Es extraño la sensación que puede provocar la palabra Te amo dicho por la persona correcta en el momento correcto puede hacer que sientas mariposas en el estómago que flotas sobre nubes de algodón, dichas en un momento de despedida provocan el más profundo de los dolores pero que provocan dichas por alguien quien te ha obligado a decirlas en mi opinión no deben provocar nada escucharlas ni decirlas... pero ese no fue mi caso. Cuando escuche a Sebastián decir que me amaba más de lo que algunas vez amo a Emily me provocó una sensación extraña como si una especie de electricidad me recorriera de pies a cabeza y al momento en que vi que ella lo beso me dieron Celos y esta vez no voy a negármelo o tratar de desviarlo sentí celos de que sus labios buscarán los de Sebastián tanto que salí a defenderlo con todo por un solo instante me creí toda la mentira que entre los dos hemos creado para toda su familia y el mundo—wooo dibujas increíble— la voz de Francia me saca de mis pensamientos y cierro mi cuaderno rápidamente—perdón ¿te molesta?— cuestiona al ver mi acto —no me gusta que vean mi cuaderno—admito y ella asiente—¿puedo saber qué hay en el?— sonrió y asentí—es como un diario pero con dibujos en el esta todo lo que me gusta, lo que amo— —por eso dibujas a Sebastián— me interrumpe recordándome lo que dibujaba unos instantes atrás yo solo asentí —no dire nada lo prometo— sonrió y Sebastián entra a la habitación—que hacen chicas— nos pregunta revisando su teléfono —pues quería ver el cuaderno de Dania pero...— —a ella no le gusta que vean lo qué hay en el—responde y sonrió por inercia —los abuelos han llegado y quien verte Fran y sobretodo conocer a mi novia— asentí y salimos de la habitación, Sebastián tomo mi mano algo incómodo y se que está así por la manera en que nos defendí, no hemos hablado a pesar de que una hora a transcurrido el se fue con su padre y yo me puse a dibujar. Al bajar a la sala están todos así como dos nuevos rostros desconocidos para mi —abuelos les presento a Dania mi novia—sonrió amablemente—un gusto yo soy Sophia abuela de Sebastián— sonreí y le ofrecí mi mano la cual tomo para después abrazarme— un gusto señora Sophia— ella me suelta y niega —dime abuela si ya eres parte de esta familia— sonrió y asentí —bien yo soy Darío Graces padre de Maura y el abuelo de Sebastián— sonrió —Dania Summers mucho gusto— le ofrezco mi mano pero al escuchar mi apellido el señor borra su sonrisa —que eres de Héctor Summers— lo miro desconcertada por su pregunta, bajo mi mano la cual a dejado al aire y contestó —el era mi padre lo conoció— asiente —y Jimena es tu madre— dice ahora con amargura —así es hay algún problema— —¿Tú sabias de esto Maura?— el padre de Sebastián se acerca a su esposa y la señora Maura asiente—papá sabemos todo de ella y hemos decido ignorar el pasado— le respondo la madre de Sebastián el señor me ve molesto y se va —hay algún problema— pregunto y la abuela de Sebastián niega se acerca a mi y me abraza —no hagas caso mi esposo es un gruñón y resentido ya se le pasará y por favor discúlpalo por la grosería que te a echo— asentí Sebastián se acerca a mi y soba mis hombros después de un incómodo silencio Maura nos pide que comencemos a arreglarnos ya que la gala será en unas horas. Comienzo a maquillarme ahora que termine mi peinado el cual solo consiste en una cola de caballo—Dania de verdad creo que debemos hablar— Sebastián sale del baño con un traje color negro corbata peinado y con su característico olor entre menta y crema para afeitar —de que de que tu abuelo me odia al igual que tu hermana mayor— respondo con ironía —Dania hija...— —Maura lamento mucho lo que dije es solo que...— no se que decir ya que ha entrado de improvisto—mi abuelo la ha echo sentir mal igual Sophia y sinceramente mama no comprendo porque lo hacen, estoy a nada de tomar todas mis cosas e irnos—Sebastián se para alado de mi y mira molesto a su madre como si de verdad le importara —son cosas del pasado— responde y sale de la habitación no sin antes decirme que no le de importancia y que hablara con Sophia por su comportamiento—tu madre es muy linda me pregunto de donde saliste tu— pregunto burlona y el niega divertido —Dania lo que le dijiste a Emily...— —sabía que me traería consecuencias especialmente contigo pero aclaremos solo defiendo esto que ambos hemos creado— respondo restándole importancia —haré como que te creo pero Dania de verdad quiero intentarlo contigo, hagamos las cosas bien— me levanto y suspiro negando a su petición—Sebastián tú y yo somos tan diferentes y de verdad voy a intentar conocerte, llevarnos bien intentaré ser la compañera por la cual has dejado muy claro pagaste tanto dinero pero nunca seremos más que eso— aclaro Sebastián me mira sin decir nada —ambos tenemos razones para estar juntos y definitivamente no son amorosas porque siendo realista no se si me hubiera fijado en ti en otras circunstancias y por cómo es Emily definitivamente no me habrías volteado ni a ver—continuo Sebastián sonríe —es imposible no verte Dania— responde y toma mi mano —Los dos tenemos un pasado, ni el tuyo es tan malo ni el mio es tan bueno, pero si hacemos de cuenta que no lo tenemos y comenzamos de nuevo, sin miedos, tu y yo desde cero nuestra propia historia tal vez logremos algo mejor que ser solo compañeros— niego y lo suelto— la manera en que saliste a defender esto me demuestra que ambos podemos llegar a...— —no voy a enamorarme de ti Sebastián— lo interrumpo y el solo me observa —no ocurrirá... me importas pero no te amo y no te amare jamás—sin esperar respuesta suya tomo asiento frente al espejo para continuar maquillándome —bien— dice Sebastián después de un largo rato se para detrás de mi y pone sus manos sobre mis hombros —si eso quieres eso tendrás "lindura"— sin más sale de la habitación.
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Después de un largo tiempo maquillándome me pongo el vestido y unos tacones para bajar donde al final de las escaleras me esperaba Sebastián—ya vamos tarde Dania— me dice molesto y sin esperarme camina yo me quedo quieta sin moverme de mi lugar y el al notarlo me observa molesto —camina— me ordena como si fuera su mascota—Sebastián no soy un animal baje después de estar horas arreglándome para esto— reclamo y el ríe —no voy a alagarte, por mas que yo lo intente las cosas no van a cambiar tu lo dejaste claro así que para que esforzarme ahora solo camina y vamos a la fiesta— suspiro y camino al salir lo veo entre la gente y no puedo creer que sea el me detengo en la entrada del patio y Sebastián bufa —Dania no vas a lograr nada haciendo un numerito— Sebastián nota que observo de más a una persona a el y frunce el ceño —porque vez tanto a Lorenzo— respiro con irregularidad y niego —¿Dania?— insiste y toma mi brazo —es mi ex— digo de la nada el vuelve a verlo —porque está aquí— pregunto y el suspira —recuerdas el proyecto del que te hable, el que seria bueno para levantar tú constructora— asentí y el bufa molesto —el es quien quiere que le construyan el centro comercial— cierro mis ojos y vuelvo a tomar mi pose de indiferencia— acabemos con esto solo te voy a pedir una cosa Sebastián— Sebastián lo observa aún molesto así que yo continúo con mis palabras —no me sueltes— le pido en un susurro lo cual hace que el dirija su mirada a mi —el me lastimo de maneras que no tienes idea y aún me duele no me preguntes porque o que fue lo que me hizo por favor— advierto cuando quiere preguntarme el asiente y toma mis manos —tienes que decirme algo Dania— —solo dire que a veces entre más eternos queremos ser para alguien, más fugases nos volvemos— Sebastián acaricia mi rostro —por eso te cierras a mi, lindura te han lastimado tanto que temes volver a enamorarte— suspiro y conecto su mirada con la mía —tal vez no esté preparada para que me quieran tanto— respondo con los ojos acuosos y acariciando su barbilla para dejar las manos en su cuello —encontrare la manera— responde seguro de sus palabras —hasta hace unos momentos ya te habías rendido— el sonríe amargamente y niega —hasta hace algunos momentos no te había visto así— me responde —¿así como?— lo cuestiono Sebastián titubea un poco —solo dire que tus ojos hablan por si solos, tienes una clase de mirada que reconocería entre miles— me dice acariciando una vez más mi mejilla—¿Que clase de mirada— le pregunto sin rodeos —¿te molesta que sea franco?— me pregunta con miedo —soy tal vez la mujer mas franca que podrás tener frente a ti Sebastián y me gusta que sean igual de honestos conmigo— —una mirada rota...puedo ver un corazón sangrando a travez de tus bellos ojos— su voz suena abatida como si le torturara que yo me sintiera tan rota —Dania...¿Quien te hizo tanto daño—no respondo—yo quiero ayudarte quiero que me dejes ayudarte—una lagrima desiende por mi mejilla misma que el limpia al instante —¿Como? —solo déjame entrar— sin decir nada más me besa y por primera vez en mis 22 años sentí algo diferente en este beso sentí que más que los labios me besa el alma, con ese beso que sabe a todo lo que he necesitado pero nunca había querido reconocer este beso me sabe a amor y eso me asusta de sobremanera.
••••••••••••••••••••••••• El es nuestro Lorenzo 🔥😍
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