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AL DÍA SIGUIENTE

[narra tn]

Kendall: me enteré que viniste ayer, ¿por qué?

Tn: estaba aburrida en casa.

Kendall: pero aún no estás bien. Deberías volver.

Tn: ¿qué hay de ti? También resultaste herido.

Kendall: fue un golpe sin relevancia, ya estoy mejor, tampoco necesito la venda. Pero tú_

Tn: pero yo~ también estoy mejor. Ya puedo usar un poco más mi mano, no me duele al apoyarla con la muleta. Estoy bien, en serio —suspiró y sonreí, sabía que se había rendido— ¿no tuviste problemas en la entrada? Esos reporteros parecen estar más insistentes que antes.

Kendall: ¿te lastimaron? —sonreí y negué— yo entré por el sótano, ahí no hay paso para ellos, ¿también entraste por ahí?

Tn: entré por la puerta cerca del anexo. También hay restricciones para ellos por ahí.

Kendall: ... sobre el accidente, Taehyung_

Tn: ¿también crees que Taehyung lo hizo?

Kendall: ¿oh? ... no.

Tn: ... gracias... su empresa de seguridad sacó un comunicado oficial negando que tuvieron algo que ver con el accidente del anexo.

Kendall: los rumores que inventaron son un poco... impactantes.

Tn: ... —sonreí leve— solo un ingenuo podría creerlo.

Kendall: ¿han podido encontrar algo?

Tn: la policía aún trabaja en eso. La agencia de Taehyung también, aunque supongo que les está costando ya que la gente aún no confía plenamente en ellos.

Kendall: tn...

Tn: sí, dime.

Kendall: ... —negó leve— nada.

Tn: ¿te preocupa algo?

Kendall: me preocupas tú.

Tn: ... —sonreí leve y toqué su hombro— no es vida si no hay riesgos.

Kendall: ¿esperas que eso me consuele?

Tn: no —reí y bufó. El ambiente nostálgico se esfumó— en este mundo, todo el tiempo corremos riesgo. Si pensamos en eso en todo momento, no podremos disfrutar el tiempo que nos queda.

Kendall: es que... —suspiró y cerró sus ojos— lo siento.

Tn: no te disculpes.

Kendall: prometo que te lo diré todo después.

Tn: ... ¿es lo mismo que prometiste el día del accidente?

Kendall: sí.

Tn: ... Kendall, ¿de qué se trata?

Kendall: ... —lentamente rozó su dedo índice por sus labios, su expresión me preocupó un poco, la había entendido a cabalidad que debía guardar silencio— entonces esos son los planes para mañana —lo vi un poco confusa. Tomó una pegatina y un lapicero de mi escritorio y comenzó a escribir mientras hablaba— ¿necesitas algo más aparte de esos documentos? Los anoto porque temo que el golpe me provoque pérdida de memoria —rió leve— Tn, ¿solo eso necesitas?

Tn: ... sí, ¿pero puedes traerme los que te solicité por tu correo?

Kendall: claro, ¿son estos? —me mostró lo que había escrito en el pequeño pedazo de papel—

Adiós Taehyung. Libro 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora