Prólogo

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- A-Zhan. Llegaras tarde al trabajo si no te levantas ahora.

- Ai..Hiaaa.

- A-Zhan

Temprano en la mañana, Zhan permanecía acostado de espaldas. Parte de su rostro estaba hundido en la almohada, el despertador había estado sonando por varios minutos pero seguía dormido. Alguien recién vestido camino al despertador con el objetivo de apagarlo y llamar al hombre flojo que aún dormía pero en respuesta solo obtuvo una ronca e infantil negativa. Yibo suspiro y su voz se volvió más suave pero Zhan todavía no se levantaba y había expresado su protesta en silencio.

- A-Zhan, tienes que levantarte.

- ¡A-Zhan! - a pesar del rostro arrugado de Zhan, Yibo se mantuvo insistiendo, coloco su mano en el hombro desnudo de Zhan y lo palmeo ligeramente. El hombre con la cara en la almohada apretó el puño...

- ¡Déjame solo! - Zhan demando fastidiado.

- Dejaré de molestarte si te levantas, levántate, no quiero que llegues tarde.

- Me estoy tomando el día libre - Zhan escuchó el suspiro frustrado de su novio. De hecho estaba despierto desde que sonó la alarma pero no quería levantarse. Oh no. Se supone que debía despertar naturalmente.

- Incluso si te tomas el día libre, tu trabajo estará ahí esperando a que lo hagas sin ir. A pesar de que te gusta engañarte como siempre.

- ¡No hables como si fueras un anciano ahora, no sabes una mierda!

En ese momento el hombre en la cama pareció no recordar nada, se sentó y miro a Yibo, sus ojos lo miraban de forma tan intensa, casi feroz y parecía querer comerse viva a la persona que se ocupaba de sus asuntos. Yibo solo lo observo en silencio para después levantar una esquina de su boca.

- Tienes razón no la sé, solo se que mi novio no es una de esas personas medio decentes.

Zhan se quedó en silencio, incapaz de decir nada mientras veía a Yibo, que había empujado su cabeza de forma suave entre tanto la risa sutil del otro se tornaba a un tonto mimoso con la esperanza de que su estado de ánimo mejorara.

- Levántate y ve a bañarte, haré un desayuno sencillo. Puedes estar seguro de que los huevos no estarán tan malos esta vez.

Zhan sabía que Yibo apenas había estado en la cocina por que era tan malo que si Zhan no se levantaba y cocinaba para él algún día, Yibo tendría que comer algo preparado y seco para alimentarse a si mismo. Hoy, sin embargo, Yibo estaba consciente del mal humor del otro, debería decir desde ayer, por lo que automáticamente pidió ser quien cocinara.

- ¿Puedo confiar en ti?

- Bueno, compre una tostadora, y si no puedo cocinar algunas tostadas lo suficiente para que sean comestibles, al menos puedo untarles mermelada. - Yibo sonrió y le dio unas palmadas a Zhan en el hombro.

- Ve a la ducha, te llevaré al hospital más tarde.

Con eso dicho, Yibo salió de la habitación del departamento ubicado en el centro que su padre le había dado hace dos años cuando Zhan aún trabajaba en su maestría.

Si, actualmente Zhan ya no es estudiante de maestría; se graduó hace casi un año y ahora trabaja como médico en un importante hospital, específicamente en medicina deportiva. La vida no es tan maravillosamente accesible, hermoso y fragante como un pétalo de rosa; como en todo, hay una suma de problemas, especialmente para Zhan.. que enfrenta problemas laborales.

El problema al que se enfrenta es que alguien siempre lo obliga a hacer cosas con todo tipo de órdenes impensables, dejándole toda la responsabilidad, lo que es casi demasiado para él y lo tiene a punto de explotar.

Xiao Zhan/ Wang Yibo 2T: 7 Years Of LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora