T r e i n t a y t r e s

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¿Rendirme?

Me vino a la cabeza un montón de veces y lo peor es que aveces le di cabida a ese absurdo pensamiento.

¡Sí! ¡Absurdo! Porque amigo jamás me enseñó eso.

Rendirse no iba conmigo.

No desde que lo conocí. Ya que no hay nada en el mundo que me pudiera separar de él. Ni de su amor.

Tampoco hay culpabilidad cuando él es tu abogado defensor.

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