||readers; chifuyu matsuno

ʙᴀᴊᴏ ʟᴀ ʟʟᴜᴠɪᴀ

Habían acabado las clases por fin. Salí del aula y me despedí de Akane y Mika las cuales tenían club esa tarde.

Cambié mis zapatos de la escuela por los de la calle y al acercarme a la puerta de salida me di cuenta de que estaba lloviendo.

—Mierda.— murmuré para mi misma ya que no tenía paraguas. Ese día estaba siendo horrible, no había podido disculparme con Chifuyu, tuve que evitar encontrarme por los pasillos con Izumi todo el día y cuando por fin parecía que iba a acabarse, tendría que empaparme para volver a casa. Miré a mis alrededores para ver si había alguien que pudiera ayudarme pero al no ver a nadie cerca decidí esperar hasta que la lluvia cesase un poco al menos.

Pasó un rato y al estar tan metida en mis pensamientos que no me percaté de que había alguien a mi lado.

—Shoko...— maldecí internamente al oír su voz, era Izumi. Giré mi cabeza para mirarlo.

—Hola.

—Veo que no llevas paraguas, yo llevo uno, puedo compartir.— habló sacando un paraguas de un bolsillo de su mochila.

Negué con la cabeza e hice un gesto con las manos rechazando la oferta.

—No pasa nada, me quedaré en el porche hasta que cese la lluvia.— de lo que menos tenía ganas en ese momento era de interactuar con Izumi, aunque tuviera que caminar bajo la lluvia sin paraguas.

—No dejaría que te mojases y cogieras un resfriado por mi culpa, vamos.— abrió el paraguas y debido a la diferencia de altura se agachó un poco para cubrirnos a los dos. Me pareció de mala educación rechazarlo de nuevo, así que pensé en que podía simplemente ignorarlo todo el camino.

Caminamos en silencio un rato hasta que Izumi habló.

—Y...¿Qué tal con tu novio?— preguntó mirándome de reojo.

—Perfectamente.— hablé  sarcásticamente. 

—Siento si he creado problemas... ¿Se ha enfadado contigo?— me encogí de hombros, lo más seguro era que si, seguramente Chifuyu estaba enfadado conmigo y tenía sus razones.

—¿Podemos no hablar de esto, por favor?— por el rabillo del ojo vi como asentía lentamente.

—Solo digo que tienes pretendientes mejores, ¿sabes?— me miró sonriendo de lado. Sabía a que se refería... Dejó de andar y me tomó la mano con su mano libre.— Shoko, soy capaz de cometer muchas locuras si me dejas... por favor, quédate conmigo.

—Fuiste tu el que me dejaste.— respondí frunciendo el ceño, hablaba como si yo tuviera la culpa de todo. Me sentí mal por el por un instante pero traté de ignorar esos pensamientos y seguí hablando.— Me dejaste poniendo como excusa que no funcionaría a distancia, ¿Sabes como me sentí?

—Pero ahora estoy aquí, vuelve conmigo por favor.— yo aparté mi mano de la suya y miré al frente de nuevo con intenciones de irme.

— Estoy con Chifuyu, no voy a hacerle eso.— contesté con molestia a lo que me dijo.

— Pues déjalo.— habló tratando de tomar mi mano de nuevo. La aparté y comencé a caminar dejándolo atrás.— ¿¡A dónde vas?!— decidí ignorarlo y seguí con mi camino, sin embargo, estaba  claro que no me había librado de Izumi para siempre.

Caminé bajo la lluvia durante un rato hasta llegar a mi casa donde nada más llegar subí a mi baño para secarme un poco y tirarme sobre la cama boca arriba.

¿Qué estaría haciendo Chifuyu ahora?

Chifuyu

No me levanté de la cama en todo el día, me sentía mal. Puse la excusa de que estaba enfermo para no ir a clase y por suerte mi madre me creyó. No sabía como mirar a la cara a Shoko y en mi cabeza aun seguía pensando en la posibilidad de que me dejara por Izumi.