𝐓𝐑𝐘 [ᴛᴏᴅᴏʙᴀᴋᴜ] (Terminada)

Capítulo XV: Intento 1 "E"

— ¿Qué diablos?

— Las luces están apagadas Bakugou— hablo la voz monótona del bicolor.

— Lo sé, no soy idiota— hablo el rubio acostumbrándose a ver en la oscuridad— ¿Qué planeas, ah?— pregunto mirando la silueta de quien era Shoto en ese espacio oscuro.

— Una cita, esta es una cita Bakugou.

— ¿Y porqué la necesidad de las luces? Tienes miedo de que te salte encima— dijo burlón mientras disminuía la distancia.

Shoto era raro ¿por qué de entre todos los lugares tuvo que elegir un antro? Que más que eso parecía una gran casa.

— Eso no da miedo, pero solo era para mejorar el ambiente— respondió con la voz mas grave de lo usual para sacar de sus bolsillos un control remoto.

Iida le había explicado como funcionaba dicho aparato y también le había mencionado las particularidades de ese lugar.

No preguntaría porque el presidente sabía de eso, pero si podía intuir algo era que tenía que ver con Yaoyorozu y su ayuda no directa.

Después de todo ese edificio era una propiedad más de los Yaoyorozu.

— ¿Y pretendes que con esta maldita oscuridad mejore?— pregunto Katsuki apoyándose en un asiento que vio cerca, ahora se arrepentía de haberle prestado el celular a Sero, ese idiota lo tenía todo planeado.

— No exactamente— explicó oprimiendo el botón metálico del control, acto seguido las luces del antro se prendieron y no como esperaba Bakugou.

Ese lugar era raro pensó mientras veía las luces moradas, azules y rojas brillar por doquier apuntando un camino hacia una puerta que había sonado como si el acceso prohibido haya sido autorizado.

— ¿Qué es este lugar?— pregunto el cenizo sin dejar de mirar hacia la puerta.

— Un antro a primera vista, pero también un lugar especial para los peces gordos— dijo Shoto tomando asiento al frente del cenizo.

Bueno era de esperarse que este confundido, después de todo no muchos sabían sobre este lugar, bueno el tampoco debería saberlo, pero Shoto no era alguien que deje las cosas pasar.

— ¿Ahora dirás que ganan plata en los suburbios para hacer shows ilegales y todo eso?— pregunto levantando una ceja.

— No es ficción Bakugou, este lugar es legal, pero monopolizado por familias millonarias.

— ¿Es legal? Entonces que servicios ofrecen y por qué mierda me trajiste aquí.

— Una sala de apuestas junto a un ring, la gente esta obsesionada con eso; y si te traje aquí no es solo para tomar como estas pensando. Pensaba que debía ser original— hablo Shoto evadiendo la mirada del cenizo, le era difícil explicar todo.

— Y muy original— hablo sarcástico mientras golpeaba la mesa en sonidos rítmicos— ¿Tú estas metido en eso?— pregunto dejando de emitir sonidos viendo como el bicolor fruncia las cejas.

Se veía tan inocente y Katsuki estaba odiando ese hecho.

— Si te refieres a las apuestas claro que no, no me gusta centrarme en cosas que no me corresponden, aparte el ring es muy arriesgado para todos.

— ¿Por eso este lugar este cerrado? — pregunto levantando su vista hacia el techo.

— Como te dije es un lugar de millonarios siendo uno de sus principales fundadores el padre de Yaoyorozu, pero no con el fin de quitar toda esperanza a las familias.

— Así que un sitio benéfico que parece que no tiene esas intenciones— concluyó Bakugou levantándose del lugar de donde estaban sentados— Y bien ¿no me llevaras a dar un tour?

— Claro— habló quizás algo emocionado Shoto, agradecía que Katsuki este interesado en tal lugar y no haya hecho muchas preguntas sobre como funcionaba tal sitio.

Bakugou solo ignoro esa cara que estaba haciendo el bicolor y se acerco al sitio del bartender para tomar algo de allí, suponía que Shoto había alquilado el local entero

Y no se equivoco cuando este le tendió las copas de vino tinto y le dijo que definitivamente lo había alquilado por lo que resta del día.

Iban a degustar un poco de eso antes de ir a recorrer el lugar, que posiblemente sería un sitio sangriento por su descripción.

— ¿Cómo se te ocurrió esto?

— Últimamente te pasas horas encerrado en el gimnasio de la academia, por lo que opte por un lugar parecido.

— Así que me sigues...

— Sí, es interesante verte serio a la hora de golpear el saco de boxeo.

— Nadie en su sano juicio diria eso— dijo para soltar un suspiro y dar la pregunta que lo estaba molestando desde que vio las luces— Bastardo ¿a este lugar venimos antes?

— Cuando obtuvimos las licencias vinimos juntos, nadie nos cuestiono nada por salvar al hijo del dueño ese día junto a All Might, quien desapareció misteriosamente.

— Con razón...

— También aquí fue donde sufrí mi primer rechazo por parte de ti.

— ¿Qué?

— Te dije que probemos bailar en la pista porque no había nada de malo ¿Cierto? Aunque ahora que lo digo, claro que sono mal... Yo...

— No sigas. Eso me hace acordar que prácticamente hablaste puras mierdas y te quejabas de lo hacía Kendo.

— Disculpa, mi error— dijo arrepentido mientras dejaba la copa de vino al lado de la del cenizo, ahora podían seguir si es que no la habia fregado con traer al recuerdo esa escena.

— Tch, olvida eso y muestrame este lugar— advirtió el de ojos rubíes para empujar la puerta antes de ver como la mano del bicolor lo detenía y prendía las luces.

A diferencia del lugar de fiesta, ese lugar era reluciente y completamente blanco, un pasillo con diseños de diamante si se lo preguntan.

— Vamos.

...

EDITADO