ᵃⁿᵈᵃʳ ᶜᵒⁿᵐⁱᵍᵒ - ᵛᵉʳᵃᵒᵃˣ -

Capitulo 3:

Hablando con el futuro cuñado:
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Ese día era normal.

Su grupo de amigos recientemente se la pasaba haciéndole preguntas, las cuales evitaba con otros temas, no contestaba o contestabas con cualquier cosa.

Le molestaba un poco, no quería que se metieran en sus planes.

Ni siquiera el estaba seguro si tenía un futuro siendo la pareja de Veracruz, si ese trío de idiotas se metía en sus asuntos las cosas podrían ponerse extrañas, lo último que quería.

....

Su tarde termino arruinada en un santiamén.

Al parecer ese trío había terminado en un problema... Problemon mejor dicho.

Pero de alguna forma el tenía que pagar por ellos... De la peor manera posible, ¡Ahora estaba en prisión!.

Considerando sus opciones no eran muchas, cuando se encontró con el grupo ellos le arrojaron todas las pruebas del crimen en su intento por huir, estaba aturdido por lo que la policía lo arrojó al suelo, lo esposaron y se lo llevaron a la delegación.

Sinceramente había sido doloroso, le dolía el moretón del rostro.

Así que recurrió a la única persona de su sector en la que podía confiar, además no le pediría una explicación, perfecto, premio doble.

- ¿Que? - se escuchaba sorprendido - Oaxaca... ¿Dime qué no es cierto? -

Estaba utilizando la única llamada permitida, así es, recurría a otro de sus amigos/ estado con el que mantenía una buena relación.

- es muy cierto, más que el Quesillo se llama quesillo - Contesto afirmando lo anterior, solía ser molesto en algunas ocasiones pero no era para terminar en la cárcel.

- ¿Ahora que mierda hiciste? - la persona del otro lado se notaba irritada.

- ahora sí no hice nada... Fue culpa de Chiapas, Michoacán y Guerrero - hizo un Puchero no muy notable, afortunadamente nadie lo estaba viendo, que vergüenza.

- ajam... Bueno dime en donde estás para que vaya a buscarte ¿O acaso me llamaste para otra cosa? —

- no podía esperar más de ti mi girasol - su tono de voz era dulce, trataba de molestarlo más... Estaba jugando con su suerte.

- dime de una vez o no voy a buscarte - su tono se volvió algo molesto, no quería bromas de la persona que estaba ocasionando que su hermano se portará de esa manera —

- Sisi, ya voy, no se vaya a poner celoso Nuevo León - soltó una pequeña risa al escuchar el reclamo del otro lado de la línea - estoy en...

Un rato más tarde alguien rompió el silencio del lugar.

- vengo por un idiota de nombre Estado libre y soberano de Oaxaca ¿Dónde lo encuentro? - preguntó el Tabasqueño golpeando uno de sus dedos en la mesa de la recepción.

- por aquí señor - la oficial lo llevo al lugar donde el Oaxaqueño se encontraba -

- ¡Si viniste! - sonrió el oaxaqueño al ver a su hermano —

- no digas nada, sino te dejo aquí encerrado — su mano se poso en su frente, de verdad se notaba que estaba enojado —

Así fue como Oaxaca logro salir de prisión, disfrutaba esa libertad, a cambio le pagaría a Tabasco todo el dinero que gasto en su fianza, además, también tendría que 4espo der honestamente un par de preguntas, genial, preguntas otra vez.

"En el camino a la finca"

Había respondido, bueno, si las cosas salían bien Tabasco se convertiría en su cuñado, más le valía portarse bien, a lo mejor y el lo podría ayudar en el futuro.

— Claro, seré cien porciento honesto, tenlo por seguro —

La primera parte del camino fue tranquila, ambos se mantenían en sus asuntos, la vista de Oaxaca estaba al pendiente del paisaje que ya se sabía de memoria mientras Tabasco pensaba en las preguntas que le realizaría.

Tabasco suspiró antes de realizar sus preguntas.

— Oaxaca — hablo serio, Oaxaca separó su vista de la ventana y la poso en el tabasqueño —

— ¿Qué relación tienes con mi hermano? — preguntó de golpe, sorprendiendo a Oaxaca y dejándolo en estado de shock, ¿Qué no era obvio? —

— Pensé que era obvio — respondió, su mirada estaba confundida —

Así que... Realmente tienen algo.

Pensó Tabasco, antes de que Oaxaca hablara nuevamente.

— Somos amigos, nada más... — su tono de voz se suavizo, si llevaba tiempo ocultando lo que sentía no dejaría que lo descubrieran ahora —

— ¿Que? — Tabasco freno sin avisar, Oaxaca termino golpeando en el mismo lugar donde se encontraba su moretón, ahora se veía peor, su quejido no se hizo esperar.

— ¿Cómo que solo son amigos? — preguntó desesperado Tabasco, comenzando a sarandear a Oaxaca —

— ¿Pues que pensabas? — Oaxaca tomo a Tabasco de los brazos, ya se sentía mareado —

— Pensé que ustedes dos eran... Eran... —

— No lo somos, solo somos amigos y buenos "hermanos" no te preocupes — detrás de su sonrisa despreocupada se encontraba un oaxaqueño gritando, no sabía si de emoción o preocupación —

Tabasco ya no sabía qué pensar, se había creado mil ideas en su cabeza, todas cayeron por la palabra amigos, su cabeza tenía falsas ilusiones.

— Entonces.... ¿Él te gusta? — cambio la pregunta que tenía preparada, era probable que nuevamente lo rechazará así que agrego algo más — no se lo diré a nadie ni me enojasre, solo quiero saber.

Oaxaca estaba pensando en su respuesta, ¿Que si le gustaba Veracruz? Gustar se queda corto, ¿Podía confiar en Tabasco? Era obvio, sí.

— Si te digo que si... ¿Me creerías? — su voz era suave al hablar —

— la verdad... Es difícil, nunca mostraste algún interés más allá de amistad... — la duda permanecía en su mente, Oaxaca no tenía motivos para mentirle, así que decidió confiar en él —

Oaxaca sonrió nuevamente, esa sonrisa era de orgullo, Tabasco lo sabía.

Ahora la duda era ¿Desde cuándo?