con mi vida, aparentar frente a todo el mundo que esto realmente nunca pasó— pregunto y el niega —no pretendo curarme de nadie ni olvidar ni negar lo que ame o en este caso a quien amo, tendría que perder una parte de mi y no pienso andar por la vida en pedazos—ambos nos quedamos callados un par de segundos—pero si lo que necesitas en que te de el divorcio lo haría con tal de que seas feliz— asentí —vaya eso fue fácil— mencionó —quiero que sepas que se que nunca me has pertenecido que siempre has sido libre pero eso no significa que no daría todo lo que tengo por ti Dania, daría absolutamente todo por ti... me gustaría decir que soy feliz con poco pero soy feliz contigo y tú vales mucho— cada palabra hace que me debata entre decirle la verdad o no tenerlo frente a mi, tan cerca, ver sus gestos, su sonrisa, sus ojos, tener esas ganas de besar sus labios, de abrazarlo fuerte y decirle lo que siento, de decirle que lo quiero, que conmigo va a estar bien, que puede confiar en mi y que pase lo que pase no voy a dejarlo solo nunca, porque lo quiero, porque lo quiero demasiado, porque me hace feliz, porque me hace bien, porque lo que siento por él es lo más sincero que hay en mi... pero no puedo no aún —no me vendo Sebastian no tengo un precio y si lo tuviera no podrías pagarlo—
—te compré una vez quien dice que no puedo volver a hacerlo—sonrió forzadamente —ese es justo el maldito problema que nunca fui realmente tuya si no mas bien que me obligaste a estar contigo— el sonríe y se acerca a mi —ambos sabemos que llego un punto donde estar a mi lado ya no era una obligación— no respondo nada solo lo miro pues se que tiene razón, no supe cómo ni cuándo pero estar a su lado hace mucho dejo de ser una obligación— no voy a dejar de luchar por lo nuestro Dania ambos merecemos mas—
—por lo que recuerdo tu y yo siempre hemos terminado aún sin siquiera empezar, deja de intentar lo imposible Sebastián—el pasa su mano por la cara, yo giro para dar un suspiro pues esta situación me está costando mucho, unos segundos después lo siento justo detrás de mi—¿como puedo hacer eso cuando se trata de ti?—no digo nada Sebastian toca mis hombros y descansa su frente sobre mi cabeza —no puedo hacerlo Dania—quito sus manos de mis hombros y sin mirar atrás salgo cuando llegamos al despacho del abogado, he salido de ese elevador aparentando una fortaleza para alejarme de el pero se muy bien que no podré dejarlo salir de mi vida ¿como podría cuando se trata de el?

Entro en la oficina del padre de Matt donde estuve hace solo una hora planeando todo esto —señor y señora Lancaster bienvenidos— Sebastian y yo saludamos a Patricio y nos sentamos frente a el —mi nombre es Patricio Walker y los cite porque es de mi conocimiento que están casados, así que ahora puedo darles esto— Patricio nos da una copia del contrato echo entre mi padre y el abuelo de Sebastián después de leerlo nos explican todo lo que yo ya se —entonces ahora que ambos están casados me gustaría saber ¿quién se hará cargo de L&S Buildings?—
—Sebastian/Dania— respondemos yo y el respectivamente —bien porque no pasan a mi sala de juntas ahí podrán ponerse descuerdo— nos ofrece Patricio y ambos solo asentimos, entramos y dejo mi bolsa en una de las sillas —no quiero nada que venga de ti— el sonríe —ese no es un argumento válido— cuando voy a responder a eso Matt entra —me llamaron aquí hoy, Mariposa que diablos es esto— pregunta Matt dejando frente a nosotros una copia del contrato, haciéndose el sorprendido— no lo se, solo se que Sebastián quiere dármelo y yo no lo quiero— Matt arruga su frente en señal de desacuerdo —Sebastián sabes que al cederle la presidencia a Dania su madre se quedará con todo— yo hago cara de disgusto —mi madre no es la víbora que intentan pintar para mi—con toda la hipocresía la defiendo —Mariposa tu cabeza aún no funciona créeme tú madre es más que una víbora—
