Parte 2 Toboganes y bebes

220 16 18
                                    

Día 2 del campamento.

Max se miraba el espejo — Realmente este es un campamento de cerebritos— Mientras acomodaba su cabello — Dos días y nadie se ha dado cuenta, podrán ser muy listos pero son tan distraídos—

Al salir de su cabaña quedó asombrada — No puede ser— Susie la bruja gruñona estaba terminando de instalar un tobogán gigante mas extremo que ha visto en su vida — Retiro lo dicho Susie ya no es mi bruja menos favorita del lugar —

Max se acercó a las nuevas y recién construidas instalaciones, aun podía escuchara Susie gritarle al ingeniero, parece que es un elfo — uff, esos dos están que se quieren agarrar a golpes — Mientras se divertía con la absurda discusión Erizo la abordó.

— Son muy enérgicos esos dos — La chica Erizo también venia a ver la nueva atracción.

— Y tu amigo donde lo dejaste — Preguntó Max.

— Oscar, si el es un poco miedoso a los toboganes, hace años se paralizó de miedo.

Ambas notaron que Susie después de haber golpeado al ingeniero se dispuso a abrir la atracción — Démonos prisa antes que la fila se vuelva interminable— Erizo terminó arrastrando a Max al tobogán gigante.

La fila nunca fue el problema, el enorme problema fue lo grande, no gigantesco que era el tobogán, solo los mas pequeños se lanzaban sin titubear un poco, pero ya los mayores, era divertido ver cómo temblaban de miedo antes que el yeti encargado de la atracción terminaba desesperado y los empujaba para que la fila avanzara.

— Es impresionante no es así Erizo — Max solo miraba como la pobre chica temblaba de miedo con solo ver la altura del tobogán, así que decidió tomar la iniciativa y se sentó en el borde — Que te parece si vamos juntos da menos miedo si alguien grita de terror a tu lado—

Erizo al fin tomo valor y se aferró a su espalda — Conmigo no hay nada que temer —

Justo terminando el yeti se fastidió y terminó empujando a este par — Wuuuuuuujuuuuuu — Max le divertía — Vamos Erizo si no abres los ojos no será divertido — Max le gritaba a su asustada compañera.

Después de un rato Erizo se canso de gritar y abrió los ojos en la estruendosa caída, realmente comenzó a disfrutarlo, pero para ese entonces el viaje había terminado en una pequeña piscina junto a las cabañas — Fue increíble — Erizo estaba eufórica — Tenemos que subir nuevamente, vamos no podemos perder tiempo — Erizo terminó arrastrando nuevamente a Max a los toboganes.

Max estaba por sentarse nuevamente cuando Erizo tomó la iniciativa — No ahora me toca a mí ir adelante — Ella hizo señas a Max para que se sentara con ella.

Con el mismo entusiasmo Max se sentó atrás de Erizo y la rodeo con sus brazos — Empújanos amigo yeti — Max gritó.

Ciertamente disfrutaba esta atracción y nada mal para ser solo el segundo día, es mas tenían pase libre asi que usarían esta atracción el resto del día.

Al caer a la pequeña piscina, un tiburón que servía de salvavidas los recibió con toallas e incluso les ofreció un pequeño aperitivo, si definitivamente este era un servicio de cinco estrellas, todo iba bien hasta que un fuerte estruendo llamó la atención de todo mundo, el yeti que era el encargado de cuidar el tobogán terminó resbalando dentro y al parecer el tobogán no estaba hecho para ese calibre de peso y tamaño, termino rompiendo la atracción.

Max solo podía ver como sus planes eran clausurados por un leve accidente, y las brujas donde estaban que lo pudieran arreglar con magia. — Ne como sea — Tomo su emparedado y busco qué novedades más habría en la isla, sin preguntarle Erizo le acompañó en la búsqueda de alguna aventura — Que puedo decir Max es popular — Pensaba mientras se infla el ego.

A los pocos minutos se encontró con su amigo Oscar cargando un bebe de no sé qué criatura, pero al verlo más de cerca — Es la cosa más adorable que había visto en su vida— estaba encantada con esta pequeña ternurita, no hacía mucho caso a lo que balbuceaba por ahora solo le interesaba cargar a esta cosita linda.

Al seguir a este par Max se dio cuenta de una cruel realidad del campamento Alice significa peligro, Max tuvo que disimular ignorancia frente a todos, ósea — Destruir una vida por solo diversión, debo mantener mi distancia — Pensó Max mientras escuchaba la plática.

— Así que Oscar ahora tiene un plan de sabotaje — Max pensaba que clase de venganza tomaría esa bruja contra el muchacho —y quién hubiera pensado que ese curso de costura me serviría ahora — Max pensaba casi terminaba unos zapatitos de tela para el bebe Hosward

El pequeño bebe monstruo tenía su gracia, se veía adorable tenía esa carita tan abrazable, pero Oscar seguía insistiendo en regresarlos a la normalidad, será que al final también me dio lastima, los bebés era lindos pero aun recuerdo cuando hable con ellos en esa fiesta el primer dia puede que la bruja esté abusando aunque se vea adorable, si fue contra su voluntad ya es abuso.

Al final Oscar planteó un plan y decidió ayudarles, pero la verdad le sorprendió creía que Erizo subestima las capacidades de su amigo, no solo arreglo el tobogán, uso las piezas sueltas que había dejado el contratista para mejorarlo y él solo, además de subirse a la estructura sin ningún tipo de protección, Max estaba impresionada, había visto a otros adultos sufrir por tratar de cambiar una bombilla y ahora chico realizó un proyecto de ingeniería con sus propias manos será acaso un genio loco o algo así? Max comenzaba a dudar si este chico era realmente lo que aparentaba.

La siguiente fase del plan demostró que Oscar apesta como actor, pero al final los demás campistas habían abandonado a sus bebés monstruo por el gusto de usar el tobogán y los regresaron con Alice, — esa bruja abusiva se lo merecía — Pensó Max quien también regresó al monstruo Hosward —

Max había decidido espiar el desenlace de esto desde un lugar seguro, al momento que la bruja amenazó con destruir a los monstruos bebes, Max estuvo a nada de actuar para detenerla pero la valentía de Oscar una vez mas la había impresionado no solo desarmó a la bruja obstinada, si no que además la convenció de regresarlos a la normalidad y evitar una masacre.

— Nota mental: Alice es la bruja psicópata — Max trato de recordarlo en lo que regresaba al tobogán tenía el resto del día para disfrutar de él.

Mientras seguía en la fila se encontró nuevamente con Erizo y Oscar — Hey vamos juntos— Max animaba a los que podrían a ser sus nuevos amigos a disfrutar de la diversión del mejor y mejorado tobogán de agua.

El grupo fácil había disfrutado de tres recorridos y querían seguir disfrutando del juego, a pesar del esfuerzo que era regresar Oscar se ve que aun tenia ánimos y energía de continuar e incluso se adelantaba al grupo, en cierto tramo antes de llegar a la entrada del tobogán — Erizo tengo una duda, no dijiste que Oscar era miedoso con los toboganes— Max pregunto por curiosidad.

— Oscar es complicado, a veces quiere que lo ayudes y se deja intimidar por cosas insignificantes, pero cuando se trata de ayudar a otros definitivamente es otro sujeto — Erizo trataba de darle su perspectiva

— Si creo que también lo juzgué mal — Max le comentó a Erizo

Max en su pensamiento comenzó a plantearse — Y si Oscar solo finge—

Antes de seguir ideando nuevas ideas noto que Susie estaba discutiendo con Oscar.

— Ya estarás contento pequeño bebe hiciste llorar a Alice, llego conmigo hablándome de un campista muy grosero que no la dejo hacer cosas lindas y todo apunta a ti — Susie con un solo movimiento de su varita desapareció el tobogán — Eso es por obligarme a consolar a Alice — Susie se había retirado del lugar con una risa malvada.

— Bien fue divertido mientras duro — Max terminó despidiéndose de sus nuevos amigos, el día había sido agotador y necesitaba descansar, quien sabe mañana podría haber buenas actividades.

Max echó un último vistazo a su nuevo amigo Oscar y se comenzó a dar cuenta parece que ella no era la única persona que quiere guardar un secreto en este campamento.

Mi nombre es MaxDonde viven las historias. Descúbrelo ahora