𝐓𝐑𝐘 [ᴛᴏᴅᴏʙᴀᴋᴜ] (Terminada)

Capítulo III: Dudas

Después de que Bakugou "huyese" los demás siguieron con los retos, si bien los retos eran variados ninguno llego a la magnitud de lo que mencionó la peli rosa a Todoroki.

El mencionado no objeto nada, pero le pareció extraño, por eso luego le preguntaría porque ella haría tal cosa, aunque seguro no lo recuerde por la razón en que parecía que se va iba a desmayar en cualquier momento por la bebida que tenía en manos. 

El medio albino se salvó de los retos por el resto de la velada y miraba como sus compañeros se daban besos, otros se daban abrazos e inclusive algunos cantaban a acapella canciones sin sentido.  

Ellos estaban borrachos, su lógica le gritaba que les impidiera seguir bebiendo, pero no tenía las ganas ni las fuerzas suficientes para detenerlos de todo lo que estaban haciendo, razón por la cual se trago sus instintos y siguió mirando lo que hacían.

.
.
.

Sin pensarlo mucho se levanto del sillón y se dirigió a la cocina, pero no esperaba ver que en el lugar hubiera un rubio y un pelirrojo besándose apasionadamente. Se hubiera apartado si el rubio no le hubiera mirado con un notorio sonrojo y hubiera bajado del mesón apartando a Kirishima en el proceso. 

—¿Buscas algo Todoroki? —menciono Kaminari sonrojado intentando taparse las marcas en su cuello. Dios, parecían unos pubertos.

—Solo vine por una bebida, pero puedo esperar, ustedes sigan —menciono el bicolor cerrando la puerta dejando a Kirishima y a Kaminari de nuevo solos, no estaba en sus planes arruinar a los demás solo porque no sabía que hacer.

Ya afuera volvió a escuchar sonidos salir de aquel lugar, por lo que intento espabilar sus sentidos y marcharse escaleras arriba, en su piso no había nadie por lo que se dirigió al balcón contemplando el panorama de su academia. Si que era bonito y más en una noche donde la luna llena iluminaba las copas de los árboles con un cierto brillo.

Seguro que Aizawa ya estaba en camino y los castigaría, pero eso no le importaba realmente, lo que le interesaba era la razón por la que el cenizo huyó.

Podía haber negado que no quería saber nada de él, pero su subconsciente pensaba en esa silueta y en esos orbes rubíes que lo miraban con intenciones de querer asesinarlo, cosa que no era nueva y Todoroki sarcasticamente ya lo había aceptado.

Sin duda el rubio había despertado algo en el, algo que creyo muerto hace años, solo que no sabía que era exactamente. Quizá no lo sabía.

...

- EDITADO