—bien si eso funciona para que Sebastián no me de nada entonces si mi madre es una víbora sin corazón que solo busca dinero ahora podemos ir a firmar para que tú seas el dueño— cuestiono pero Sebastián niega —no Dania no funciona, tu padre puso mucho trabajo en esa empresa tal vez por eso dejo en la ruina la constructora aquí en Nueva York tú mereces el puesto— le pido a Matt que salga y esté nos deja solos —te repito que no quiero nada que venga de ti, se quien eres y que quieras darme esto no borrará todo lo que hiciste antes— el me observa y puedo ver un destello de molestia— dime Dania ¿quien soy?—
—Eres un canalla sin corazón cuyo pasatiempo favorito es romper cualquier ilusión que una mujer pudiera generar después haberte acostado con ellas aún cuando la gran mayoría sabe lo que va a pasar después de meterlas en tu cama se acuestan contigo y te siguen tu jueguitos pero eso no me va a pasar, no voy a permitir que me trates como mierda tres minutos después de salir de entre mis piernas— Sebastián me observa molesto pero más que eso me mira decepcionado— sabes que Dania me canse, de toda esta mierda ya no voy a insistir mas llegaste a ser todo por lo cual vivía, llegaste ser todo por lo cual no tenía miedo a enfrentarme a lo que fuera por estar a tu lado te amo tanto que cuando pasó lo del accidente creí que moriría del dolor y te he pedido de mil maneras que te quedes conmigo que luchemos juntos que reconstruyamos lo que teníamos pero tú solo sabes decir no así que ya no voy a insistir por algo que notablemente esta perdido— mi rostro no cambia y contengo las ganas de llorar tomo mi bolsa y entro nuevamente a la oficina del padre de Matt —bien entonces quién va a llevar la presidencia de la empresa en Londres— seguimos sin responder, Patricio le pide opinión a Matt y este dice todo lo que hemos acordado que por mi salud no soy apta para manejar una empresa en Londres así que a pesar de que Sebastián no lo quiere todo queda a su mando lo cual de alguna manera me da tranquilidad. Al terminar con los trámites y después de mucho pedirle a Sebastián que firmara el sale molesto y solo logro alcanzarlo en el estacionamiento —deberías entender que no puedes decidir por todos, yo tengo mi propia voz y puedo decidir si quiero o no quiero algo—
— es muy difícil entender todos tus decisiones últimamente Dania— espeta molesto antes de subirse a su auto —recuerdo cuando nos conocimos— mencionó y el se detiene antes de abrir la puerta del auto —tuve algunos momentos lúcidos ayer antes de mi desmayo no puedo creer que nos hayamos conocido antes de que mi madre nos presentara— el camina hasta estar frente a mi —¿porque no me lo dijiste?— preguntó el desvía su mirada —¿habría cambiado algo?— pregunta y aunque quiero decirle que ese momento fue el momento que lo hizo cambiarlo todo no lo hago solo guardo silencio —eso pensé— el gira quedando frente al auto y dejándome ver solo su perfil —me pediste que eligiera Sebastián y eso hice si vas a enojarte con alguien que sea conmigo, no con Matt o Patricio ni nadie conmigo— le pido molesta por su actitud —¿Terminaste?— me pregunta altanero —si quien tuviera que elegir fueras tú y no Matt y te hubiera pedido que te dieran todo...—
—te lo habría dado todo a ti sin dudarlo a la primera— asentí —y tu padre y familia se habrían quedado sin nada porque no puedes separar tu lado profesional del personal ¡No tendrías Nada!—
—pero tú si... y se que antes no lo entendía pero ahora lo hago y tal vez no lo recuerdes pero te has esforzado tanto por esta constructora, por el sueño de tu padre así que si te abría dejado el mando en Londres sabiendo que mi padre se quedaría sin nada te lo habría dado todo con la seguridad de que tú madre me quitaría el mando de Grupo Lancaster lo abría abandonado todo sin importarme nadie porque ¡ASI DE EGOÍSTA SOY!— eleva la voz pero no grita —pero tú ya sabes eso...la noche en que nos conocimos no es todo lo que recuerdas— se acerca a mi mira mis labios debatiendo en si besarme o no pero finalmente se aleja se sube a su auto y se va.
Llego a la casa y en la entrada veo a Dante junto a Olivia lleva un vestido blanco por lo cual deduzco que salió...

—ya te vas dando cuenta que soy una chica llena de sombras, verdad— por la voz de Olivia puedo darme cuenta que esta ebria —no se de que hablas Olivia, tanto Francia como tú tienen sus virtudes es por eso que estoy enamorado de ambas— escuchar eso...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—ya te vas dando cuenta que soy una chica llena de sombras, verdad— por la voz de Olivia puedo darme cuenta que esta ebria —no se de que hablas Olivia, tanto Francia como tú tienen sus virtudes es por eso que estoy enamorado de ambas— escuchar eso me sorprende —Dante tú estás lleno de luz y colores no quiero arrastrarte a mi infierno... créeme no te gustará caminar sobre esa llama—sin decir nada abro la puerta de la casa para que Dante ayude a Olivia a entrar—estás borracha, has bebido— pregunto —es lo que la gente suele hacer cuando quiere olvidar— responde mi hermana hipando —¿de que pretendes olvidarte?—pregunta Dante con un hilo de voz —de ti joder... siempre has sido tu— yo la tomo del brazo —Liv vamos arriba si— ella niega —no, yo quiero beber mas—yo doy un suspiro con cansancio— vamos Señorita la llevo a su habitación— Levita toma su mano y comienzan a ir escaleras arriba—Supongo que te marchas— mas que una pregunta es una afirmación —si, me largo de aquí— responde caminando a la salida —¿puedo preguntarte algo?— le digo haciendo que se detenga —solo una cosa antes de que te vayas, ¿porque te rindes tan fácilmente?— Dante se gira y por su cara noto que está molesto pero el no tiene derecho a estar molesto no esta vez —¿porque no te quedas? ¿Porque no luchas por Olivia?—
—eso no depende de mi eso depende de Olivia— me interrumpe y su respuesta me molesta —ahí es donde te equivocas y los dos lo sabemos ambos conocemos a mi hermana Dante y sabemos que es lo que quiere mi hermana quiere que te quedes quiere que luches por ella ¿porque no lo haces?— le reclamo mientras camino hasta donde el esta para enfrentarlo —¿lo echamos a cara o cruz?— pregunta sacando una moneda de su traje he de admitir que su pregunta me molesta pues Olivia merece más que esto Francia también merece más de lo que Dante les está ofreciendo —si sale cara elegiré a Olivia y si sale cruz me quedo con Francia — sonrió de manera cínica pero finalmente acepto —¿porque no? Siempre hay que arriesgarse por amor Dante— el bufa molesto pero lanza la moneda cuando está en el aire me adelanto y la atrapo, me acerco a el y guardo la moneda en su saco —no se que clase de relación tengas con Francia y con Olivia pero ambas merecen mucho más que un bolado— Dante intenta decirme algo pero en eso aparece Levita a quien por favor le pido que le prepare un café a mi hermana, molesta dejo a Dante en la sala subo las escaleras y entro a la habitación de mi hermana, me sorprende no encontrarla en la cama pues Levita me dijo que la había dejado recostada —¿Liv?—
—en el baño— me responde, entro al baño y la encuentro ahí abrazada al inodoro— qué haces ahí— pregunto y ella solo encoge los hombros —no me esperaba que fueras una de esas chicas que se derrumban por un hombre—
—pues... yo tampoco lo pensaba hasta que apareció Dante y siento como cada día me está jodiendo más y más — no digo nada solo doy un suspiro—no se para que me hago ilusiones el terminara eligiendo a Fran... es decir mírame quien se arriesgaría por mi— sus palabras me molestan y mas que eso me duelen pues Liv se esta subestimado— Liv tú eres una chica grandiosa y...—
—mentira— me interrumpe —Ni siquiera yo me caigo bien, ayer oí mi voz en un correo de voz y pensé cómo puede alguien tolerar oírme— suspiro —solo estás ebria okay— le digo intentando levantarla del inodoro sin embargo ella sigue ahí abrazada al retrete como si su vida dependiera de ello —odio mi cara, odio como se ve cuando hablo... y luego descubrí algo horrible— menciona yo acaricio su espalda y solo la escucho —pasaré el resto de mi vida conmigo misma— sin pensarlo mucho me recargo en la pared más cercana y estiró mis piernas Olivia solo me mira extrañada por mi acción —A pesar de que algunas veces llegaron a existir diferencias entre nosotras, y de que a veces no logremos llegar a comprendernos del todo, hay algo en lo que siempre estaremos de acuerdo, en que suceda lo que suceda siempre nos tendremos la una a la otra el punto es que eres una de mis personas favoritas así que si lo que quieres es pasar el resto de la noche metida en el baño... con gusto te acompaño—ella sonríe —no crees que eso es raro— me pregunto a lo cual me rio —Liv estás abrazada a un inodoro no hay nada más raro que eso— ambas nos reímos Una hermana es aquella que sin dudarlo se sienta a tu lado y es tu guía, quien es capaz de limpiar tus lágrimas y de brindarte el consejo preciso cuando más lo necesitas tal vez Olivia y yo no fuimos las mejores hermanas antes pero pienso recuperar todo el tiempo perdido.

Me Prohibo Amarte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora