Capítulo 13

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Dirigí mí mirada hacia Rachel, estaba sentada como toda una dama bebiendo el té.

- Mmm... Realmente es riquísimo - le dijo a la chica encargada del Servicio

-Es una infusión de frutilla, señorita, da gusto que le agrade - respondió la muchacha para luego continuar con los quehaceres

- Rach... ¿Quieres quedarte a cenar?

- No quiero molestar - me dijo un tanto avergonzada.

- No te preocupes, tu no molestas - le dí un cálido abrazo - ¿Entonces te quedas? - dije mirándola fijamente.

- Esta bien me quedaré, pero ayudaré a Sam, la pobre como que no se halla todavía - Decía mientras sonreía y se dirigía hacia la cocina.

Narra Rachel

Esto estaba pasando realmente... ¿El niño rico me estaba invitando a cenar?

<< Si, realmente está pasando, ese quien te flechó con su mirada el primer día cuando ensució tu blusa, ese mismito te está invitando a cenar en su mansión >>

Me dirigía a la cocina para ayudar a Samantha con la cena, era el primer día de la pobre en la mansión y ya había fallado, no quería que falle nuevamente y por eso la echaran -por lo poco que sabía, los padres de Rick eran súper exigentes cuando se trataba del servicio -.

- ¡ Hola Sam ! Si me permites quisiera ayudarte con la cena esta noche ¿Me dejas?

- ¡Oh Señorita! No tendría que tomarse estás molestias por favor - decía avergonzada, mientras lloraba debido a que había comenzado a picar la cebolla.

- Tranquila para mí no es molestia, es todo un placer poder cocinarle a Rick-lo digo y me ruborizo aún sin quererlo - empezaré a ayudarte, seguiré picando, tu ve y adelanta pasos.

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Por otro lado Rick estaba decorando la mesa del gran comedor, había puesto velas en pequeños candelabros de plata y estaba por colocar la vajilla del mismo material para que quedara perfectamente decorada sobre el mantel color rojo.

<<¿ Tú estás conciente de que acabas de arreglar todo tu solo, para que ella se sienta como una princesa ? >>

- Si lo estoy, y no lo hice para que se sienta una princesa, ella ya lo es - Ahora por favor llamate al silencio que yo continuaré.

No quería que nada fallara esta noche - mis padres estaban en América del Sur haciendo negocios y tendría la casa para mí solo por varios días - pero claro eso solo lo sabía yo, por el momento.

Baje un poco las luces para ambientar más el lugar y ahora sí todo estaba perfecto, solo faltaba la cena.

- ¿Estarán bien allí?

<< Mejor te fijas ,quizás Sam le cortó un dedo>>

- ¡ Ay! No seas así de mala, iré a ver.

Me encaminé hacia la cocina y ahí estaba ella portando un delantal lila y ayudando a Sam en todo cuanto podía.

Levantó su mirada y sus ojos se encontraron con los míos.

- ¡ Ey ! ¿Que haces, todo en orden? - decía con una voz súper calmada mientras emplataba

- Si ya terminé con mí parte ¿ y tú ? - Pregunté deseando que ya quede libre.

- Ya terminé, Sam solo te resta llevar los emplatados y por favor no tropieces con nada - dice mientras la mira y sonríe guiñandole el ojo.

- Bien entonces vamos mí mosquetera, te llevaré a nuestra cita - le dirijo una sutil sonrisa mientras la tomo del brazo y caminamos hasta el comedor - al llegar su boca cae abierta y sus ojos se abren de par en par.

Realmente... ¿Estás vacía? ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora